El mayor fracaso de la unión del PRI, PAN y PRD, formalizada en diciembre de 2020, fue en las 20 elecciones estatales, porque sólo logró retener tres de las 20 gubernaturas en juego en 2021 y 2022, las tres de escaso peso electoral y gobernadas por el PAN: Aguascalientes, Chihuahua y Durango.
Ciudad de México, 8 de septiembre (SinEmbargo).– La coalición Va por México, creada por el magnate Claudio X. González en su mansión de Las Lomas, fue un fiasco hasta su suspensión este miércoles 7: No logró quitarle a Morena la mayoría en la Cámara de Diputados y perdió 17 de las 20 gubernaturas que se disputaron entre 2021 y 2022.
El único resultado positivo de la alianza PRI-PAN-PRD fue en la Ciudad de México, corazón del lopezobradorismo, donde ganó nueve de las 16 alcaldías, siete más de las dos que gobernaba.
El PRI, el partido que propició la suspensión de Va por México con la iniciativa de ley sobre la Guardia Nacional, fue el gran perdedor: al ceder nueve de las 20 gubernaturas.
La unión que conformaron los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) se congeló a unos meses de las elecciones de 2023, en las que se renuevan los gobiernos del Estado de México y Coahuila, por una iniciativa del tricolor que respalda la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles hasta 2028.
Ayer, Alejandro Moreno Cárdenas, presidente del CEN del PRI, negó que la alianza esté en riesgo, aunque minutos antes, los dirigentes Marko Cortés, del PAN, y Jesús Zambrano, del PRD, anunciaron que pausarán su alianza en el plano legislativo y el electoral. Moreno Cárdenas dijo que si no van juntos en 2023 y 2024 no podrán hacer frente al Gobierno, pero Cortés y Zambrano insistieron en que el tricolor debe definirse.
El mayor fracaso de la unión de los tres partidos, formalizada en diciembre de 2020 y tramada en reuniones efectuadas desde marzo de ese año en el domicilio de Claudio X. González, fue en las 20 elecciones estatales, porque sólo logró retener tres de las 20 gubernaturas, las tres de escaso peso electoral y gobernadas por el PAN: Aguascalientes, Chihuahua y Durango.
La coalición Va por México perdió Michoacán, la única que gobernaba el PRD, y tampoco pudo ganar Nuevo León, que fue para el partido Movimiento Ciudadano, ni en San Luis Potosí, donde ganó el Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
Y las 15 gubernaturas restantes las ganó Morena y sus aliados a la alianza PRI-PAN-PRD.
El PAN perdió cinco estados: Baja California, Baja California Sur, Tamaulipas, Nayarit y Quintana Roo, pero el más perdedor fue el PRI con 9: Campeche, Colima, Guerrero, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala, Hidalgo y Oaxaca.
En Campeche se fue hasta el tercer lugar el candidato Christian Castro, sobrino de Alejandro Moreno Cárdenas, y la secretaria general, Carolina Viggiano, fue derrotada en Hidalgo.
También fue derrotado un aspirante presidencial, el panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca, al perder la gubernatura de Tamaulipas.
La razón primaria de Va por México, fue ganarle la mayoría a Morena en la Cámara de Diputados, pero sólo obtuvieron 199 legisladores, 52 menos de la mayoría absoluta que buscaban, aunque su festejo fue que frustraron la mayoría calificada de dos terceras partes de ese órgano legislativo.
Las dos elecciones antes de las federales de 2024 son las gubernaturas del Estado de México y Coahuila, las únicas que ya tienen el PRI y donde la coalición con el PAN y el PRD es incierta.