El excapo, quien actualmente se encuentra recluido en el penal del Altiplano, obtuvo un amparo en mayo pasado para que el Gobierno mexicano se abstuviera de extraditarlo a EU.
Ciudad de México, 8 de agosto (SinEmbargo).- En un fallo significativo, un Tribunal rechazó la queja presentada por la Secretaría de Gobernación (Segob) sobre la suspensión de la extradición de Rafael Caro Quintero, conocido como “El Narco de Narcos”, decisión que impide temporalmente la entrega del cofundador del Cártel de Guadalajara a las autoridades de Estados Unidos.
Por unanimidad de votos, el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Penal, declaró improcedente el recurso interpuesto por Segob. La resolución fue informada el 7 de agosto a través de la lista de notificaciones del Consejo de la Judicatura Federal (CJF).
Caro Quintero, quien actualmente se encuentra recluido en el penal del Altiplano. en el Estado de México, obtuvo un amparo en mayo que prohibía a las autoridades mexicanas ejecutar la extradición solicitada por Estados Unidos.
El Magistrado Ricardo Paredes Calderón, encargado del proyecto de sentencia, destacó que la suspensión concedida a Caro Quintero debe mantenerse, asegurando que el exnarcotraficante sinaloense permanezca a disposición del Juzgado Federal en el lugar donde está recluido.
Este fallo representa un obstáculo importante para las autoridades estadounidenses que se han esforzado por llevar a Caro Quintero ante la justicia, donde enfrenta cargos por su presunta participación en el asesinato del agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena en 1985.
JUEZ CONCEDE AMPARO A CARO QUINTERO
El pasado 30 de mayo, un Juez de Distrito concedió un amparo a Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara, para que el Gobierno mexicano se absteniera de extraditarlo a EU y enfrentara en aquel país delitos de lavado de dinero, narcotráfico y el delito de homicidio por el asesinato de Enrique “Kiki” Camarena, agende de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), ocurrido en 1985.
“Se decreta de plano la suspensión para el efecto de cese todo acto prohibido por el Artículo 22 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 15 de la Ley de Amparo”, dice la resolución.
La decisión fue tomada por José Fernando García Quiroz, el Juez Octavo de Distrito en materias de Amparo y Juicios Federales del Estado de México.
De acuerdo a lo determinado por el juzgador, la parte quejosa, Caro Quintero, queda a disposición de dicho Juzgado Federal “por cuanto hace a su libertad personal, en el lugar en que se encuentra recluido y para que se abstengan de ejecutar contra el quejoso la petición de extradición, que dice, existe en su contra”, detalló el Juez.
Desde que fue detenido en julio de 2022, tras casi una década de estar prófugo de la justicia, Quintero ha tramitado varios amparos contra su extradición a Estados Unidos, mientras permanece en el penal de máxima seguridad del Altiplano, Estado de México.
“El narco de narcos” fue uno de los principales capos en los años ochenta y de los primeros en enviar droga a gran escala hacia Estados Unidos. Nació 3 de octubre de 1952 en una ranchería de Badiraguato, Sinaloa, cuna de los grandes capos mexicanos como Joaquín “El Chapo” Guzmán. En su juventud y adultez amasó una gran fortuna al grado de ofrecer, según se dice, pagar la deuda externa del país para que lo dejaran seguir operando en negocios.
Sin embargo, en abril de 1985 fue detenido en Costa Rica con 500 millones de dólares. Las autoridades lo tenían bajo la lupa por el asesinato de Camarena y del piloto mexicano Alfredo Zavala. Ambos fueron secuestrados por sicarios el 7 de febrero de 1985 en Guadalajara, el principal centro de operaciones del cártel.
Rafa Caro Quintero permaneció encarcelado durante 28 años en el penal de Almoloya, Estado de México, en Puente Grande, y desde 2010 en un reclusorio preventivo de Jalisco hasta ser liberado en agosto de 2013, después de que un juzgado desechara varias causas en su contra por fallas al debido proceso durante el sexenio de Enrique Peña Nieto. Quintero se fugó de inmediato y estuvo prófugo durante siete años. Ahora, México intenta nuevamente extraditarlo a Estados Unidos.