Más de 36 millones de votos. De ese tamaño es la victoria de Claudia Sheinbaum para la Presidencia de la República, 20 millones de votos de diferencia entre ella y su perseguidora Xóchitl Gálvez. ¿Qué significa este triunfo para la política nacional? ¿Cómo leer además los números del Congreso en las gubernaturas los resultados electorales del pasado domingo? Es el tema de hoy en ¬RADICALES.
Ciudad de México, 8 de junio (SinEmbargo).- La arrolladora victoria de Claudia Sheinbaum y Morena en las elecciones federales del pasado domingo 2 de junio ratifica cuál es el mandato que la mayoría de los mexicanos le han dando con el respaldo de sus votos: realizar reformas a la estructura del Estado mexicano.
En este episodio de ¬RADICALES, programa que se transmite en el Estudio B de SinEmbargo Al Aire, Alejandro Páez Varela, Álvaro Delgado Gómez, Carlos Pérez Ricart y Héctor Alejandro Quintanar analizaron qué significa el triunfo de Claudia Sheinbaum, lo que implica que haya recibido un apoyo aún mayor que el de Andrés Manuel López Obrador en 2018 y las responsabilidades que deberá de cumplir una vez que asuma el poder.
“Es una victoria todavía más arrolladora y esta contundencia ratifica cuál es el mandato que la mayoría de los mexicanos le están dando a ella, pero también a la coalición que la postuló, con una mayoría calificada, pero el mandato tan contundente que desde mi punto de vista la sociedad mexicana le da a Claudia Sheinbaum y a la coalición de Morena es a realizar reformas a la estructura del Estado mexicano, que no puede haber gatopardismo, que hoy en el Gobierno de Claudia Sheinbaum se le ha dotado de una fuerza constitucional para que reforme, por ejemplo, y para empezar, el Poder Judicial”, afirmó Álvaro Delgado.
El periodista señaló que ante esta responsabilidad el Gobierno de Claudia Sheinbaum no podrá tener “zizagueos” pues la sociedad revisará con lupa su trabajo. “Aquí no puede haber zigzagueos, hay un mandato explícito de Reforma al Poder Judicial y habrá una sociedad vigilante para que esa reformas se consumen, sí, con sabiduría, sí, con mucha política, sí, con alcances que sean sometidos a la deliberación, no solamente de las fuerzas políticas, aquí es muy importante que participen todos”.
Álvaro Delgado agregó que la mayoría obtenida por Morena en el Congreso no debe ser calificada como autoritarismo, pues dijo, el pueblo decidió votar de manera masiva por el partido oficialista.
“También el mandato de las urnas me parece que debe ser considerado, no como un acto de autoritarismo como lo están planteando algunos. Como nunca antes en México es un acto civilizatorio lo que ocurrió el domingo 2 de junio, no hay ningún autoritarismo, hay un acto civilizatorio porque se trató de una elección que arrojó una voluntad popular inapelable porque le proveyó a la oposición de su dimensión y desmintió también un discurso, una narrativa, mentirosa, falaz, que hoy también tiene que hacer un examen de conciencia”.
Al respecto, Alejandro Páez indicó que a diferencia del Presidente López Obrador, quien no pudo sacar adelante diversas reformas debido a que no contaba con una mayoría califica en el Congreso, Claudia Sheinbaum tendrá la posibilidad generar los cambios que espera la sociedad.
“Es muy claro y que si al Presidente Andrés Manuel López Obrador le faltaron, escaños para provocar los cambios constitucionales que eran necesarios, el pueblo México le dijo, no, se los doy a Claudia, le doy 5 millones de votos extras. ¿Qué más necesitas? Es clarísimo el mensaje que está dando el pueblo de México a Claudia Sheinbaum y sí le está pidiendo claramente que sea un cambio estructural ¿cuáles cambios? Bueno, ya los iremos viendo, pero creo yo que el mandato es clarísimo: cambios ya”.
Páez Varela ahondó en esta situación y expresó su confianza, porque a pesar de contar con la mayoría calificada, Claudia Sheinbaum, dijo, sabrá cómo administrar esta ventaja concedida por el pueblo.
“Claudia Sheinbaum podrá conducir distintas reformas en tanto que no sean vistas como imposición autoritaria, ese es el único riesgo que tiene ahorita Claudia Sheinbaum con esta mayoría ¿Cómo administrar una mayoría dentro de una democracia? Una mayoría es una mayoría, punto, no hay más que lo que hay, pero sí puedes ser tú menos beligerante y creo que es el tono de Claudia y mucho más directo”.
Por su parte, Héctor Alejandro Quintanar señaló que contrario a lo que se creía, Claudia Sheinbaum no solo ganó la elección más grande en la historia de México, sino que también resultó vencedora en todos los estratos sociales, cortando así la idea de que existe polarización en México.
“En todos los estratos ganó Claudia Sheinbaum, sea la división por edad, entre los jóvenes de 18 a 35 años, ganó entre las personas de más de 35 años y en adelante, ganó, en la división entre hombres y mujeres Claudia Sheinbaum tuvo igualmente una ventaja muy amplia, por encima de Xóchitl Gálvez. Lo que ocurrió en cuanto a percepción de ingresos de las personas desde los que ganan 10 mil pesos hasta los que ganan 60 mil o más, en todos esos estratos ganó Sheinbaum de manera contundente, en todos el promedio es del 60 por ciento a favor de Claudia por veintitantos de Xóchitl, esto debe derribar inmediatamente el mito que lleva desde 2006 sobre la famosa polarización, no hay tal polarización, existe un consenso muy amplio en este país que dio un mandato inédito en las urnas”.
Héctor Alejandro Quintanar dijo es necesario terminar co el discurso de que existe polarización en México, pues solo sirve para envalentonar a personajes como Claudio X. González, un empresario que ganó fuerza gracias al debilitamiento de los viejos partidos políticos.
“Tenemos ya que superar este discurso de la polarización porque además de que es mentira, es un discurso que sirve para envalentonar o darle poder a gente que no lo merece, sirve para que un un pelagatos o un personaje sin ninguna relevancia política como Claudio X. González sienta que lidera una gran masa social y se auto nombre como representante de la sociedad civil cuando en realidad es solamente un personaje muy menor que debido a que está pastoreando a partidos debilitados adquiere cierta fuerza, pero bajo ninguna circunstancia representa algo más fuerte”.
El académico indicó que pese a que cuenta con el consenso de la gran mayoría, esto no quiere decir que Sheinbaum tendrá vía libre para actuar a su gusto. Señaló que las minorías son necesarias en todas las democracias del mundo. “Consenso no significa unanimidad y en ningún lugar del mundo se debe condenar la existencia de ninguna minoría, es legítimo que existan minorías, es legítimo que discrepen, es legítimo que traten con las herramientas a su alcance de la democracia y respetando a sus electores que discrepen con la postura mayoritaria y que negocien, porque están en una posición del legítima desventaja.
En tanto, Carlos Pérez Ricart indicó que es necesario medir la magnitud de la victoria de Claudia Sheinbaum. Señaló que los 20 millones de votos de diferencia con Xóchitl Gálvez equivalen al total de la población de países como Chile y Países Bajos y dos veces más que en Grecia y Portugal.
Además, señaló que a pesar de los intentos de la oposición, Xóchitl Gálvez obtuvo una votación menor a la de José Antonio Meade y Ricardo Anaya juntos en 2018.
“Son menos de los que tuvo combinados Meade y Anaya en 2018, son 6 millones menos de lo que obtuvo en 2018, es decir, todo su artificio, su gran coalición, no alcanza siquiera empatar lo que tuvieron Meade y Anaya en el 18. Entonces es increíble que hoy los dos grandes dirigentes de esos partidos sigan en sus posiciones y no se hayan retirado. Entonces todavía que quieran impugnar y que Xóchitl Gálvez haya salido todavía el lunes que no están de acuerdo con los resultados los electorales es una irresponsabilidad política enorme”.
Pérez Ricart señaló que lo ocurrido el pasado domingo fue un referéndum en torno a Andrés Manuel López Obrador. Aseguró, que pese a no haber estado en las boletas, la gente votó por el tabasqueño.
“La lógica local a la lógica regional importó poco. Gobernadores muy buenos o bien evaluados como el de Yucatán pierde su elección, Gobernadores muy mal evaluados como el de Morelos ganan su elección, entonces en realidad lo que vemos es que no importó realmente la dimensión regional local ese 60 por ciento en que está calculada Claudia Shienbaum, se parece mucho al 60 por ciento de la aprobación del Presidente López Obrador. Entonces, en el fondo quienes tuvo en la boleta, el pasado domingo fue Andrés Manuel López Obrador, se trató del segundo triunfo del Obradorismo”.
Afirmó que la reducción en los niveles de pobreza y el mantener la unidad al interior de Morena, fueron dos puntos fundamentales para el triunfo de Morena.
“La segunda razón, que me parece la fundamental, es que la población vive mejor en 2024 que en 2018, o al menos así lo percibe, y eso tiene que ver naturalmente con los programas sociales, pero sobre todo con la política de vivienda. México dejó de ser una fábrica de pobres a partir de las políticas laborales y las políticas sociales de la Cuarta Transformación. El tercer elemento del lado oficialista tiene que ver con que con que Morena se mantuvo unida de principio a fin durante el ciclo electoral. Recordarán que había seis candidatos Claudia Sheinbaum era uno de ellos, ahí estaba Monreal, estaba Velasco, Fernández Noroña Noroña, estaba Marcelo Ebrard y sin embargo logra mantener al movimiento, logra que ningún otro candidato a gobernador se vaya con otro partido, con la excepción de la candidata de Morelos, logra generar consensos, logra repartir, logra entender bien esas lógicas locales y no permite que se salga la gente del partido lo cual lleva a liberar el triunfo electoral”.
Finalmente, y no por ello menos importante, Pérez Ricart hizo énfasis en la figura de Claudia Sheinbaum, a quien Calificó como “una extraordinaria candidata”.
“Y la cuarta transformación tiene que ver directamente con la candidata, porque todo lo que estoy diciendo es estructural, la situación de la mejora económica, el personaje de Andrés Manuel López Obrador, Morena, pero Claudia Sheinbaum, hay que decirlo ya, fue una extraordinaria candidata, yo creo que va a ser muy buena Presidenta de México, pero es una extraordinaria candidata”.
“Hay un mandato en las urnas y debe eso ser lo que rija la vida pública de México y desplacemos de una vez por todas el mito de la polarización, hay un consenso y una minoría que si quiere aspirar a ser competitiva y de nuevo algún tipo de mayoría tiene que poner los pies en la tierra”.