Ciudad de México, 8 de junio (SinEmbargo).– Pancake es una gatita que causa sensación en la red y cada día cautiva más a los usuarios, a veces con videos de ella subiendo las escaleras, de Pancake viajando y posando con su carita para las fotos. Pero Pancake tiene una característica que la hace particular: no tiene sus patas delanteras.
Claro que si eso no la ha detenido para subir o bajar las escaleras, no le impedirá tener una vida normal. Sin embargo, sus antiguos dueños no pensaban lo mismo y por ello es que pensaban dormir al felino a días de haber nacido. Pancake nació con una deformidad esquelética que la dejó sin una pata delantera y la otra doblada, por lo que no era posible que caminara como lo hacen los demás gatos de cuatro patas.
Foto: Facebook Pancake, The Two Legged Cat.
Meagan Malone, una habitante de Idaho, Estados Unidos, se enteró que las personas que cuidaban de Pancake y sus hermanos recién nacidos, así como de sus padres, iban a sacrificar al felino por sus deformidades. Malone no dudo en llevarla a casa, a pesar de la preocupación de qué iba a hacer con el gato que no podía caminar.
“Cuando llegó a casa conmigo, apenas tenía 8 semanas de nacer y no estaba muy activa, pasó casi toda su primera semana mirando hacia arriba. Cuando la alimentaba, tenía que hacerlo con cuchara porque ella no podía voltearse y se despertaba durante la noche muy hambrienta, por lo que me levantaba a alimentarla”, escribió Malone en la cuenta oficial de Pancake en Facebook.
Sin embargo, gracias a los cuidados de Malone y a la motivación que hacía para que Pancake se moviera, la gatita comenzó a adaptarse a su vida con dos patas nada más. Ella comenzó a pararse, a saltar, a comer en un bol normal, el cual fue un gran paso y era más juguetona, además de cariñosa, según dijo Malone al sitio The Huffington Post.
Como Pancake tiene que “frenar” con su pecho, Malone ha adecuado su hogar con material suave y toallas puestas en toda la casa, para que Pancake pueda saltar entre muebles sin lastimarse.
Malone también indica que tiene una vida casi normal, ya que además de su condición, no tiene algún problema con su salud y como todos los demás gatos, se despierta realmente temprano, le gusta ser acariciada y acurrucarse.
Pancake también vive con su hermano perro, un basset hound, Gretel, quien le tiene miedo al gato por alguna razón. Aunque a veces juegan juntos, Gretel se la pasa escondiéndose de Pancake.
Pancake ya cuenta con más de 20 mil seguidores en su página de Facebook y las personas lo apoyan y le mandan mensajes por darle la oportunidad de vivir a Malone.
