Con el triunfo de Roma como mejor película en lengua extranjera, Yalitza Aparicio tiene un lugar asegurado en la historia del cine. Pero su sueño original con la docencia, profesión para la que estudió, no está del todo descartado. Por el contrario.
Ciudad de México, 8 de abril (AP).— Yalitza Aparicio considera que tiene tiempo para analizar cuál será el próximo paso en su carrera. Si de algo está segura, es que sea ante las cámaras o en un salón de clases, no dejará nunca de ser maestra.
La actriz mexicana nominada al Óscar por Roma, que el lunes recibía la llave de la ciudad de Panamá en el marco del festival internacional de cine en esa nación centroamericana, ha roto esquemas desde que su papel de empleada doméstica causó revuelo entre la crítica especializada pese a que no recibió una educación formal como actriz, y más aún tras convertirse en la primera mujer de origen indígena nominada al Premio de la Academia.
Con el triunfo de Roma como mejor película en lengua extranjera, tiene un lugar asegurado en la historia del cine. Pero su sueño original con la docencia, profesión para la que estudió, no está del todo descartado. Por el contrario.
“El ser actriz me está ayudando a compartir con muchas personas esos mensajes, de cierta forma educarlos… Nunca dejaría de ser maestra”, dijo Aparicio a The Associated Press en una entrevista reciente con motivo del homenaje que recibía en Panamá.
A continuación extractos de la entrevista:
AP: ¿Qué emoción le provoca recibir las llaves de la Ciudad de Panamá?
Aparicio: Me siento muy contenta que en otros países igual están muy felices por todo lo que ha pasado y que me estén reconociendo de esta forma es algo que me honra demasiado.
AP: En su natal Tlaxiaco, Oaxaca, también recibió una distinción, en forma de un mural, con una de las escenas de “Roma” pintadas por el colectivo Pelota Mixteca sobre el mercado municipal. ¿Qué le pareció verse retratada de este modo?
Aparicio: El pintor que lo hizo ha hecho muchos retratos de las personas famosas de Tlaxiaco y yo solamente pasaba a verlos. (Los retratos) están en la casa de la cultura y cualquier persona que pase por ahí los puede conocer, pero jamás me imaginé que él fuera a hacer un retrato mío.
AP: ¿Cómo se siente cuando ve todo lo que está pasando a su alrededor?
Aparicio: Me siento muy contenta pero no es por lo que me estén honrando a mí o lo que me estén reconociendo, sino por muchas cosas que la sociedad se está dando cuenta que nos falta ser más respetuosos con toda la diversidad que tenemos, nos hace falta una inclusión. Y el hecho de que se estén brindando oportunidades y muchas otras personas estén también arriesgándose a salir de su zona de confort e ir por esos sueños que pensaban que no eran posibles, todo eso hace que a mí me emocione esta trayectoria, que se esté logrando esto.
AP: Su fama también ha estado acompañada de polémica por comentarios negativos surgidos en México por sus orígenes indígenas o por su falta de formación como actriz. ¿Cuál ha sido su respuesta?
Aparicio: Siempre traté de responder a los mensajes positivos… Creo que si tú respondes a algo que no va contigo o una forma en la que tú no piensas, le estás dando ese grado de importancia. Eso siempre fue mi mensaje con el resto de la sociedad. Si hay algo que sientes que no va de acuerdo no lo respondas, tú solamente fíjate en esos mensajes que te están ayudando a salir adelante. Y aunque sea un pequeño grano de arena, espero que vaya cambiando y que muchas personas se den cuenta que necesitamos enfocarnos en cosas buenas para la sociedad, cosas que nos ayuden a crecer.
AP: ¿En qué otras actividades la veremos involucrada próximamente?
Aparicio: Hemos estado trabajando en algunas organizaciones que ayuden a los derechos de las mujeres, a las poblaciones indígenas, al rescate de la lengua materna. Son cosas en las que he estado trabajando junto con (la actriz de “Roma”) Nancy García. Ella fue mi maestra de mixteco y también hizo el personaje de Adela en la película… Hay algunos proyectos, los estoy analizando bien, tratando de ver que sean temas que sean reales para la sociedad, temas que los hagan recapacitar.
AP: Tras el éxito inesperado como actriz y con una educación profesional como maestra, ¿cuáles son sus planes? ¿Volvería a ser profesora?
Aparicio: Muchas veces me han dicho eso, que tengo edad para pensar y ver qué es lo que quiero para hacer y deshacer de mi vida y creo que me lo estoy tomando muy en serio. Me estoy tomando un tiempo en pensarlo y ver al final por cuál de las dos opciones opto, sólo sé que por el hecho de ser actriz no dejaría de ser maestra, porque el ser actriz me está ayudando a compartir con muchas personas esos mensajes, de cierta forma educarlos, es eso nunca dejaría de ser maestra.
AP: ¿Cómo fue su experiencia en los Oscar y su balance tras todo lo extraordinario que le ha pasado con la película?
Aparicio: Me siento muy contenta con esa experiencia que tuve… Sabía que en México muchas personas se habían reunido para ver la ceremonia, para apoyar a todo el equipo de la película, y eso era lo que más nos entusiasmaba a todos, sentir el apoyo de nuestra gente.
