El nanosatélite será enviado a la Estación Espacial Internacional y liberado a una órbita baja para captar fotografías de México en espectro de luz visible para identificar el comportamiento de algunos fenómenos climáticos.
Ciudad de México, 8 de marzo (SinEmbargo).- Nuevamente, tecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) viajará al espacio. Así lo anunció la universidad en un comunicado, donde indica que el nanosatélite mexicano K’OTO se probará en Japón a finales de este año.
Desarrollado por expertos de la Unidad de Alta Tecnología de la Facultad de Ingeniería en Juriquilla, Querétaro, el satélite de 10x10x10 centímetros será enviado a la Estación Espacial Internacional y posteriormente liberado a una órbita baja hasta alcanzar los 400 km de altura donde tomará fotografías del territorio nacional para identificar el comportamiento de algunos fenómenos climáticos en un corto periodo de tiempo, según explicó Rafael Guadalupe Chávez Moreno, encargado del proyecto.
“Para nosotros concretar una misión, tenerlo físicamente, poderlo enviar al espacio y que empiece a operar es todo un reto; principalmente va a ser muy bueno para nuestra casa de estudios ya que la UNAM se pondrá otra vez a la vanguardia espacial”, dijo el investigador.
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— Sala de Prensa UNAM (@SalaPrensaUNAM) March 7, 2021
Hasta el momento, el desarrollo del proyecto se ha concretado en un 90 por ciento, cuenta con el apoyo del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología de Querétaro y su diseño y fabricación se llevan a cabo por estudiantes de la UNAM y otras instituciones universitarias del estado.
“Lo que principalmente buscamos es que los chicos tuvieran la oportunidad de diseñar sus subsistemas y no sólo se adquirieran para que los puedan probar en el espacio”, señaló Chávez Moreno.
El nombre del nanosatélite, K’OTO, se inspira en el otomí y significa "chapulín", "saltamontes".
“Con el nombre lo que queríamos dar como concepto es que, aunque sea un satélite pequeño, nos ayudará a dar ese gran salto para llegar a la parte espacial, de ahí el nombre de K’OTO”.
Para la manufactura, el responsable del proyecto compartió que se vincularon con empresas mexicanas y extranjeras, tales como la Agencia Espacial Civil Ecuatoriana, donde fabricaron algunos componentes. El Laboratorio Nacional de Ingeniería Espacial y Automotriz de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional se encargó de la antena de banda S y el sistema de orientación.
En cuanto al lanzamiento del nanosatélite, el experto explicó que tienen un convenio con el Instituto Tecnológico de Kyushu (Kyutech), encargado de la certificación de equipos de la Agencia Espacial de Japón (JAXA). Dentro de dicho convenio se contempla que los estudiantes y profesores de la UNAM presencien cómo se realizan las pruebas de certificación para aprender a replicarlas en sus laboratorios de la Unidad de Alta Tecnología.
“Ellos serán los encargados de realizar las revisiones finales, entregarlo a JAXA y enviarlo a la Estación Espacial Internacional”, expresó.
Según resulten las pruebas, el equipo podrá enviarse al espacio a finales del presente año o a comienzos de 2022.