El especialista Aczel Sánchez explicó que hasta hoy el único tratamiento curativo de la IRC es el trasplante renal, “pues las tecnologías de terapias sustitutas como la diálisis peritoneal y la hemodiálisis aún no son capaces de realizar muchas funciones complejas del riñón”.
México, 8 marzo (EFE).- El 60 por ciento de los mexicanos se negaron en 2017 a donar órganos de sus familiares fallecidos pese a que el único tratamiento curativo de la Insuficiencia Renal Crónica (IRC) es el trasplante, expuso hoy el doctor especialista en trasplantes Aczel Sánchez.
“Aunque la mayoría de las personas dicen estar dispuestas a donar, uno de los argumentos más frecuentes para no hacerlo es que la persona fallecida nunca comunicó su deseo”, dijo el doctor, según informó el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en un comunicado.
El especialista explicó que hasta hoy el único tratamiento curativo de la IRC es el trasplante renal, “pues las tecnologías de terapias sustitutas como la diálisis peritoneal y la hemodiálisis aún no son capaces de realizar muchas funciones complejas del riñón”.
A su vez, con motivo del Día Mundial del Riñón, que se celebra el segundo jueves de marzo, Cedillo Sánchez, adscrito al ISSSTE, dijo que la IRC es considerada la “nueva pandemia del mundo”.
“Es una de las tres principales causas de mortalidad en población económicamente activa, afecta principalmente a individuos de entre 45 y 55 años de edad y figura entre los primeros motivos de incapacidad laboral en personas jóvenes”, explicó.
El también coordinador institucional del Programa de Trasplantes del ISSSTE, precisó que la IRC es la segunda enfermedad más costosa en su atención y tratamiento después de la diabetes y equiparable al cáncer.
Se estima que en 2015, la inversión para atender a los pacientes que padecen esta enfermedad en México superó los 10 mil millones de pesos (537 millones de dólares).
“Lo preocupante es que, tratándose de una enfermedad crónica no transmisible de causas multifactoriales, y al estar asociada a complicaciones secundarias de hipertensión y diabetes mellitus, es difícil abatir su incidencia”, detalló.
Cedillo Sánchez advirtió de que la IRC seguirá presentándose debido a factores como el envejecimiento de la población, la persistencia de hábitos no saludables y la falta de activación física en los estilos de vida de las sociedades actuales.
El especialista recordó que el 50 por ciento de las causas de IRC son complicaciones secundarias de la diabetes y la hipertensión arterial, a su vez relacionadas con el sobrepeso y la obesidad.
Por ello, recomendó consumir suficiente agua diariamente, disminuir la ingesta de sal al mínimo, hacer ejercicio regular y mantener una dieta balanceada, para disminuir factores de riesgo renal.