La Organización Mundial de la Salud recordó la importancia de evitar la propagación del virus, luego de los resultados de algunas vacunas que muestran poca eficacia contra ciertas variantes del SARS-CoV-2.
GINEBRA, 8 de febrero (AP/EFE) — El titular de la Organización Mundial de la Salud indicó el lunes que el surgimiento de nuevas variantes de COVID-19 ha planteado dudas sobre la efectividad de las vacunas existentes, y agregó que eran “noticias preocupantes” que las vacunas desarrolladas hasta el momento sean menos efectivas contra la variante primero detectada en Sudáfrica.
La decisión que Sudáfrica tomó el domingo de suspender su campaña de vacunación con la vacuna de AstraZeneca es “un recordatorio de que debemos hacer todo lo que podamos para reducir la circulación del virus con medidas de salud públicas demostradas”, dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus en conferencia de prensa.
Agregó que cada vez era más claro que los desarrolladores de la vacuna tendrán que ajustar sus vacunas existentes para atender la actual evolución genética del coronavirus y que, muy probablemente, se necesitarán dosis de refuerzo, sobre todo debido a que las nuevas variantes del virus ahora se propagan por todo el mundo y parece que se convertirán en cepas predominantes.
ASTRAZENECA Y LA VARIANTE SUDAFRICANA
La información preliminar de un pequeño estudio dejó entrever que la vacuna de AstraZeneca provee sólo “protección mínima frente a una enfermedad leve o moderada” causada por la variante en Sudáfrica. Ésta parece ser más infecciosa y está generando un rebrote letal de COVID-19 en el país, donde actualmente representa más del 90 por ciento de los casos, dijo el domingo el Ministro de salud, Zweli Mkhize.
“La vacuna de AstraZeneca parecía efectiva contra la cepa original, pero no contra la variante”, declaró Mkize. “Hemos decidido suspender de manera temporal la aplicación de las vacunas... es necesario hacer más trabajo”.
El estudio, que no ha sido revisado por otros expertos, abarcó a 2 mil personas, la mayoría de ellas jóvenes y saludables. Los voluntarios tenían una edad promedio de 31 años.
“La protección contra la enfermedad moderada-grave, la hospitalización o muerte no pudieron evaluarse en este estudio porque la población estudiada enfrentaba muy bajo riesgo”, dijeron en un comunicado la Universidad de Oxford y la Universidad de Witwatersrand en Johannesburgo.
Los científicos estudiarán si la vacuna de AstraZeneca es efectiva o no para impedir una enfermedad grave y la muerte en un caso de la variante, dijo Mkhize.
Otras vacunas han mostrado tener una eficacia reducida contra la variante, pero han brindado buena protección frente a un agravamiento de la enfermedad y la muerte.
¿QUÉ DICEN LOS EXPERTOS?
En las últimas semanas se suceden las noticias acerca de las nuevas variantes de este coronavirus que inquietan por la rapidez con la que se propagan y crean dudas sobre la efectividad que tendrán las vacunas para contrarrestarlas.
Esa alarma se ha extendido a las redes sociales, donde muchos usuarios se preguntan sobre los efectos de las mutaciones y expresan sus dudas acerca de las consecuencias que tendrán en la evolución de la pandemia.
Sin embargo, los expertos consultados por EFE subrayan que es normal que los virus muten y por el momento no ven razones para el alarmismo, aunque consideran necesario mantener una vigilancia atenta.
Prevén, no obstante, que puedan producirse versiones del SARS-CoV-2 que resistan la acción de las vacunas, aunque también consideran probable que estos fármacos se modifiquen sin dificultades para neutralizar esas variantes.
Según el presidente de la Sociedad Española de Virología (SEV), Albert Bosch y José Ramón Arribas, portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) explican que la probabilidad de que haya mutaciones que se resistan al efecto de las vacunas crecerá conforme haya más población inmune.
Se trata de un proceso de selección natural de las mutaciones, en el que se mantendrán aquellas que presenten cambios que les hagan evitar la acción de los antígenos.
Sin embargo, ambos opinan que los investigadores podrán adaptar las vacunas a estos cambios para mantener su eficiencia.
Bosch, además, cree que este virus no variará tanto como el de la gripe, que cada año obliga a hacer un esfuerzo para modificar los preparados que lo combaten.
Sobre el riesgo de que surja una variante más virulenta y letal, el presidente de la SEV señala que eso podría ocurrir en un escenario “catastrófico” pero añade que tampoco tiene por qué suceder.
“En virología”, sentencia, “nada es esperable, todo es posible”.
-Con información de Sergio Hernández, de EFE y Andrew Meldrum y Sylvia Hui, de AP