La reforma pretende modificar el criterio del despacho eléctrico para priorizar la energía generada en las plantas hidroeléctricas y de combustibles fósiles de la CFE.
México, 8 febrero (EFE).- El Presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, acusó este lunes a las empresas de corruptas para justificar su polémica iniciativa de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que prioriza a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sobre los productores privados.
“No les gustó que envié una iniciativa de reforma al sector eléctrico porque se habían apoderado de la industria eléctrica las empresas particulares, comprando, sobornando autoridades corruptas, empresas extranjeras”, manifestó el mandatario en su rueda de prensa nacional.
Esta es la primera defensa pública que hace el Presidente de la iniciativa que envió la semana pasada al Congreso, mientras estaba convaleciente por la COVID-19, y que debe discutirse en un plazo de 30 días por ser de carácter preferente.
El principal cambio de la reforma es modificar el criterio del despacho eléctrico para priorizar la energía generada en las plantas hidroeléctricas y de combustibles fósiles de la CFE, la empresa del Estado, sobre las centrales privadas de renovables y al último las de ciclo combinado.
La iniciativa también ordenaría revisar los contratos del Gobierno con productores independientes de energía, eliminaría la obligatoriedad de las subastas eléctricas, restringiría los esquemas de autoabastecimiento y cambiaría las reglas de los Certificados de Energías Limpias (CEL) para dárselos a la CFE.
Aunque analistas han advertido que esto impactaría en precios más altos para la industria y consumidores finales, el líder izquierdista defendió su propuesta.
“Ahora que enviamos esta iniciativa para que no sigan esos abusos, para que no siga ese saqueo, pues se inconforman, pero tenemos que garantizar el compromiso que hicimos con el pueblo para no aumentar el precio de la luz”, sostuvo.
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ha tachado a la reforma de ser una “expropiación indirecta”, mientras que la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) ha denunciado un retorno al “monopolio” eléctrico.
Además, la Cámara de Comercio de Estados Unidos (US Chamber of Commerce) ha advertido de una violación al nuevo Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Pero el líder izquierdista insistió en que la reforma energética de 2013, que abrió el sector energético a la inversión privada, se hizo con base en sobornos de empresas a legisladores.
“Necesitamos poner orden y acabar con la corrupción, no seguir apostando a destruir la Comisión Federal de Electricidad para dejarles el negocio a estos traficantes de influencias”, manifestó.
El Presidente aprovechó su rueda de prensa diaria para alertar que, si los partidos afines a su Gobierno pierden la mayoría en la Cámara de Diputados en las elecciones del 6 de junio, los opositores van a querer “seguir manteniendo el régimen de corrupción”.