Ciudad de México, 8 de febrero (SinEmbargo).– Organizaciones sociales y ciudadanos protestaron este domingo en la capital de Nuevo León contra la construcción del acueducto Monterrey VI, proyecto que realizará una filial de Grupo Higa con el financiamiento del Gobierno federal y del estado.
De acuerdo con medios locales, más de 14 organismos civiles se manifestaron en la Explanada de los Héroes de la ciudad de Monterrey.
Luego de la marcha, miembros de Reforestación Extrema, Evolución Mexicana y la Academia Nacional de Arquitectura cuestionaron el costo de la obra, que asciende a 47 mil millones de pesos a 27 años.
Entre otras organizaciones participantes se encontraron el Frente Amplio Ambientalista, Rescatemos Nuevo León, Vertebra Nuevo León, Pueblo Bicicletero, Red por la Dignidad, Agua para Todos, La Banqueta se Respeta, Sueño Regio, Movimiento de Activación Ciudadana, Asociación de Vecinos de Valle Poniente y la Unión Neoleonesa de Padres de Familia.
La marcha fue convocada por organizaciones civiles a través de redes sociales el pasado viernes.
“No permitas el robo del siglo, más de 57 mil millones asignados en su mayoría al Grupo HIGA, los compadres de EPN y patrocinadores de la ‘casa blanca’. El proyecto donde Rodrigo Medina firma su jubilación”, decía la convocatoria al evento.
En entrevista para SinEmbargo, Cosijopi Montero dijo que con la movilización esperan que haya una reacción por parte del gobierno del estado para sentarse dialogar con las organizaciones para escuchar los argumentos técnicos por los cuales no se debe llevar a cabo el proyecto Monterrey VI
“Está claro que el interés no es el asunto de proveer de agua a la ciudad. Tan es así que soluciones más baratas y más eficientes no les ponen atención. Obviamente el interés no es el tema del agua, hay otro interés por allá atrás que no nos han dicho y que no nos van a decir”, denunció Montero.
Dijo que el que Grupo Higa vaya a construir la obra “es un tema secundario. Eso tiene que ver más bien con los intereses que tenga Peña Nieto con la constructora. Aquí el asunto fundamental es que nosotros no tenemos por qué pagar por una obra que no necesitamos y que no vamos a necesitar”.
“Eso que lo hagan ellos con su dinero, no que lo hagan con el presupuesto del estado y que pongan en riesgo la calidad de vida de la gente de aquí”, denunció. Agregó que el proyecto empezó constando 6 mil millones de pesos hace tres años. “Después nos enteramos que eran 14 mil millones, y cuando nos enteramos de que eran 14 mil millones dijimos: ‘y no van a ser 14 mil, van a ser 24, 30 mil o 40 mil o lo que sea necesario’. Y justamente se cumplió esta predicción que habíamos hecho. Este proyecto lo van a subir hasta donde sea necesario”.
A inicios de esta semana, las organizaciones opositoras al acueducto dieron a conocer 12 razones por las que se oponen a la construcción de Monterrey VI en un documento dirigido al Presidente Enrique Peña Nieto y al Gobernador Rodrigo Medina de la Cruz.
En el documento, denunciaron que el proyecto se justifica con información “manipulada, falsa y poco transparente”. Dijeron que pone en riesgo “la estabilidad política y social regional al quitar agua a otras comunidades”.
“Pone en riesgo nuestra soberanía hídrica regional y nos vuelve vulnerables a acciones de sabotaje en una zona altamente conflictiva”, indicaron en el pronunciamiento.
Los grupos civiles refirieron que hay evidencia “documental oficial” de hay suficiente abasto de agua potable para la capital regiomontana. Asimismo denunciaron que se ha ignorado y “despreciado” las opiniones, estudios y propuestas de expertos y académicos reconocidos.
Indicaron que existen proyectos alternos con mayor eficiencia económica y ecológica que garantizan el abastecimiento de agua. Dijeron que el proyecto que construirá la filial de Grupo Higa “endeuda aún más al estado comprometiendo la calidad de vida de futuras generaciones”.
En otro punto, los grupos civiles indicaron que Monterrey VI “desvía recursos requeridos en proyectos prioritarios en seguridad, salid, educación y vivienda”. Dijeron que el acueducto contamina el agua y provoca “severos daños a los ecosistemas de las cuencas involucradas”.
Eugenio Clariond, presidente del Fondo de Agua Metropolitano de Monterrey (FAMM), presentó el miércoles pasado los resultados reprobatorios de un estudio internacional sobre Monterrey VI, al que calificó como nefasto, costoso e innecesario al proyecto.
El principal objetivo del FAMM “es invertir en la preservación de ecosistemas de las cuencas altas y áreas de infiltración de aguas subterráneas para garantizar la calidad y cantidad del suministro de agua para Monterrey, mientras se reduce el riesgo de desastre debido a inundaciones”.
En el estudio presentado, el cual fue realizado por la organización internacional The Nature Conservancy (TNC), se informó que el acueducto traerá un impacto económico, ecológico y social para la entidad, por lo que será una “inversión nefasta”.
“Dado que existen elementos que indican que la disponibilidad del agua del Pánuco es menor a la proyectada. Deberían de ser evaluados para no poner en riesgo la seguridad hídrica de Monterrey y el sistema hídrico del Pánuco, así como los ecosistemas que dependen de ellos”, explicó Clariond en un conferencia de prensa.
LA PROMESA DE EPN EN MANOS DE HIGA
El gobierno de Nuevo León, encabezado por el priista Rodrigo Medina de la Cruz, otorgó en septiembre de 2014 a Grupo Higa la licitación para construir el acueducto Monterrey VI, una obra por la que se pagarán 57 mil millones de pesos durante los siguientes 27 años.
Emilio Rangel Woodyard, director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, informó el pasado 8 de septiembre que una vez entregada la obra, la paraestatal pagará mensualmente 124 millones 99 mil 167 pesos, sin IVA, por un periodo de 27 años a una tasa fija de 6.25 por ciento. La obra se financiará con recursos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el estado de Nuevo León.
El proyecto consiste en la construcción de un acueducto de 372 kilómetros de longitud y 2.13 metros de diámetro, con origen en San Luis Potosí, que atraviesa territorios de Veracruz y Tamaulipas y llega al municipio de Linares, Nuevo León, para extraer agua del Río Pánuco y que se interconectará con el Acueducto existente Cerro Prieto-Monterrey, a fin de conducir el agua hasta la planta Potabilizadora San Roque y distribuirla a la zona conurbada regiomontana a través de los dos anillos de transferencia ya existentes.
La construcción de Monterrey VI fue una de las promesas que Peña Nieto hizo el pasado 22 de abril de 2012 en el marco de su campaña presidencial. Ese día, el mexiquense dijo que había requerido al notario público 129 de Nuevo León, Manuel García, para que diera fe de tres compromisos: concretar el proyecto acuífero Monterrey VI, reforzar con elementos federales a los cuerpos policíacos de la entidad y construir las líneas 3 y 4 del Sistema Metropolitano de Transporte Colectivo Metro.
Dos años después, y meses antes de que la licitación del acueducto fuera ganada por Concretos y Obras Civil del Pacífico, filial de Grupo Higa, Peña Nieto, ya como Presidente, regresó a la entidad donde dijo: “Apoyamos la construcción del acueducto Monterrey VI, una obra esencial para la viabilidad de esta región que asegurará el suministro de agua en las próximas décadas […] puedo recordar de aquel entonces, siendo candidato y habiendo suscrito este compromiso de una obra que significa construir el acueducto más grande, quizá, que haya en el país, del orden de 400 kilómetros.”
Grupo Higa pertenece a Juan Armando Hinojosa Cantú, empresario vinculado al Presidente Enrique Peña Nieto. La empresa edificó obras millonarias para el Estado de México cuando Peña Nieto fue su Gobernador, también alquiló aeronaves al Partido Revolucionario Institucional (PRI) para la campaña presidencial de 2012, a través de su filial Eolo Plus.
Armando Hinojosa fue parte del consorcio al que inicialmente el Gobierno federal adjudicó la licitación para construir el tren rápido México-Querétaro, con valor de 50 mil 820 millones de pesos. La licitación fue cancelada por el gobierno de Peña Nieto el 6 de noviembre y la obra fue suspendida de manera indefinida por el titular de la Secretaría de Hacienda, Luis Videgaray.
Una investigación realizada por el sitio Aristegui Noticias detalló aún más la relación entre el priista Peña Nieto y Grupo Higa al dar a conocer que una casa localizada en Lomas de Chapultepec, y en donde vivió la familia presidencial, está registrada a nombre de Ingeniería Inmobiliaria del Centro, una empresa que pertenece a Grupo Higa.
Posteriormente se reveló que mientras la “casa blanca” era edificada por Grupo Higa, Peña Nieto utilizó como oficina durante su campaña presidencial y el periodo de transición otro inmueble localizado también en Lomas de Chapultepec, la cual es propiedad de Juan Armando Hinojosa Cantú.
El pasado 5 de diciembre, los organismos que se oponen a la edificación de Monterrey VI explicaron que además de la relación del Presidente Enrique Peña Nieto con Grupo Higa de Juan Armando Hinojosa, a través Concretos y Obra Civil del Pacífico, hay otra empresa participante, Pyecsa, que está relacionada con el Gobernador priista Rodrigo Medina de la Cruz.
Dijeron que ademas está involucrada la constructora Recsa, de Humberto Armenta, quien, afirmaron fue expulsado de la Cámara Mexicana de la Construcción por supuestos malos manejos. Por ello manifestaron que seguirán con los procedimientos legales en curso y un posible amparo contra el proyecto, cuestionado también por caro e innecesario.
Tras analizar de los documentos públicos y escuchar especialistas y académicos, dijeron que encontraron “nuevos indicios de que el proyecto Monterrey VI es una obra no pertinente, innecesaria y sumamente costosa”.