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Hilda García

08/02/2013 - 12:00 am

Se pasaron de la raya…

Es increíble… apenas hace unos meses y con un retraso de 70 años, el gobierno mexicano inició el pago de compensaciones a trabajadores agrícolas mexicanos que labraron las tierras desérticas del suroeste de Estados Unidos entre 1942 y 1964. El gobierno mexicano ofreció una cantidad de tres mil 800 millones de pesos (aproximadamente unos 30 […]

Es increíble… apenas hace unos meses y con un retraso de 70 años, el gobierno mexicano inició el pago de compensaciones a trabajadores agrícolas mexicanos que labraron las tierras desérticas del suroeste de Estados Unidos entre 1942 y 1964.

El gobierno mexicano ofreció una cantidad de tres mil 800 millones de pesos (aproximadamente unos 30 millones de dólares) para realizar los pagos a 108 mil 352 ex “braceros”. Por lo que cada uno de ellos habría recibido unos 38 mil pesos (casi tres mil dólares).

El programa de trabajadores huéspedes o “braceros” mexicanos de 1942, se realizó mediante un acuerdo entre los gobiernos de Estados Unidos y México. El gobierno mexicano recibió el dinero que correspondía a los “braceros” pero nunca lo entregó a esos trabajadores. Así que siete décadas después, el entonces presidente Felipe Calderón decidió devolver el dinero a los braceros mexicanos.

Sin embargo, pareciera que los trabajadores mexicanos que laboran para Estados Unidos están a expensas de la corrupción en México como el caso de los “braceros” o de los empresarios que los contratan por cantidades menores a los 7.25 dólares diarios que corresponden por ley como salario mínimo a nivel federal.

Una vez más, mientras son indocumentados, son gente de nadie y, por lo mismo, nadie vela por ellos. Se aprovechan de que no tienen papeles y no podrán hacer ninguna denuncia por miedo a ser deportados. Así que en ocasiones ni las autoridades consulares de México saben lo que ocurre con los paisanos, ni las autoridades laborales de Estados Unidos reciben información o denuncia por los casos.

Sin embargo, hay un caso especial que se dio esta semana. Uno que incluso que recuerda las famosas “tiendas de raya” del Porfiriato, en las que las haciendas organizaban a los trabajadores no sólo para realizar las faenas diarias, sino incluso para consumir los productos en la misma tienda con los salarios manejados por los hacendados.

De acuerdo con datos del Departamento del Trabajo, la empresa Bloom Energy basada en la población de Sunyvalle, en California, trasladó con visas de turista a 14 técnicos desde Chihuahua, a quienes alojó en un pequeño hotel ubicado frente a las oficinas de la compañía.

Bloom Energy contrató a los trabajadores para arreglar los generadores eléctricos junto con personal estadounidense, pero a los 14 afectados, se les pagaba en pesos mexicanos el equivalente a 2.66 dólares por hora. Nada que ver con el salario mínimo establecido a nivel federal que equivale a 7.25 dólares la hora.

A fin de saber la magnitud de la empresa podemos decir que Bloom Energy fabrica sistemas de generación de energía limpia y da servicio a grandes compañías como Google, Walmart, Coca-Cola, FedEx, eBay y Bank of America.

Así que sus contratos son grandes y dejan buenos dividendos, pero aún así, para ahorrar costos, la empresa Bloom Emergy llevó a Estados Unidos, con visas de turista, a 14 técnicos mexicanos de mantenimiento industrial y aunque les pagó el salario, se los depositó en pesos en cuentas bancarias que la misma compañía abrió en México y que equivalen a la tercera parte del mínimo establecido en el país.

Es más, la empresa se vende en el mercado laboral como una empresa de punta que realiza energía limpia para cualquiera en el mundo y la manera como ha influido en la manera de consumir energía con técnicas desarrolladas por programas de la NASA. A la vez, se presenta como una compañía prometedora a nivel económico dentro del área de Sillicon Valley, pero donde definitivamente pierden el piso es estableciendo “igualdad de oportunidades” y basando el crecimiento en la meritocracia. A la vez que habla de ser consistente en la aplicación de las leyes.

Pues sí que se pasaron de la “raya”. No conformes con ello, la compañía pagaba a los empleados mexicanos en cuentas bancarias que había abierto para ellos en territorio mexicano, en donde depositaba los ingresos de los empleados en pesos y en menor proporción que la acordada por ley.

Como si fuera una tienda de raya, sí, como aquellas que de alguna manera nos llevaron a la Revolución, la compañía daba aparte algo de dinero diario a los empleados para que compraran sus alimentos y les exigía que le entregaran el cambio.

Se dice que la empresa Bloom Energy contrató a equipos de técnicos repetidas ocasiones entre los años 2010 y 2012, determinó la División de Horarios y Salarios del Departamento del Trabajo.

Por ahora la empresa tan sólo pagará poco más de seis mil dólares de multa y unos 32 mil dólares en sueldos retenidos. Se espera que siga la investigación y que las sanciones aumenten, pues si contrataron a gente con visa de turista entran en el terreno del Departamento de Justicia y de Seguridad.

Por ahora no se sabe de reacciones por parte de ninguna autoridad mexicana. Estados Unidos establecer alertas a sus residentes que viajan a México. De hecho, existen 17 alertas para los estados en los que ellos consideran zonas de peligro para sus turistas. Y si bien ellos establecen estas alertas y comunicados, ¿habrá manera de que nosotros también pongamos alertas para nuestros connacionales que viajan a Estados Unidos con la idea de ganar un poco más de dinero y mejorar sus niveles de vida por la vía del trabajo?

Hilda García
Estudio Periodismo en la Universidad Nacional Autónoma de México, obtuvo el grado de Maestría en la Univ. de Miami con el tema de los “Weblogs y la mediamorfosis periodística”.

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