“Lo que más me preocupa, luego de los hechos del 6 de enero, es la posibilidad de que esta misma gente que hace días simplemente vandalizó dentro del Capitolio –aunque también algunos fueron armados e incluso encontraron artefactos explosivos– piensen que ahora en adelante la única forma que tienen para manifestarse sea la violencia, eso es posible”, dijo el periodista Jon Lee Anderson en entrevista con “Los Periodistas”.
Ciudad de México, 8 de enero (SinEmbargo).– El escritor y periodista Jon Lee Anderson alertó esta noche que muchos de los extremistas de ultraderecha que siguen a Donald Trump están armados, y advirtió que es posible que existan en el futuro episodios de terrorismo vinculados con ellos.
En entrevista con “Los Periodistas”, programa que conducen Álvaro Delgado Gómez y Alejandro Páez Varela en la cadena La Octava, Anderson, quien se ha especializado en temas políticos latinoamericanos y ha sido colaborador e incluso corresponsal de guerra para diarios tan influyentes como The New York Times, Financial Times, Le Monde y The Guardian, entre otros, dijo que el ataque de seguidores de Trump al Capitolio tendrá consecuencias y una de ellas es que se desate la violencia por parte de grupos radicales.
Alejandro Páez le comentó al periodista sobre una nota publicada por la agencia AP, en la que se consigna que en la manifestación del Black Lives Mather, mayoritariamente de afrodescendientes, hubo 14 mil arrestos, mientras que en la del 6 de enero, donde participó una mayoría de personas blancas se registraron 43. Una muestra, dijo Páez, del Estados Unidos que estamos viendo: divido por razas y que será difícil de sanar.
Para Jon Lee, más allá de desalojar a Trump, toca un gran trabajo de saneamiento. “Yo tengo una inquietud especial en torno a las fuerzas de seguridad del país, por lo que pasó el miércoles”, dijo.
“Todos nos preguntamos por qué no había más policías, y sabemos que el jefe de la policía del Capitolio ha dimitido, pero hay una sospecha bastante arraigada de que había complicidad en alguna instancia. A lo mejor era simplemente que Trump se resistió a llamar a la Guardia Nacional, aunque él dijo que la llamó, pero es obvio que no. Entonces, el mismo hecho de que hubo ese bache en la defensa del Capitolio demuestra que hay un problema en cuanto a la politización de las fuerzas de seguridad”, comentó.
“Sabemos por tantos homicidios de gente afrodescendiente que ha cometido la policía, lo cual creó el movimiento Black Lives Mather, que hay un problema de racismo dentro de las fuerzas policiacas de Estados Unidos. Entonces, hay un trabajo de saneamiento que hay que hacer. Trump también intentó politizar el Departamento de Justicia, el FBI, y Biden está atendiendo eso; ayer hizo unos nombramientos magníficos y es obvio que él entiende que ha un trabajo de profundidad que hay que hacer para restaurar la institucionalidad del Gobierno y también la credibilidad del Gobierno ante la ciudadanía”, expuso Jon Lee.
“Pero yo tengo un particular recelo y preocupación en torno a la politización que Trump logró en los departamentos de policía, en los agentes de migración y otros departamentos. Mi inquietud va a que estamos hablando de un país que ha estado enfrascado en guerras desde hace 20 años: entre 15 y 20 millones de norteamericanos han pasado por la guerra y están vivos, esto es que hay entre 10 y 15 millones de norteamericanos que tienen experiencia de combate, incluso en repetidos despliegues en Afganistán e Irán, y viven en un país donde tienen fácil acceso a las armas, como ustedes, los mexicanos, lo saben y lo han padecido.
“Entonces, mi preocupación ahora es cómo va a hacer con estos grupos cretinos –racistas, nihilistas, seguidores de teorías conspirativas de ultraderecha– armados, y cabe la posibilidad de que vamos a ver, de aquí en adelante, algunas intentonas terroristas de estos grupos, y la causa, históricamente, va a tener un nombre y un apellido: Donald Trump. Ese es el ámbito que me preocupa más dentro de Estados Unidos: la posibilidad de que esta misma gente que hace días simplemente vandalizó dentro del Capitolio –aunque también algunos fueron armados e incluso encontraron artefactos explosivos– piensen que ahora en adelante la única forma que tienen para manifestarse sea la violencia, eso es posible”, afirmó.
CONSECUENCIAS Y RIESGOS CON TRUMP
“Estamos todos en vilo, tratando de adivinar qué van hacer. Con haber transgredido una línea sagrada e incentivar una turba que, como vimos, irrumpió en el Capitolio, Trump parece haber cruzado una raya que él mismo no sabía que existía. Tanto le habían apaciguado en estos cinco años, desde que anunció su candidatura, y rompió todas las formas, todas las reglas, bajó el tono a un vulgarismo eterno, que pensó que simplemente no tenía atenuantes y que era obvio que sí”, dijo el laureado periodista en referencia a los hechos del pasado 6 de enero.
“Las consecuencias ya han empezado a darse. No le han sacado del trono todavía pero puede que se dé la próxima semana un impeachment [proceso de destitución] nuevo que resultaría en una salida humillante para este mal Presidente de la Casa Blanca. Es posible, no sabemos. Pero desde ya el Partido Republicano empieza a fragmentarse… una especie de autogolpe, quizás estaba en su mente”, expuso el periodista.
Para Jon Lee, también autor de los libros Che Guevara: Una Vida Revolucionaria (1997), La tumba del León: Partes de guerra desde Afganistán (2002) y La caída de Bagdad (2004), entre otros, “hay un antes y un después” luego de los hechos que Estados Unidos vivió y el mundo vio con asombro el 6 de enero pasado.
Hemos cruzado un umbral tan “surrealmente” en vísperas del final de su mandato y el arranque de la administración del Presidente Joe Biden que consecuencias, muchas, las va a haber, dijo.
“Creo, y espero, que Trump y su séquito más rancio, además de sus seguidores más lumpen sean judicializados cuanto antes, para marcar justo un antes y después para la ciudadanía, porque todos sabemos que 75 millones de personas lo votaron el día 3 de noviembre –no creo que tantos lo votarían hoy–, pero de todas maneras estamos hablando de decenas de millones de personas que le siguen. Y creo que podríamos ver un Partido Republicano renacido como también podríamos ver un Partido Republicano fragmentado, en división constante de aquí en adelante, si Trump no es perseguido y no hacen un caso ejemplar de él, porque si no lo hacen temo que este problema va a seguir e inclusive va a aumentarse”, planteó el periodista.
Además, dijo, que no se puede dudar que Trump todavía tienen en su mente estorbar la paz de los norteamericanos y de la administración de Biden, “violentarlo, arrastrarlo por el lodo, si es que puede”. En sus dos “discursitos” desde los disturbios del miércoles, agregó, en el primero vimos que fue una especie de guiño a los saqueadores, por más que les pidió que se fueran a casa –eso después de que Biden le exigió explícitamente que hiciera un discurso pidiendo a la gente que se fuera–.
“Pero en la grabación que vimos ayer, que claramente no redactó él ni lo creía él, por la forma correcta en que hablaba, hasta ahí hizo un guiño a sus seguidores; dijo: ‘esto es el arranque de una aventura increíble o maravillosa’, algo así, lo que dentro dentro de lo que uno entiende en el discurso de Trump era un silbato de perro bastante lustrado a sus seguidores. O sea que, si no lo judicializan, este hombre va a seguir causando problemas en Estados Unidos con la posibilidad de que la derecha norteamericana tradicional desencadene en un partido atomizado, con una extrema derecha ya airosa y soltada”, consideró Jon Lee Anderson.
Ahorita, si me preguntan dónde creo que se inclina la balanza, creo que se inclina a un debilitamiento de Trump, añadió. De hecho está debilitado y ha aceptado, no por nombre, que otra administración va a entrar el 20 de enero.
“Como que está en vilo, ahí en su recinto en la Casa Blanca mirando televisión, y viendo cómo puede sobrevivir esto. Hay gente que está renunciando a su alrededor y hay un lobbying fuerte, bipartidista por primera vez, en el Congreso para desalojarlo cuanto antes de la Casa Blanca. Nunca ha estado tanto contra las sogas en su Presidencia. Entonces, ahorita, la balanza se inclina, para mí, hacia un camino más optimista que lo contrario”, expuso el también integrante del staff de la revista The New Yorker.
Álvaro Delgado preguntó a Jon Lee sobre el discurso de Trump donde ofreció una transición ordenada, pero también en el que insinuó que seguirá en política con esa base de seguidores que tiene, aún cuando se vea mermada; si no hay sanciones o lo meten a la cárcel, se convertirá en la sombra de Biden y buscará capitalizar los errores de Biden con miras a la próxima elección presidencial en EU, comentó Delgado.
Al respecto, el periodista estadounidense se remitió a los sucesos del pasado miércoles e insistió que éstos marcan un antes y un después para muchos norteamericanos, inclusive para los conservadores.
“Una cosa que no comprende a fondo mucha gente que no es de ahí es lo sagrado que… bueno, un mexicano sí lo comprende, porque creo que los mexicanos tienen una noción de su Gobierno, del poder, de la Presidencia, de las instituciones democráticas de su país, en un estado exaltado parecido a lo norteamericanos, los dos son muy exaltados en la reverencia para sus instituciones y son muy patrioteros. Entonces creo que ni Trump mismo –por lo que es: casi un analfabeta, que no ha leído un libro en su vida, que no sabe lo que dice la Constitución– entendía que al mandar a una turba a que rompieran las vitrinas y entraran a actuar como vándalos en el Capitolio estaba violando un recinto que muchos consideran sagrado. Incluso Biden lo describió como tal. Y eso mismo me hizo recordar un poco que así es en Estados Unidos: para muchos norteamericanos –sean liberales o sean de derechas– hay una línea que no se puede cruzar, y él la cruzo, y por eso es que por primera vez vemos decir a republicanos ‘ya, no puedo más, me voy’. Es que es ineludible. Y una vez que desocupe la Casa Blanca va a ser un Donald Trump sin poder. Tiene el poder, sí, de sus votantes, pero sin poder para ejercitar el poder, más allá del verbo, y entonces queda muy dañado por la forma en que va a salir: sea impeach o no, por lo que sucedió el miércoles, porque cinco personas murieron a consecuencia de su llamado a que marcharan al capitolio, y es ineludible.
“No es fake news, todo mundo lo sabe, y entonces yo creo que ha perdido muchos hinchas en estos días y sólo con el correr de los días vamos a poder cuantificar con qué profundidad esto ha calado. Hablo medio esperanzado, pero también como observador o analista frío. Yo creo, y espero que sea así, pero ahora mismo reconozco lo que dices: que si no se judicializa, si no lo encarcelan, si las cosas van por el camino contrario y el Estado y el Gobierno de Biden no se ven capaces de contrarrestar esta Caja de Pandora que ha abierto, sí: el futuro se ve color de hormiga”, consideró Jon Lee Anderson.