Realizar cambios en los hábitos de alimentación, ejercicio y hasta descanso es posible, a través de integrar frutas y verduras frescas, mantenerse en movimiento o apagar la computadora una hora antes de dormir. “La idea es hacer el cambio de hábitos poco a poco, que se vaya integrando lo que te vaya funcionando, ir mejorando y algo que sea realista”, señaló Mauricio Sánchez, Co-Fundador de Grupo Hábitos.
Ciudad de México, 8 de enero (SinEmbargo).- Los acontecimientos del último año llevaron a prestar mayor atención a la salud y a lo que cada uno puede hacer para mejorar y ayudar a fortalecer el sistema inmunológico. Con el inicio del 2021 se presenta una oportunidad para adquirir hábitos que ayuden a mejorar la salud, entre ellos está la alimentación, el ejercicio y el sueño.
“Algo importante que estamos viendo a raíz de esta situación es que nos damos cuenta que la salud es lo más importante, que sin salud no podemos disfrutar nada y la gente a volteado a ver, mucho más allá de un tema estético, a realmente cuidarnos para mejorar nuestra salud y el sistema inmunológico para disfrutar mejor de la vida”, dijo Mauricio Sánchez, Co-Fundador de Grupo Hábitos, a Mundano.
El especialista explicó que el sistema inmunológico ha evolucionado junto con el ser humano. “Es algo que internamente la naturaleza nos ha dado por generaciones y hemos venido heredando, el problema es que ahorita estamos desconectados de nuestra biología y tenemos hábitos completamente distintos a los que debíamos haber tenido o a los que tuvimos durante el periodo de evolución, existe una desconexión y eso hace que nuestro sistema inmunológico no funcione en optimas condiciones”, agregó.
Para saber qué hacer y por dónde comenzar respecto a los hábitos que ayuden a mejorar la salud, Mauricio Sánchez compartió algunos consejos que pueden ser de utilidad.
ALIMENTACIÓN
Cuando se habla de hábitos alimenticios puede pensarse en una dieta estricta y, a no ser que sea lo indicado por el médico debido a una cuestión de salud, esto no es así. “No tenemos necesariamente que aprender a contar nutrientes, gramos y demás yo creo que es encontrar una forma sencilla y lógica de cómo debemos alimentarnos”, contó Mauricio.
Un primer paso es quitar los alimentos altamente procesados, es decir, los alimentos que son productos que pueden pasar en los anaqueles varios años y contienen conservadores, colorantes, saborizantes, espesantes y una gran cantidad de químicos que el cuerpo no reconoce, acidifican el organismo y están relacionados a enfermedades crónicas. “Inclusive hay colorantes que son derivados del petróleo y son para que se vendan más, no sabemos lo que nos estamos comiendo”, explicó el especialista.
El siguiente paso es evitar los productos con alto contenido de azúcar refinada, en esta área entran los refrescos que contienen una gran cantidad de azúcar.
“No tiene que ser de contar gramos o calorías, todo super orgánico, si lo encuentran que bien y si lo puedes pagar es padrísimo, sino es muy sencillo: regresa a lo que comían nuestras abuelitas. ¿Qué comían? Frutas y verduras en su estado natural, no en una lata”, señaló Mauricio y agregó que la comodidad de los alimentos enlatados está costando salud.
Entre las recomendaciones de qué integrar a la alimentación están:
-Frutas y verduras frescas y de temporada: De acuerdo con el especialista, la naturaleza brinda las frutas que son necesarias en cada temporada, por ejemplo, las mandarinas que son fuente de vitamina C se dan en el momento que más necesita el cuerpo de esta. Además, los precios son más accesibles y si es local favorece a la comunidad.
-Agua natural o de fruta: Cambiar los refrescos por agua natural.
-Evitar embutidos: Es producto que no está en su estado natural, es mejor preferir una pechuga de pollo a una salchicha.
-Sal de mar: Elegir la sal de mar en lugar de la sal yodada.
EJERICIO
La actividad física es una recomendación que siempre se escucha, en la actualidad esto cobra mayor relevancia debido al encierro, ya que al no realizar las actividades cotidianas como antes al salir, no se recibe la cantidad de sol adecuada para tener vitamina D y la vida se vuelve sedentaria.
“Con ejercicio me refiero a no que sea sumamente demandante o agotador pero sí tenemos que incorporar periodos de movimiento durante el día, por ejemplo, cambiar nuestra posición, si estamos trabajando, sentarse en el piso un rato, trabajar media hora, después te levantas haces un par de sentadillas y otra vez a trabajar”, explicó Sánchez. “Hay un proceso para que nuestras células funcionen bien y cumplan con todas sus funciones y es importante darle un estimulo mecánico”, agregó.
“Hay que hacer movimientos, hay sentarnos, levantarnos, jugar en la medida de lo posible si tienes niños, moverte, tratar de integrarlo en todas las áreas del día. Si haces ejercicio una hora en la mañana buenísimo, pero si después te acuestas después en la misma posición ocho horas tampoco es tan bueno”.
DESCANSO
“El sueño reparador es sumamente importante. ¿Cómo podemos lograr este sueño reparador? De entrada desconectándote del teléfono, computadora, televisión una hora antes de irse acostar”, recomendó Mauricio Sánchez y explicó que el ciclo circadiano es el reloj interno, “opera mediante la glándula pineal y genera la melatonina que es precursora del sueño, con esta si la tenemos bien, podemos llegar al sueño profundo y empieza a reparar”, si hay luz el cerebro piensa que es de día y no se generó la melatonina y el cuerpo tarda más en alcanzar el sueño.
Otra recomendación es realizar una cena ligera para que el proceso digestivo avance y se pueda descansar y dormir bien.
ESTRÉS
Uno de los puntos más importantes para el sistema inmunológico y la salud es el estrés, este tiene un impacto directo en la salud. “Nosotros cuando estamos estresados y vivimos en miedo, nuestros pensamientos… nos pone en un momento de estrés y estamos liberando cortisol y adrenalina todo el tiempo y no somos ni siquiera consientes de ello, nuestro cuerpo está estresado y no tiene ni tiempo de procesar los alimentos, no tiene tiempo para digerir y se vuelve un problema incontrolable porque vivimos en un estrés crónico”, refirió el especialista.
Para el estrés, Mauricio aconsejó meditar o incluso concentrarse en la respiración, realizar respiraciones profundas y conscientes, escuchar los pensamientos para manejarlos e identificar que cada uno maneja sus pensamientos.
“La idea es hacer el cambio de hábitos poco a poco, que se vaya integrando lo que te vaya funcionando, ir mejorando y algo que sea realista. ¿Qué haces cuando te vas de vacaciones? Ni modo, tienes un sistema fuerte y te alimentas la mayor parte del tiempo bien y si vas a un parque de diversiones y no hay nada sano, puedes comer lo que hay, pero no es siempre, el problema es el hábito y lo que haces siempre”.
