El regreso de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos ha prendido alertas en todo el mundo. En México, la Presidente Claudia Sheinbaum Pardo ha llamado a la mesura y la calma. En ese sentido, el doctor Lorenzo Meyer expuso a “Los Periodistas” que, en realidad, la relación entre ambas naciones siempre ha sido compleja, por lo que ahora no será la excepción, mientras que el economista y politólogo Mario Campa comentó en el mismo espacio que México tiene las herramientas para lidiar con Trump, sobre todo cuando tiene en la mira otros asuntos en China y Europa.
Ciudad de México, 7 de noviembre (SinEmbargo).– El Gobierno de México que encabeza la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo tendrá que lidiar con un Donald Trump que arrasó en la elección presidencial de Estados Unidos, en la que incluso alcanzó la mayoría en el Congreso, y el cual parece haber aprendido una serie de lecciones desde la votación que perdió en 2020.
“Siempre hemos tenido que estar a la defensiva con Estados Unidos, incluso en los mejores momentos. Andrés Manuel López supo torear a Trump y se fue hacia Washington, y lo toreó muy bien, salió indemne, ¿pero lo podrá repetir Claudia Sheinbaum? Ojalá, pero hay otro problema: Trump sí aprende algo de la experiencia anterior y se vuelve más retorcido que antes, porque vio que le dieron resultados ciertas torceduras, ahora las está refinando y además está su misoginia”, expresó en ese sentido el investigador emérito del Colegio de México, el doctor Lorenzo Meyer en entrevista con “Los Periodistas”.
El doctor Meyer expuso cómo Trump rompió de nueva cuenta el status quo existente en la Unión Americana porque los demócratas no supieron leer las señales que mandaban las bases sociales. ”Se durmieron o se hicieron tontos o simplemente no podían entender qué pasaba”.
En efecto, el resultado de la jornada electoral del martes mostró cómo Trump supo capitalizar la debilidad de Joe Biden y Kamala Harris dentro de la base demócrata. Por ejemplo, logró ganar votos entre los votantes afroamericanos—hombres y mujeres— los latinos y los jóvenes que por lo normal suelen decantarse por los demócratas. Al final, pese a sus problemas con la justicia y sus insultos en la campaña, Trump convenció a los votantes con grandes promesas como mejorar la economía, bloquear el flujo de migrantes en la frontera sur y su llamada a “hacer que Estados Unidos sea grande de nuevo”.
“Trump creó un movimiento galvanizado que durante cuatro años estuvo a la defensiva. Hay que recordar que en el 2020, en enero, Trump sale por la puerta de atrás, como un paria, totalmente desacreditado y deslegitimado, habiendo perdido una elección”, planteó el economista y politólogo Mario Campa a “Los Periodistas”. “Sus simpatizantes creen en él, creen en su discurso, Trump tiene un mérito, que es que ofrece cierto horizonte, él habla de que Estados Unidos es un desastre en estos momentos, sobre todo antes de que llegara en la primera presidencia, y que quiere hacer a América Grande Otra Vez, Make América Great Again, el movimiento MAGA”.
En contraparte, Campa cuestionó el hecho de que los demócratas hayan optado por un discurso en el que trataron de mantener el estatus quo, que le habla en buena parte a las élites y lo cual no ofrece mucho horizonte. “Han hecho algunas cosas interesantes los demócratas, pero se olvidaron de hablarle también ellos a su base que tradicionalmente era la clase trabajadora, los sindicalizados que tienen mucha fuerza en el cinturón del óxido que es el centro neurálgico industrial estadounidense y realmente pierden estos estados”.
El doctor Meyer apuntó en ese sentido cómo el liderazgo de Estados Unidos ha virado hacia la derecha con“un liderazgo que sus adversarios tildan de fascista o proto fascista”, sobre todo porque, ahondó, “el mundo político de EU se mueve de manera más fluida, tan fluida que un personaje como Trump a quien nosotros le damos poca credibilidad en cuanto a su capacidad de entender cosas, resulta que sí las entendió”.
“O Trump es muy inteligente y nosotros no nos hemos dado cuenta o los demócratas son lo contrario a inteligentes y no se dieron cuenta”, refirió en ese sentido.
Hacia adelante, frente a los retos con los que tendrá que lidiar la Presidenta Claudia Sheinbaum, Mario Campa indicó que Trump al tener una mayoría más o menos cómoda para sacar sus iniciativas puede empujar medidas que afecten a México, “para empezar probablemente pasen algunos cambios fiscales que están proponiendo: reducción de ciertos impuestos, eso puede hacer un poquito más atractivo el retorno de ciertas inversiones a Estados Unidos”.
No obstante, aclaró que Estados Unidos en estos momentos tiene una disputa más directa con China que con México. “Es cierto que Trump metió a México sobre todo en la parte final de la campaña, pero realmente con China el pleito es otro porque no es solamente económico, tiene que ver con cuestiones de hegemonía, con cuestiones de espionaje, de Seguridad Nacional, de bloques, entonces ahí Trump yo creo que va a redoblar los aranceles”.
Sobre este último punto, refirió que no es tan mala noticia para México en el sentido de que probablemente caigan las importaciones de China a Estados Unidos y México, como sucedió en los últimos años desde la pandemia, gane participación de mercado en Estados Unidos.
“Trump va a estar más interesado en China y también ojo, a veces lo olvidamos un poquito, pero después probablemente vendría la Unión Europea”, ahondó. “Yo no creo que México esté en tanto riesgo, para empezar Trump sí ha dicho que quiere subir aranceles a los autos provenientes de México, pero específicamente para los fabricantes chinos y regresamos a esta batalla con China y si quisiera elevarlos mucho entonces se topa con que probablemente empiece a afectar a la misma industria automotriz de Estados Unidos que son Ford General Motors y ahora Tesla también”.
Campa expuso que en realidad México tiene instrumentos para negociar, no solamente en temas como migración o seguridad, sino los que tienen que ver con el combate al narcotráfico y el tráfico de fentanilo. “Yo creo que va a empezar con otras prioridades y no necesariamente del lado mexicano y si fuera al lado mexicano, yo creo que va a empezar con migración y narcotráfico”.
Para el doctor Meyer basta con ver el último cuatrienio de Trump para ver como no tiene una política exterior, sino que se deja ir por sus instintos, por sus fobias. “A veces parece muy cercano a Putin, no se sabe qué va a hacer con Ucrania, con la OTAN”.
“Trump tiene improvisaciones, lo que pasa es que tiene el poder militar más grande del planeta, uno de los poderes económicos más grandes, quizás se le está acabando, pero más vale que hagamos nuestra política suponiendo que va a seguir siendo el gran poder económico y el gran poder militar”, puntualizó al respecto.