Raquel Buenrostro llega a la Secretaría de Economía, donde deberá de atender las consultas iniciadas por disputas en torno a los sectores automotriz y energético en el marco del T-MEC, pero también poner en rumbo la política industrial nacional.
Ciudad de México, 7 de octubre (SinEmbargo).– Raquel Buenrostro, cercana al Presidente Andrés Manuel López Obrador y extitular del Servicio de Administración Tributaria (SAT), se enfrentó a empresas extranjeras como Coca-Cola y Walmart y logró que pagaran impuestos en tiempo récord. Ahora, la “Dama de Hierro” es la apuesta del Gobierno federal para resolver favorablemente las disputas con Estados Unidos y Canadá por el T-MEC desde la Secretaría de Economía.
El puesto que dejó Tatiana Clouthier este jueves fue rápidamente resuelto con la presencia de la mujer que estaba a cargo del fisco mexicano, una “servidora pública ejemplar”, como la llamó el Presidente.
“Ya tomé la decisión de nombrar a Raquel Buenrostro [como] Secretaria de Economía, quien ahora se desempeña como directora del SAT, que ha tenido muy buen trabajo porque no ha disminuido la recaudación. Yo creo que lo que cuentan son los hechos y es una servidora pública ejemplar, le tenemos toda la confianza”, expresó López Obrador este viernes en su conferencia mañanera.
La confianza depositada por el Presidente en Buenrostro no es fortuita, coinciden expertos. “Raquel Buenrostro es conocida en la Administración Pública Federal por ser una persona eficiente. Algunos la consideran con una postura férrea, y en ese sentido hay que recordar que para estar al frente del SAT, a veces hay que asumir tales características, de otra forma no se pueden tener logros importantes, y el hecho de que llegue a la Secretaría de Economía también es por su perfil, porque puede hacer click en el sentido de que en la economía muchas veces hay que negociar, también a veces hay que tener posiciones bien definidas”, expresó el economista y politólogo Mario Campa en entrevista con SinEmbargo.
Por un lado, se quiere mantener la paridad de género en el Gabinete federal, consideró. Por el otro, Buenrostro tiene la capacidad de mantener un puente de comunicación entre los empresarios y la administración mexicana, así como la solvencia técnica para abarcar los tratados de libre comercio y la política industrial.
“Para lograr resultados en política industrial, se necesita de alguien que sepa rendir, que sea una persona acostumbrada a poner resultados sobre la mesa, porque se te puede pasar fácilmente un año, dos años, un sexenio en el que no hay cambios en política industrial si no estás acostumbrado a rendir resultados, y en ese caso, pues al parecer Raquel Buenrostro sí es una persona que está acostumbrada a eso, al trabajo arduo, a no amilanarse ante algún revés que pueda sufrir”.
Arturo Huerta, doctor en Economía, consideró que más allá de una capacidad técnica de Buenrostro para liderar la dependencia, su nombramiento obedece a un deseo de López Obrador de mantener los puestos de la administración federal ocupados por personajes de confianza y a sus “incondicionales”.
“Es gente totalmente incondicional del Presidente, entonces en vez de poner profesionistas que sepan del tema, pone a sus más allegados, independientemente de la experiencia o el conocimiento que tengan sobre lo que van a dirigir, y eso es muy preocupante porque no se aprende de la noche a la mañana todas las cláusulas de los tratados de libre comercio”, argumentó, a la par que consideró que Jesús Seade, actual Embajador de México en China, hubiera sido una mejor elección para el cargo debido a la experiencia que tiene en la negociación comercial.
A pesar de ello, Huerta también reconoció que Buenrostro es una mujer inteligente y capacitada que tendrá que aprender y profundizar sobre la agenda de la Secretaría de Economía para conducir a buen puerto el trabajo, mientras que se apoye con quienes dejó atrás Clouthier en la dependencia.
¿QUIÉN ES LA “DAMA DE HIERRO”?
Raquel Buenrostro se licenció en Matemáticas en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y posteriormente cursó una Maestría en Economía en El Colegio de México. La matemática tiene en su currículum más de 25 años de trayectoria en la administración pública, trabajando tanto con el Gobierno federal como el capitalino.
Fue titular de la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), directora de Planeación y Desarrollo en Pemex, y subtesorera de Política Fiscal en el Gobierno de la Ciudad de México.
A la cabeza del SAT, Buenrostro mantuvo una recaudación sostenida a pesar de la pandemia de COVID-19 y consiguió que empresas multimillonarias como América Móvil, Coca-Cola y Walmart pagaran impuestos que debían al fisco mexicano, en un tiempo récord. A principios de julio, Buenrostro informó que la recaudación de enero a junio de 2022 ha aumentado 2.7 por ciento en comparación con la cifra registrada el año anterior, y 8.6 por ciento respecto a la de 2018.
Esto último le valió el apodo “Dama de Hierro”, una etiqueta cuestionada por la funcionaria en entrevista con Daniela Barragán y Romina Gándara para SinEmbargo en junio de este año.
“Me pusieron la ‘Dama de Hierro’ porque si uno no se pone firme piensan que no es fuerte. A mí me pusieron así, pero no creo que sea la única funcionaria con carácter fuerte. A los hombres les dicen ‘qué carácter’ y a una mujer ‘es la dama de hierro’ como si fuera algo extraordinario. En un hombre lo ven normal y lo asimilan más rápido”, dijo en ese momento.
LOS NUEVOS RETOS EN ECONOMÍA
Ahora, frente a la Secretaría de Economía una de sus primeras encomiendas –pero no la única– será atender las consultas del T-MEC, después de que el Gobierno de Estados Unidos abriera un reclamo en materia energética por las disposiciones aprobadas con la Reforma Eléctrica, que en los ojos de la administración de Joe Biden generó “políticas energéticas discriminatorias” a favor de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
La salida de Clouthier se produjo casi un mes antes de que se produzca el fallo del panel de expertos acerca de la controversia presentada por México y Canadá contra Estados Unidos por la interpretación de las reglas de origen en el sector automotriz, y tres días después de que se anunciara una prórroga en las consultas por la Reforma Eléctrica que se aprobó en el Congreso mexicano.
“Definitivamente, una de las primeras tareas de Raquel [Buenrostro] será asumir, o de nuevo entablar, este tipo de conversaciones con los Estados Unidos, pero yo siento que es un riesgo que están tanto contenido”, expresó al respecto Mario Campa. “Yo creo que en estos momentos, [Buenrostro se enfrenta a] un entorno que sigue siendo complicado. Hay que recordar que no hay negociaciones demasiado relevantes en temas, por ejemplo, de firma de tratados comerciales, pero se podrían explorar algunas relaciones adicionales con Sudamérica considerando, por ejemplo, que puede ganar Lula Silva [en Brasil] y que ahora está Gustavo Petro [en Colombia]”.
Las nuevas oportunidades con los cambios de Gobierno en los países sudamericanos podrían resultar en acuerdos comerciales y estrategias de cooperación binacional fuera de la relación con Estados Unidos, como sería en materia del litio. “En la cuestión de una política industrial para el litio –que no le corresponde enteramente a Economía, pero tiene que apoyar en ella–. En estos momentos hay ventajas, hay ciertas oportunidades, pero también ciertos retos”, sumó Campa.
Tatiana Clouthier dejó una dependencia que logró que se mantuviera un flujo de inversión extranjera directa en México a pesar de los desencuentros entre López Obrador y el sector empresarial, además de iniciar acuerdos para la reubicación de algunas empresas multinacionales, principalmente de la región asiática, a los cuales habrá que darle seguimiento.
“Ella finalmente respondió a los intereses del país y a la política en general que tuvo el Gobierno en turno, no hubiéramos esperado que sacara un conejo del sombrero y tampoco creo va a ser el caso de Raquel Buenrostro”, resaltó el especialista en política pública. “Pero tiene también algunos retos, como revisar las concesiones de litio, adelantar las cadenas en temas de electromovilidad”, entre otros.
A esto, sumó el académico Arturo Huerta, está el reto de avanzar en una política que favorezca la atracción de empresas transnacionales para satisfacer la demanda de Estados Unidos, el cual busca abastecerse con países más cercanos para evitar importar productos y materiales desde Asia, pero que a la par no sólo beneficie a las empresas particulares que buscan la mano de obra mexicana, sino que esto represente un mayor desarrollo económico para México.
“Ahorita tenemos menos industria de la que teníamos antes del Tratado de Libre Comercio, tenemos menos crecimiento económico, y yo espero que la nueva secretaria se encamine para una política industrial sí a favor de productores nacionales, para retomar el proceso de sustitución de importación, en favor de la producción nacional y de depender menos de empresas transnacionales, o que las empresas transnacionales se trasladen y haya una transferencia de tecnología para disminuir la brecha tecnológica que existe”, analizó.
En este aspecto, el economista recalcó que atender el problema de oferta que existe en México y crear políticas en materia agrícola, escasez de producción de bienes estratégicos, industrial, entre otros, ayudaría a mejorar el proceso inflacionario en el país.
“La escasez de productos nos ha llevado a depender de importaciones, y ahora estamos importando caro porque la inflación es mundial, entonces si México fuera autosuficiente en –por ejemplo, gasolinas, fertilizantes, granos básicos–, no estaríamos sujetos a la inflación internacional y tendríamos capacidad productiva para satisfacer la demanda interna a bajos precios”, indicó.
Pero para que existan estas políticas industriales y agrícolas no depende únicamente de la Secretaría de Economía, lo que representará otro reto para Buenrostro: la coordinación y colaboración entre dependencias federales. Estas políticas requieren de bajar tasas de interés, de políticas de subsidios, créditos baratos e incremento del gasto público para asegurar condiciones de demanda que generen condiciones de rentabilidad y que se puedan establecer caminos para la inversión privada, detalló Huerta.
“El hecho de que se privilegie la austeridad fiscal por parte de Hacienda, que se privilegie el aumento de la tasa de interés por parte del Banco de México, eso te pasa a frenar toda tu política económica. Le compete a la Secretaría de Economía la política industrial, la cual está principalmente dirigida a favorecer a las empresas transnacionales, no a las nacionales, y para favorecer a las nacionales se necesita una baja tasa de interés, cosa que la gente de Banco de México no va a hacer; requiere de subsidios, cosa que Hacienda tampoco hará por su política de austeridad fiscal, entonces todo eso limita los márgenes [de la Secretaría de Economía] para tener una política industrial a favor de la producción nacional”, concluyó el economista.
