El presunto líder de Guerreros Unidos implicado en la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa logró ampararse del auto de formal prisión emitido en su contra debido a que un tribunal determinó que las pruebas presentadas por las autoridades competentes no eran lícitas, situación por la que el proceso penal no pudo ser substanciado. A pesar de ello, el indiciado no saldría de prisión aunque la parte acusadora deberá presentar nuevas pruebas que sustenten el caso.
Ciudad de México, 7 de septiembre (SinEmbargo).– El Primer Tribunal Colegiado Penal en Toluca revocó el auto de formal prisión por delincuencia organizada a Sidronio Casarrubias Salgado, líder del grupo delictivo Guerreros Unidos y uno de los principales implicados en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
El tribunal federal encontró cinco violaciones a derechos humanos de Casarrubias en el auto de prisión dictado en octubre de 2014 por el Juzgado Segundo de Procesos Penales Federales en el Estado de México.
Pese al fallo, “El Chino”, como también se le conoce, no podrá salir en libertad porque el mismo juzgado le dictó auto de formal prisión por el delito de portación de armas de fuego, tipificado como grave.
La sentencia obliga al juez Oscar García Vega a encontrar elementos para dictar un nuevo auto de prisión y justificar la existencia del cargo de delincuencia organizada contra “El Chino”.
De acuerdo con la resolución, esta vez el juez no puede tomar en cuenta dos autos dictados en otras causas penales, que sirvieron de sustento para probar la existencia de Guerreros Unidos, pues esos documentos no fueron aportados por la PGR, sino recabados por el propio juzgado de un sistema de internet del Consejo de la Judicatura Federal (CJF).
Asimismo el Tribunal consideró que el juez no debió darle pleno valor probatorio a la declaración preparatoria del indiciado debido a que, supuestamente, previo a emitirla fue torturado.
Como el presunto líder de Guerreros Unidos probó que el debido proceso fue violado, ahora y por órdenes del Tribunal, el Juez Segundo del Estado de México deberá dictar una nueva orden de aprehensión en contra de Casarrubias pero fundamentada en pruebas lícitas, para que de ese modo, el proceso penal sea nuevamente substanciado.