¿Hambre?: Quién es quién en el canibalismo animal

07/08/2015 - 12:04 am

Ciudad de México, 7 de agosto (SinEmbargo).– El tiempo empeoraba y soplaba un ligero viento. En el preciso momento en que el buque desapareció en el horizonte, Parker se volvió hacia mí con una expresión en la cara que me dio escalofríos. […] En una palabra, insinuó que uno de nosotros debía morir con el fin de salvar a los demás.

El rostro de Richard Parker me hizo comprender que yo me había salvado y que la muerte lo había elegido a él […]. Peters lo apuñaló por la espalda y cayó muerto instantáneamente. No quiero ser prolijo en la espantosa comida que siguió. Cosas así pueden ser imaginadas, pero las palabras carecen de fuerza para que la mente acepte el horror de su realidad. Baste decir que tras aplacar en alguna medida la espantosa sed que nos consumía, bebiendo la sangre del desgraciado, y de tirar al mar, por común acuerdo, las manos, pies, cabeza y entrañas, devoramos el resto del cadáver a razón de una parte diaria durante los cuatro imborrables días que siguieron.

El anterior es un pasaje de “Las aventuras de Arthur Gordon Pym”, de autoría de Edgar Allan Poe, en que se narra el naufragio de cuatro personas que, tras algunos días a la deriva, deciden comerse a uno de los miembros para asegurar la supervivencia del resto: ¡Canibalismo!

El canibalismo es la práctica de comer individuos de la propia especie, explica el médico Manuel Moros Peña en su Historia natural del canibalismo: “La palabra ‘canibalismo’ lleva aparejada una idea de crueldad que repugna cualquier sensibilidad”, indica, pero en el caso de los animales, ésta es una práctica bastante generalizada.

Diversas especies que incluyen reptiles, mamíferos, peces, insectos y aves son capaces de practicar el canibalismo por diversas razones: proteger a su progenie, escasez de alimento, competencia en la reproducción, canibalismo sexual, placentofagia (comerse la placenta) o infanticidio. En el caso de los humanos –que también son animales– el canibalismo era practicado antiguamente como parte de actos rituales.

Aquí te presentamos algunos ejemplos de animales que realizan esta actividad de acuerdo con diversas razones.

PROTEGER A LA PROGENIE

Foto: Shutterstock
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Los perritos de la pradera no sólo son tiernos, también son caníbales. Un estudio realizado por John Hoogland, de la Universidad de Maryland reveló que las hembras de estos animales (por cierto, muy sociables) se comen a las crías de otras parejas para que las propias tengan más posibilidades de sobrevivir.

ESCASEZ DE ALIMENTO

Foto: Wikipedia
Dragón de komodo Foto: Wikipedia

Es una actividad circunstancial. Animales como cocodrilos, arañas, dragones de komodo o focas leopardo son ejemplos de las especies que pueden alimentarse de individuos homólogos cuando no encuentran suficientes alimentos. Los animales pueden llegar a cazar ejemplares más pequeños de su propia especie, o bien, comerlos si los encuentran muertos.

COMPETENCIA EN LA REPRODUCCIÓN

Foto: EFE
Foto: EFE

Existen animales como los leones o los osos polares que suelen comerse las crías de una hembra para poder aparearse con ella. Sucede que las hembras suelen estar indispuestas para el apareamiento durante la temporada en que cuidan de los cachorros. Sólo matándolos los machos pueden lograr que la hembra entre en celo de nueva cuenta para poder tener descendencia.

Recientemente se apuntó que los osos polares comenzaban a practicar el canibalismo como una devastadora consecuencia del cambio climático, que provoca que los osos polares tengan tal carencia de alimentos que se comen a los cachorros. Sin embargo, otros científicos aseguran que este comportamiento responde a las cuestiones reproductivas aquí señaladas.

CANIBALISMO SEXUAL

Foto: Shutterstock
Foto: Shutterstock

Nunca falta quien dice que “quiere comerse a su novi@ a besos”. Bueno, pues qué bueno que no es una mantis o una viuda negra. En los casos de estos animales, las hembras suelen comerse a los machos después del apareamiento (también sucede durante éste en el caso de las mantis).

Esto es conocido como canibalismo sexual y el fenómeno responde a que el hecho de devorar al macho provee de nutrientes a las hembras para generar más y mejores productos.

PLACENTOFAGIA DESMEDIDA

Foto: Shuttestock
Foto: Shuttestock

La placentofagia es el acto de comerse la placenta después del parto. En los animales, pueden darse casos en los que las hembras se comen su placenta y cordón umbilical pero posteriormente se comen a sus cachorros por su incapacidad para distinguirlos. Los gatos y perros son un ejemplo de esto.

CANIBALISMO EN HUMANOS

Foto: Shutterstock
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Este fenómeno no es bien aceptado en el imaginario colectivo y, en la actualidad se relaciona con un acto bastante inimaginable. Sin embargo, de acuerdo con Discovery “el canibalismo o antropofagia (del griego anthropos, hombre, y phagia, acción de comer) lejos de ser un producto de nuestra imaginación es en sí, una práctica humana presente a lo largo de la historia, en cada continente y sin distinción de credo o raza”.

Durante la conquista de América, los españoles se encontraron con una tribu denominada Kariñas o Caribes, cuyo rasgo más sobresaliente era que se comían a sus congéneres. “La mayoría de los Cronistas de Indias describían los festines abominables con los que celebraban sus victorias y sirvió para considerarlos como salvajes y justificar su conquista y exterminio. Su gentilicio fue tergiversado con las erróneas traducciones y de Kariña, Caribas, Caribes se acuñó Caníbal como sinónimo de la etnia y la práctica de alimentarse con humanos, explica Discovery.

El medio también indica que esta práctica era en realidad parte de un rito: “La antropofagia ritual, tiene la finalidad de adoptar la esencia vital o espiritual. Los Kariñas solo comían a un guerrero de su propio grupo o un adversario que hubiera demostrado valor en el combate. Así esas características formarían parte de ellos también”.

En la contemporaneidad también hay casos de canibalismo, pero estos están relacionados con situaciones extremas de supervivencia, como el caso de la llamada “tragedia de los Andes”, en que supervivientes de un avión uruguayo que se había estrellado se vieron obligados a comer a los que habían fallecido para sobrevivir. Otros casos están relacionados con la criminalidad, como el caso de algunos asesinos que han llegado a comerse a sus víctimas.

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