Ciudad de México, 7 de mayo (SinEmbargo).- El ex Diputado federal Jorge Antonio Kahwagi Macari es acusado en Puerto Vallarta, Jalisco, de golpear a una mujer al grado de mandarla a un hospital.
El también empresario habría agredido a la joven Ana Gabriela González Sánchez la noche de ayer en el exclusivo fraccionamiento Marina Vallarta.
El comisario Silvestre Chávez García informó a los medios que el padre de González Sánchez fue quien notificó del ataque.
“Luego de la agresión, la joven fue llevada a un hospital privado para que recibiera atención médica, sitio de donde se reportó a las autoridades locales el suceso, con el propósito de que se presentara un Agente del Ministerio Público para que rindiera su declaración la mencionada joven, quien estuvo acompañada de su progenitor, el cual no fue identificado”, añadió el comisario de la policía porteña, Chávez García, a El Informador.
Hasta el momento se desconoce los detalles de la agresión, así como si fue presentada una denuncia contra el ex legislador.
Jorge Kahwagi ha sido Diputado, miembro del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) –mismo que abandonó–, además de líder de Nueva Alianza, boxeador, y hasta participante en Big Brother. Actualmente se define solamente como empresario.
Entre sus múltiples lujos y riquezas se encuentran una bailarina del escultor y pintor colombiano Fernando Botero, una escultura de Anuar Maauad y -dicen- hasta una mansión con zoológico.
El 12 de octubre de 2011, en una de sus últimas e inolvidables apariciones, el entonces diputado arribó borracho a San Lázaro.
No satisfecho con esto, decidió debatir la Reforma Política, en un discurso que nadie entendió.
No es la primera vez que a Kahwagi se le ha acusado de ser un hombre violento, en un programa de Televisa protagonizó una pelea con el cibernético.
Sin embargo, la polémica es algo de lo que el ex Diputado no se ha podido desprender.
El pasado 17 de diciembre un juez en materia civil rechazó la “excepción de cosa juzgada” que presentó el ex político como parte de una demanda en su contra que lo acusaba de incurrir en tráfico de influencias.
Según un comerciante que demandó a Kahwagi, él compró a notarios y a jueces para ganar un juicio establecido por una controversia civil de tipo patrimonial.
De acuerdo con La Jornada, el juez 31 de lo civil en el DF consideró que al ex legislador no le asistía la razón puesto que encontró “indicios jurídicos, indubitables, que nos ponen ante la posibilidad de la existencia de posibles violaciones procesales en el juicio civil de origen.”
