Los productos que aumentaron sus precios frente al mes anterior fueron la gasolina de bajo octanaje, la cebolla, el huevo y los precios en loncherías, fondas, torterías y taquerías. Además, el precio de la canasta básica mostró un aumento mensual correspondiente al 0.60 por ciento y de 3.80 por ciento anual, cuando en el mismo mes de 2018 fue de 0.85 y de 6.46 por ciento respectivamente.
Ciudad de México, 7 de marzo, (SinEmbargo).- Durante el segundo mes del año la inflación registró un descenso mensual del -0.03 por ciento y la tasa anual se ubicó en 3.94 por ciento, con lo que continuó el descenso iniciado en 2019 colocándose poco más de medio punto arriba del mínimo registrado en diciembre de 2016, cuando llegó al 3.36 por ciento.
De acuerdo con los datos publicados en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) recabados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la inflación aún se encuentra casi un punto arriba del objetivo planteado por el Banco de México de 3 por ciento.
Frente a febrero de 2018, las cifras del INPC fueron de 0.38 por ciento mensual y de 5.34 por ciento anual. Estos datos se alinearon con los especialistas consultados por Bloomberg que anticiparon una variación del 3.95 por ciento en el Índice.
La segunda quincena de febrero registró un alza del 0.14 por ciento en el INPC, producto de los índices reportados en la primera (103.009) y segunda (103.150) quincenas del mes. Además, la canasta básica mostró un aumento mensual correspondiente al 0.60 por ciento y de 3.80 por ciento anual, cuando en el mismo mes de 2018 fue de 0.85 y de 6.46 por ciento respectivamente.
La inflación mensual fue de -0.03 por ciento debido a que, durante el mes, la inflación no subyacente (con productos con mayor volatilidad en su precio) mostró un retroceso de 1.38 por ciento con respecto a enero “ante una caída de 4.28 por ciento en el subíndice de productos agropecuarios, mientras que los energéticos subieron a una tasa mensual de 0.75 por ciento”, de acuerdo con Banco Base.
La analista Gabriela Siller expuso que esta cifra “reduce la probabilidad de que Banxico vuelva a subir su tasa de interés”, pues la Junta de Gobierno ha expuesto que continuará vigilando la evolución de los riesgos al alza para la inflación, sobre todo en presiones al alza para el tipo de cambio.
El índice de precios subyacente volvió a mostrar un incremento mensual del 0.43 por ciento y una tasa anual del 3.54 por ciento. En tanto que el no subyacente retrocedió -1.38 por ciento mensual, con una variación anual de 5.25 por ciento.
En el índice de precios subyacente, las mercancías aumentaron su costo 0.49 por ciento y los servicios 0.36 por ciento a tasa mensual. Mientras que los precios de los productos agropecuarios disminuyeron un 4.28 por ciento; los de los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno aumentaron un 0.75 por ciento mensual, dentro del índice no subyacente.
Los productos que aumentaron sus precios frente al mes anterior fueron la gasolina de bajo octanaje, con una variación mensual de 1.75 por ciento; por segundo mes consecutivo, la cebolla (13.92); el huevo (4.45); los precios en loncherías, fondas, torterías y taquerías (0.63).
A la baja, durante el mismo periodo, fueron los precios del jitomate, con 36.39 menos; chile serrano (28.65), tomate verde (34.24), chiles frescos (15.56), nopales (22.32), papa y tubérculos (6.02), calabacita (18.58), pollo (1.35), los costos de electricidad (0.56) y el aguacate (3.89).
Las cinco ciudades con la con la mayor variación del INPC durante el segundo mes de 2019, y arriba de la media nacional, fueron Cancún, en Quintana Roo, con 0.62 por ciento más; Cd. Jiménez, Chihuahua (0.48); Guadalajara, Jalisco (0.38); Chihuahua, Chihuahua (0.38); y Matamoros, Tamaulipas (0.36).
En tanto que las cinco localidades con datos menores a la media nacional del INPC fueron Atlacomulco, en el Estado de México, con 1.02 por ciento abajo; Tapachula, Chisapas, (-0.66); Izúcar de Matamoros, Puebla (-0.64); Tlaxcala, Tlaxcala (-0.53); Acapulco, Guerrero (-0.51).
Para obterner le INPC se toman en cuenta 159 mil 500 precios quincenales de 2999 conceptos de consumos genéricos. Estos integran 91 ramas de la actividad económica del país.