México está en el centro del pleito a muerte entre republicanos y demócratas, en la nueva Presidencia de Donald Trump. Mientras unos quieren hacer pagar a los mexicanos por el muro, otros buscan recuperar la relación bilateral. Pero los republicanos tienen mayoría y, al menos hasta este momento, parecen resueltos en hacer que su hombre en la Casa Blanca cumpla con el electorado.
Washington/Ciudad de México, 7 de febrero (SinEmbargo/AP/EFE).– El presidente del Subcomité de Seguridad del Transporte de la Cámara de Representantes, Mike Rogers, anunció hoy que presentará una iniciativa de ley para gravar las remesas con un impuesto de dos por ciento para pagar el muro en la frontera con México.
Al mismo tiempo, hoy, tres congresistas demócratas presentaron ante la cámara baja un proyecto de resolución que busca reafirmar la relación la relación con México como una alianza estratégica.
México parece estar en el centro del pleito a muerte entre republicanos y demócratas en la nueva Presidencia de Donald Trump.
“La cámara de representantes reafirma su sólido compromiso a la relación Estados Unidos-México, y exhorta al Presidente a dar prioridad a la relación Estados Unidos-México en base al respeto mutuo”, reza el documento distribuido por la oficina del neoyorquino Eliot Engel, principal demócrata en la comisión de relaciones exteriores y uno de los tres autores.
“Cuando el Presidente Trump tomó posesión, heredó una fuerte relación Estados Unidos-México que necesitaba un trato cuidadoso. Desafortunadamente, él no se lo dio”, agregó Engel, de acuerdo con The Associated Press.
Egel se refería a una conversación telefónica en la que el Presidente Trump le dijo al mandatario mexicano Enrique Peña Nieto que podría mandar militares a enfrentar a los “bad hombres ahí” a menos que el ejército de México haga más para controlarlos.
El Gobierno de México se apuró a decir que Trump nunca habló del envío de militares, pero el mismo Trump se encargó de desmentirlo ayer.
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VAN POR LAS REMESAS
Mike Rogers es republicano por Alabama, una de las bases de apoyo de Trump. En su iniciativa para gravar las remesas, dijo que sería “uno de los métodos” para financiar el muro.
“Intento presentar legislación, la Ley de Financiamiento Fronterizo 2017 (Border Funding Act of 2017) que pondría un impuesto de dos por ciento a esas remesas como Western Unión y Moneygram. Eso generaría cerca de mil millones de dólares al año”, dijo en una audiencia legislativa.
Rogers estimó que el total de remesas desde Estados Unidos hacia países latinoamericanos asciende anualmente a unos 30 mil millones de dólares.
La mayoría van a México.
El posible uso de las remesas a México como mecanismo de pago por el muro fronterizo fue primero propuesto por Trump durante su campaña presidencial.
Los analistas preveían este momento, y también los mismos migrantes, que durante el fin de año pasado apuraron el envío de recursos a México, generando un ingreso extraordinario.
Mike Rogers, congresista por Alabama, dijo que aspira recaudar mil millones de dólares al año con su propuesta. El republicano formuló el anuncio durante la interpelación del nuevo secretario de seguridad nacional, John Kelly, ante la comisión de seguridad nacional de la Cámara baja.
Los líderes republicanos en el Congreso han estimado en 15 mil millones de dólares el costo de la construcción del muro. Trump ha reiterado su expectativa de que México asuma el costo.
MANTENER LA RELACIÓN
El grupo de legisladores demócratas que presentó hoy la resolución legislativa para “subrayar la importancia de una alianza” entre México y Estados Unido está encabezado por Eliot Engel, quien junto a Albio Sires (Nueva Jersey), y Joaquín Castro (Texas), lideran la iniciativa.
“Esta resolución envía un claro mensaje a la Presidente (Enrique) Peña Nieto y al pueblo mexicano de que no permitiremos que la diplomacia imprudente de la Administración de Trump defina nuestra asociación con México. Exhorto al Presidente Trump a invertir el rumbo inmediatamente para que nuestra relación pueda volver a encaminarse”, agregó Engel.
Por su parte, Sires, miembro del Comité de la Cámara Baja para América Latina, insistió en que México “ha sido un fuerte aliado” del país tanto con gobiernos republicanos como con demócratas.
“Los esfuerzos equivocados del Presidente Trump para demonizar a nuestros vecinos podrían tener repercusiones costosas para los estadounidenses. Su retórica divisiva no hace otra cosa que atacar innecesariamente a una nación que sigue siendo un fuerte aliado de Estados Unidos reiteró.
Sires consideró que la mejor manera para proteger la frontera sur del país es continuar con una fuerte relación con el país vecino en materia de seguridad, pero también desde el punto de vista económico y diplomático “que tanto el presidente (George W.) Bush como el presidente (Barack) Obama ayudaron a fortalecer”.
Castro señaló que la actitud de Trump hacia México ha sido “un comportamiento imprudente e intimidatorio” y “completamente inapropiado”.
“Nuestro amigo México ha sido blanco de los ataques del presidente desde el comienzo de su campaña. Consideramos importante asegurar a México, importante socio económico y de seguridad, que valoramos profundamente la cooperación de nuestras naciones”, añadió el congresista por Texas.
Trump desató una crisis diplomática con su país vecino tras firmar recientemente una orden ejecutiva para “la construcción inmediata” de un muro en la frontera con México, cuyo coste, reiteró, van a reembolsar los mexicanos “al 100 por ciento”.
Las afirmaciones del magnate provocaron la cancelación de la visita prevista por parte de Peña Nieto a la Casa Blanca para finales de enero, a la vez que el Gobierno mexicano ha insistido en que sus ciudadanos no costearán la construcción de la barrera fronteriza en ningún caso.
No obstante, ambos países han aceptado mantener el diálogo.