De acuerdo con la indagatoria, el policía habría recibido 5 mil pesos como una multa impuesta a dos jóvenes involucrados en una riña en la Feria de Chilpancingo. Después, colaboró en la desaparición de las víctimas a manos de tres sujetos, según el relato de cuatro testigos.
Las patrullas involucradas en la detención del 31 de diciembre ya fueron identificadas. El Grupo de Coordinación Guerrero informó que un tercer joven desaparecido (Abel Aguilar, de 18 años) fue hallado muerto.
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Por Alina Navarrete Fernández
Guerrero/Ciudad de México, 7 de enero (ElSur/SinEmbargo).- Un juez en Guerrero dictó prisión preventiva contra un policía de Chilpancingo acusado de homicidio contra dos de los siete jóvenes reportados como desaparecidos el pasado 31 de diciembre.
En una audiencia realizada la noche de ayer, el agente del Ministerio Público leyó la descripción de los hechos del 31 de diciembre pasado, con base en los relatos de cuatro testigos.
Esa madrugada ocurrió una riña en las instalaciones de la Feria de Navidad y Año Nuevo en Chilpancingo, donde fueron detenidos Jorge Arturo Vázquez Campos y Marco Eduardo Catalán Cabrera junto con un tercero, identificado como Milton. Los tres fueron trasladados en una patrulla a Barandillas mientras eran resguardados por otra patrulla que conducía el policía acusado.
Al llegar a Barandillas, el ahora acusado pidió a su compañero que Milton no fuera puesto a disposición pues era amigo suyo, mientras que Campos Vázquez y Catalán Cabrera sí fueron ingresados a los separos alrededor de las 8:00 de la mañana.
Milton salió de las instalaciones y le indicó al agente que iría por dinero para pagar la multa de los dos jóvenes.
El acusado recibió 5 mil pesos para pagar la multa que adjudicaron a Campos Vázquez y Catalán Cabrera. Luego los acompañó afuera de Barandillas, alrededor de las 9:20 de la mañana, y al salir le hizo señas al chofer de un carro Nissan tipo Tsuru color blanco en el que iban tres pasajeros.
Según los testimonios, del lado del copiloto descendió Milton, de la parte trasera bajó otro hombre que portaba un arma larga AR-15 , y ambos, con ayuda del policía, forzaron a Vázquez Campos y a Catalán Cabrera a subir al carro “con lujo de violencia”.
Después los llevaron al viejo libramiento a Tixtla, donde los asesinaron ese mismo día– esto se comprueba con las características de sus cuerpos que fueron hallados la noche del miércoles, embolsados, maniatados, con impactos de bala en la cabeza–.
Durante la lectura de los hechos, el acusado constantemente negaba con la cabeza. El juez que dirigió la audiencia inicial le preguntó si tenía alguna duda sobre lo que se relató, y respondió que no conocía a la persona que pagó la multa (Milton) y que tampoco se ocupó de pagarla, sin embargo, se le indicó que si tenía algo que decir al respecto, y dijo que lo haría después.
Tras consultar a su abogado, el acusado se reservó su derecho de declarar sobre los hechos y solicitó que su situación jurídica se resolviera en un plazo de 144 horas, equivalentes a seis días, mientras su defensa reúne pruebas a su favor.
Por su parte el Ministerio Público solicitó que se le dictara prisión preventiva y el juez la concedió, “por el tiempo que dure el proceso”, sin exceder dos años.
Nada se dijo de los otros dos cómplices que participaron en el crimen, según los testimonios.
Vázquez Campos era dueño del local Zapata’s Baber Shop, mientras que Catalán Cabrera trabaja como chef en Cuernavaca, Morelos. Ambos fueron sepultados el viernes en el panteón central de Chilpancingo.