A través de un memorando que envió a los 30 los equipos que hay en la NBA, la liga indica que para los jugadores que violen los protocolos de seguridad esta temporada, existe la posibilidad de que se les aísle en una cuarentena durante la temporada y la reducción de los cheques de su salario.
Nueva York, 5 de diciembre (EFE).– La NBA lanzó una seria advertencia a los equipos, diciéndoles que las violaciones al protocolo que conducen a la propagación del coronavirus, afectando a los rivales y causando cambios en el calendario de partidos, podrían resultar en “multas, suspensiones, ajustes o pérdida de elecciones del sorteo universitario y perdidas de partidos”.
A través de un memorando que envió a los 30 los equipos que hay en la NBA, la liga indica que para los jugadores que violen los protocolos de seguridad esta temporada, existe la posibilidad de que se les aísle en una cuarentena durante la temporada y la reducción de los cheques de su salario.
Si bien la nota no describe la duración de las cuarentenas, dice que cualquier jugador “puede estar sujeto a un ajuste proporcional para pagar los partidos que se pierda durante el período en que esté en cuarentena y se someta a pruebas debido a la participación en tales actividades y/o conducta”.
Estas amenazas son preocupaciones importantes de las oficinas centrales de cada equipo a medida que las franquicias trabajan para comprender la gravedad total de operar una temporada completa de la NBA durante una pandemia de coronavirus, por primera vez fuera de una burbuja, y en un medio ambiente donde la enfermedad de la COVID-19 se ha cobrado, en Estados Unidos, la vida de 270 mil personas.
En un memorando de salud y seguridad de 158 páginas compartido con los equipos este sábado, se les informó que la liga puede “realizar inspecciones en persona sin previo aviso de las instalaciones de cada franquicia” para descubrir si las organizaciones cumplen con los protocolos de seguridad COVID-19 que tienen establecidos.
Mientras empresas farmacéuticas como Moderna y Pfizer buscan una vacuna que pueda ser aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, en inglés) y distribuida al público en general, la NBA describió también su enfoque de cara a la administración de la misma.
Una vez que la FDA apruebe una vacuna y los especialistas que trabajan con la NBA y el sindicato de jugadores creen que es segura y eficaz, ambas partes discutirán si sus entrenadores, jugadores y personal deberán recibirla.
Si no se requiere la vacuna para los jugadores y el personal de la NBA, podría ser necesario crear restricciones adicionales de salud y seguridad para aquellos que no la reciban.
Indica que por ejemplo, las personas que no reciben la vacuna podrían tener que usar máscaras o hacerse la prueba con más frecuencia que las que sí la reciben.
A pesar de las preocupaciones sobre la amenaza de infección a medida que los equipos regresan a los viajes que les exige la competición, la NBA permite que los jugadores y el personal salgan de los hoteles para cenar en estas circunstancias: cenas al aire libre, cenas en habitaciones totalmente privatizadas en restaurantes o restaurantes aprobados por la NBA / NBPA.
Sin la protección de un entorno de burbujas, la NBA está decidida a frenar las posibles exposiciones que los jugadores y el personal tendrían tradicionalmente en una temporada normal, por considerar que siguen siendo un factor importante de contagios.
En casa, los jugadores y el personal tienen prohibido ingresar a bares, salones o clubes, asistir a lugares de entretenimiento o partidos en vivo de otros deportes, o visitar gimnasios públicos, spas, áreas de piscinas o grandes reuniones sociales interiores que superen las 15 personas.