Los 10 terabytes de información robados por el grupo llamado Guacamaya también incluyó correos electrónicos de las fuerzas armadas de El Salvador, Perú y Colombia, y de la Policía Nacional salvadoreña.
Ciudad de México, 6 de octubre (SinEmbargo).- La Comisión de Defensa Nacional, presidida por el Diputado Ricardo Villarreal García del Partido Acción Nacional (PAN), acordó reunirse con Luis Cresencio Sandoval González, titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), para responder los cuestionamientos acerca del “hackeo” que sufrió la dependencia.
“Años atrás no era un tema, pero ahora todos hemos tenido algún amigo o amiga que ha sufrido de una vulneración en sus datos personales; de ahí la necesidad de más presupuesto a este rubro, pues está en juego la seguridad nacional del país”, subrayó el Diputado Villareal.
“El tema de ciberseguridad debe ser atendido no sólo en la Secretaría de la Defensa Nacional, sino en todos los órdenes de Gobierno, pues hay falta de recursos para esa materia”, agregó.
En representación del partido Morena, el Diputado Mario Miguel Carrillo Cubillas y la Diputada Juanita Guerra Mena se manifestaron a favor de reunirse con el Secretario de la Sedena, pero la segunda enfatizó que el Poder Legislativo debe trabajar en materia de ciberseguridad a fin de dar certeza jurídica las dependencias.
Guillermo Octavio Huerta Ling, diputado del PAN, dijo que la reunión con el secretario de la Defensa Nacional permitirá conocer las necesidades presupuestales de esa dependencia y ver cómo desde esta instancia legislativa se coadyuva para que la Sedena realice con eficiencia su tarea y evitar la vulneración de sus datos.
El pasado 30 de septiembre, el Presidente Andrés Manuel López Obrador minimizó el acto de ciberpiratería, diciendo que “no hay nada que no se sepa” y afirmó que aparentemente la intrusión ocurrió durante un cambio en los sistemas cibernéticos de la Secretaría de la Defensa Nacional.
El grupo que se hace llamar Guacamaya, integrado por elementos anónimos que dicen ser guerreros por la justicia social, dice utilizar el hackeo para sacar a la luz la injusticia y la corrupción en defensa de los pueblos indígenas. Anteriormente, piratas cibernéticos que utilizan ese mismo nombre robaron y dieron a conocer los correos electrónicos de una compañía minera que desde hace tiempo enfrentaba acusaciones de violaciones a los derechos humanos y daños al medio ambiente en Guatemala.
Los 10 terabytes de información robados por el grupo también incluyen correos electrónicos de las fuerzas armadas de El Salvador, Perú y Colombia, y de la Policía Nacional salvadoreña. Aparentemente, México fue el país que sufrió el mayor robo de datos.