Los acusados son miembros de “organizaciones internacionales de tráfico de drogas que trabajaron conjuntamente para movilizar grandes cantidades” de droga, dijo en un comunicado Nicola Hanna, Fiscal del Distrito Central de California.
Los Ángeles, 6 sep (EFE).- Trece sospechosos de integrar una red de tráfico de cocaína, heroína y metanfetaminas que se vendían desde México hacia el sur de California y de allí a Canadá fueron arrestados y deben comparecer este jueves en una corte de California, informaron las autoridades.
Los acusados son miembros de “organizaciones internacionales de tráfico de drogas que trabajaron conjuntamente para movilizar grandes cantidades” de droga, dijo en un comunicado Nicola Hanna, Fiscal del Distrito Central de California.
Siguiendo una decisión judicial que ordenó en total el arresto de 30 sospechosos de formar parte de la red, la operación logró decomisar casi 453 kg de cocaína, 9.7 kg de heroína, más de 45 kg de “éxtasis” (MDMA), además del equivalente a 811 mil dólares en moneda canadiense.
La droga, según la investigación, era intercambiada por dinero en efectivo o grandes cantidades de “éxtasis” proveniente de Canadá, en ciudades como Costa Mesa, Compton, Ventura y Redlands.
Parte de esta droga también fue enviada a Australia desde California.
Según detalló Hanna, la operación de narcotráfico utilizaba miembros de organizaciones criminales de Canadá, México, Serbia, China y Sudán.
La acusación detalló que los narcotraficantes se valían de teléfonos celulares modificados, con sistemas cifrados de grado militar, para comunicar información y órdenes referentes a las operaciones.
Los detenidos, tres del área de Los Ángeles y los otros arrestados en Seattle y en varias localidades de Canadá, tienen programada hoy una audiencia preliminar en la Corte de Distrito de Los Ángeles.
De ser hallados culpables de todos los cargos, los acusados enfrentan una sentencia máxima de cadena perpetua y mínima de 10 años en prisión federal.
La investigación fue un trabajo conjunto de la Oficina de Investigación Federal (FBI), el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Estas entidades contaron además con el apoyo de la Real Policía Montada del Canadá y con el de autoridades locales de varias ciudades californianas y canadienses.