En esta entrega de VERSUS, Adriana Buentello, Alina Duarte, Daniela Barragán, Perla Velázquez y Meme Yamel hablaron sobre la herencia que deja el Presidente Andrés Manuel López Obrador en materia de seguridad: sus aciertos y sus pendientes. Y señalaron, cuál será el camino que deberá seguir la virtual Presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo en la materia.
Ciudad de México, 6 de agosto (SinEmbargo).– El Presidente Andrés Manuel López Obrador ha logrado contener los índices de violencia, no obstante se trata de una problemática que aún aqueja a comunidades enteras —como sucede en Chiapas donde mexicanos han tenido que abandonar el país— contra el cual tendrá que lidiar la virtual Presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, plantearon Adriana Buentello, Alina Duarte, Daniela Barragán, Perla Velázquez y Meme Yamel.
En esta entrega de VERSUS, programa que se transmite en el canal de YouTube Estudio B de SinEmbargo, las periodistas expusieron cómo la situación de inseguridad que existe en el país es un fenómeno que proviene del Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) frente al cual el Gobierno de López Obrador ha logrado hacer una tarea de contención mediante su estrategia de atención a las causas de la violencia y el despliegue de la Guardia Nacional.
No obstante, coincidieron que hay regiones del país en dónde aún se debe recuperar la paz, zonas que tienen sus particularidades y en las cuales tendrá que trabajar Sheinbaum Pardo, quien como Jefa de Gobierno de la capital logró mejorar de manera importante la seguridad.
“La estrategia de Andrés Manuel López Obrador no es la de resolver de fondo y eliminar en 6 años los homicidios dolosos, no, no. Es contener. Eso sí ha pasado, es ponerle al menos un tope y eso es cuando vemos esa estrategia. Es una estrategia a largo plazo, no es algo que vaya a resolverse en seis o en 12 años, es algo que al menos alguien tenía que ponerle un hasta aquí y es en donde entra la estrategia Andrés Manuel López Obrador: modificar lo que es Policía Federal con la Guardia Nacional ahí es donde tenemos uno de los grandes obstáculos porque obviamente no se ha logrado empapar al 100 por ciento, no ha logrado operar como debería de operar la Guardia Nacional”, expuso Meme Yamel.
Yamel indicó que mientras los elementos militares están capacitados para seguir instrucciones y operar, los miembros de la extinta Policía Federal sí tienen más entrenamiento en cuanto a hacer investigación, en cuanto a tomar sus propias decisiones al momento de decidir intervenir o no. En ese sentido, ahondó que el Presidente López Obrador optó, en un principio, por combatir la corrupción dentro de instituciones como la Policía Federal, cuyo exsecretario, Genaro García Luna, está preso en Estados Unidos por vínculos con el crimen organizado.
“Tu estrategia de seguridad es una estrategia que está siendo operada por expertos en seguridad nacional, no en seguridad interior. Entonces, qué es lo que pasa cuando mezclas todos estos factores que tu estrategia es contención. Entendiendo eso creo que hoy sí podemos dejar con toda claridad, qué es lo que ha estado pasando en esta administración: Lo que busca o lo que buscó Andrés Manuel López Obrador es contener y dejarle a una siguiente administración el siguiente paso en la tarea de la construcción de la seguridad que hoy quedará a cargo de Claudia Sheinbaum”, apuntó Meme Yamel.
La periodista precisó que cuando hablamos de seguridad, no solamente se trata de un asunto de estrategia operativa, sino que también implica hablar de órdenes que liberan los jueces, del papel que toman las fiscalías, los ministerios públicos, y del rol que tienen los poderes ejecutivos al menos en materia municipal y en los estados.
Adriana Buentello expuso a su vez que en general es entendible que la estrategia del Presidente López Obrador de “abrazos, no balazos” busca romper con una tendencia de confrontación directa con las agrupaciones criminales y atender las causas, no obstante cuestionó que denoste los señalamientos sobre cómo algunas regiones en Michoacán y Chiapas, por ejemplo, están envueltas en dinámicas de violencia de las que no han podido escapar.
“El tema de atender las causas va a ser una estrategia de muy largo plazo. Lo que está sucediendo y lo que estamos viendo también por parte del Presidente es denostar las denuncias que hay en algunas regiones como en Ostula, en Michoacán, como en Chiapas, muchísimas zonas en Chiapas y desde hace varios años se le está diciendo al Presidente lo que está sucediendo. Chiapas es una zona sumamente delicada, no solamente convergen muchas problemáticas relativas a los cacicazgos, a los problemas comunitarios, al tema de los migrantes, sino también es una mezcla junto con el crimen organizado que ha ido incrementando en esta gestión de Rutilo Escandón, que a mí me parece que es de los o se está disputando el premio por el peor de los gobernadores de todo el país”, criticó.
Buentello recordó cómo se ha dado a conocer que hay por lo menos 600 chiapanecos que se han visto forzados a oír de la violencia del crimen organizado. “Las declaraciones del Presidente siento que no ayudan en este sentido cuando se habla de que los adultos mayores tengan esta influencia como en el tejido social para que los adolescentes, los jóvenes, no se involucren en el crimen organizado, cuando no creo que ese sea el fondo realmente el asunto si no que están siendo reclutados por la fuerza y por eso están huyendo a Guatemala o a otros estados”.
“Ha quedado claro que no hay manera en estos momentos, más al final del sexenio, de establecer una ruta de salida a estos cárteles y al avance del crimen organizado en nuestro país. No podemos comparar lo que vivimos incluso por parte del propio Estado en los sexenios previos. Es decir, no estamos culpando al presidente de formar parte de estos carteles como el propio García Luna y el sexenio de Felipe Calderón de manera muy visible involucrado en estos temas. Sí, me parece que hay mucho que no ha hecho el Presidente y creo que desde la parte discursiva ha abandonado a muchas regiones del país que están en una situación sumamente delicada”, refirió la periodista.
Por su parte, Alina Duarte planteó que aún cuando Claudia Sheinbaum y Omar García Harfuch pudieron recuperar la seguridad en la Ciudad de México, es difícil pensar que se podrá replicar este mismo modelo a nivel nacional, sobre todo cuando en cada región del país el crimen organizado ha logrado constituir toda una economía criminal con múltiples rostros.
“No se mira igual el narcotráfico en Chiapas, que en Tamaulipas, que en Veracruz, que en la propia Ciudad de México y eso para mí es muy difícil porque si bien me ha tocado ser testigo de las condiciones en las que se viven en varios de los estados de la República, hablar de una política generalizada de combate al narcotráfico es en realidad todo y nada. Hay lugares donde la presencia propia de la Guardia Nacional resulta conflictiva y hay otros lugares en donde se sugiere y se pide la intervención de la Guardia Nacional”, compartió Alina.
Duarte precisó que hoy en México la economía criminal ya no se limita solamente a traficar cocaína, marihuana: “estamos hablando de trata de personas, estamos hablando de tráfico de órganos, estamos hablando de control de los recursos naturales, desde la tala, de las minas, es decir es tan complejo y tan diverso que a mí me cuesta trabajo pensar si la estrategia en la Ciudad de México donde no necesariamente está inmiscuido el tema de los recursos naturales en estas dimensiones va a aplicarse en otros estados”.
“Ahí tendrá que ser una estrategia conjunta que es lo que se planteaba el mando único, me parece que por ahí es en donde se tiene que mapear esa situación porque por ejemplo lo complejo del estado de Chiapas es que es una ruta fronteriza. donde es el paso de migrantes, el tráfico de drogas y la siembra de amapola, o sea, son tantas cosas que no puedes decir bueno esta es la estrategia única y exitosa que se va a llevar a cabo”, planteó.
Daniela Barragán señaló a su vez que por el lado de atender las causas, el mantener a Ariadna Montiel en la Secretaría de Bienestar para el próximo Gobierno es un importante mensaje de continuidad, no obstante destacó la urgencia que existe entre la población de sentirse segura.
En ese sentido, señaló que además del crimen organizado, el Gobierno tendrá que hacer frente a otros actores que han tenido injerencia en la actual situación de inseguridad. “Hay una columna que publica Luis Hernández Navarro en La Jornada en donde dice a ver, no solo es el crimen organizado, son mineras empresas inmobiliarias y desarrolladoras turísticas a menudo mezcladas entre sí que pretenden hacerse de tierras a como dé lugar”.
“Este asunto va más allá de un ‘abrazos, no balazos’, es el reto que tiene un Omar García Harfuch, repensar si va a bastar con poner 3.1 policías por cada mil habitantes en México para generar una sensación de seguridad y cómo le entras a enfrentar no sólo criminen organizar, a minerar, a enfrentar políticos que ese también es un asunto que nos lleva a muchísimos temas de de la inseguridad en el país”.
Daniela Barragán apuntó que además Claudia Sheinbaum tendrá que romper con el manejo mediático que se ha dado al tema de seguridad. ”Siendo muy honesta porque se habló muchísimo más del caso de Guanajuato de los estallidos de violencia que tuvieron y que han tenido a lo largo de todos estos años y por qué no se ha hablado por ejemplo de todo este asunto de Michoacán que gobierna Morena, por qué nos ha hablado tanto del caso de Tamaulipas que al final hace unas semanas matan a un empresario que se estuvo quejando, no de un mes pasado, sino durante mucho tiempo del cobro de piso”, cuestionó.
“O sea, es como a ver deja de apapachar a los gobernadores porque yo sí creo que desde la mañanera eso ha ocurrido, se les ha apapachado y qué hacen los otros o sea, por qué no tenemos al Gobernador (Alfredo) Bedolla, al Gobernador de Michoacán dando la cara por esto por qué no tenemos al Gobernador(Américo Villarreal) de Tamaulipas (…). Zacatecas de los Monreal o sea, por qué no estamos hablando de eso en la mañanera”, criticó Barragán.