Garcés Rojo se negó a declarar en esta ocasión, mientras que sus abogados solicitaron la duplicidad del plazo constitucional, misma que fue concedida y el Juez dio cita el próximo lunes 11 de julio a las 15:30 horas para continuar la audiencia.
Ciudad de México, 6 de julio (SinEmbargo).– La Fiscalía General de la República (FGR) imputó los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita en diversas modalidades a Víctor Garcés Rojo, exvicepresidente del equipo Cruz Azul que fue detenido el mes pasado en la Ciudad de México.
La audiencia dio inicio alrededor de las 15:20 horas de este miércoles en el penal de máxima seguridad del Altiplano, donde se logró una conexión con Garcés Rojo, quien está preso en el Reclusorio Norte, por medio de videoconferencia.
Aunque la defensa del exvicepresidente del equipo de fútbol solicitó al Juez de control el diferimiento de la audiencia bajo el argumento de que no se encontraba impuesta de la carpeta de investigación, el funcionario negó la solicitud.
En dicha sesión, el Juez determinó también imponerle al detenido la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa.
Garcés Rojo se negó a declarar en esta ocasión, mientras que sus abogados solicitaron la duplicidad del plazo constitucional, misma que fue concedida y el Juez dio cita el próximo lunes 11 de julio a las 15:30 horas para continuar la audiencia y se determinará si el detenido es vinculado a proceso o no.
Según las investigaciones de la FGR, el empresario formó parte de una organización delictiva que realizó operaciones simuladas a distintas empresas.
De acuerdo con la Fiscalía, entre 2011 y 2017, el director de la cooperativa Guillermo “Billy” Álvarez Cuevas, Garcés y otros tres exmiembros de Cooperativa La Cruz Azul simularon operaciones por 114 millones 198 mil 847 pesos con las empresas Plexival, Trans Nau, Attar 2715 SC, Recursos Financieros Ferala, Asesoría Profesionales Eicer, K & C Consulting y Expertos en Asesoría Empresarial.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) congeló las cuentas bancarias de Guillermo Álvarez en mayo de 2020 y las de su hermano Alfredo Álvarez, vicepresidente, por presunto lavado de dinero y delincuencia organizada, así como por movimientos irregulares de dinero por mil 200 millones de pesos.