La producción avanzada de alquitrán de abedul de los neandertales revela su complejidad cognitiva.
Por Felipe Espinosa Wang
Alemania, 6 de junio (DW).– Es posible que la primera sustancia sintética elaborada en el planeta Tierra no fuera un producto de nuestra especie, sino de los neandertales, que podrían haber sido los primeros en preparar cuidadosamente un complejo método para transformar la corteza de abedul en pegamento que utilizaban para unir la piedra al hueso y la madera en herramientas y armas.
Este descubrimiento vuelve a poner de manifiesto las avanzadas capacidades cognitivas de los neandertales, demostrando que no eran seres primitivos y que nuestros primos extintos probablemente también se dedicaban a la química.
ALQUITRAN DE ABEDUL: ¿ACCIDENTE O ELABORADO CIUDADOSAMENTE?
Anteriormente, se creía que los neandertales encontraban alquitrán de abedul tras un incendio o utilizaban un método de producción sencillo. Sin embargo, científicos han descubierto indicios de que los neandertales empleaban un método más eficaz que implicaba un proceso escalonado de destilación para extraer el adhesivo sintético.
Production method of the Königsaue birch tar documents cumulative culture in Neanderthals https://t.co/dNhplLpvf6 pic.twitter.com/K39y2gDjXZ
— PaleoAnthropology+ (@Qafzeh) May 23, 2023
Analizando muestras del antiguo adhesivo, los investigadores de la Universidad de Tubinga y del Museo Estatal de Prehistoria de Alemania, así como de la Universidad de Estrasburgo (Francia), descubrieron que muy probablemente el alquitrán de abedul se sintetizaba en cámaras subterráneas que restringían el flujo de oxígeno.
En concreto, los investigadores, que publicaron un estudio en la revista Archaeological and Anthropological Sciences, descubrieron que el alquitrán de abedul producido bajo tierra contenía altos niveles de un polímero natural llamado suberina, mientras que el alquitrán fabricado quemando corteza en la superficie no lo contenía.
Al examinar muestras de un yacimiento neandertal de Alemania, llamado Königsaue, los científicos observaron que éstas eran ricas en suberina, por lo que creen que los neandertales fabricaban su pegamento bajo tierra.
“Si la suberina sólo se encuentra en el alquitrán de abedul fabricado con técnicas subterráneas en entornos con poco oxígeno, su presencia en el alquitrán de Königsaue apunta inequívocamente al uso de una de estas técnicas en Königsaue”, escriben los científicos, según recoge IFL Science.
Discutiendo la importancia de este hallazgo, explican que “si estas dos piezas se hicieron con un método por encima del suelo como el método de condensación, sería difícil argumentar que el alquitrán de abedul neandertal refleja una tecnología compleja”.
“Si, por el contrario, las piezas de Königsaue se hicieron con un método que incluía procesos subterráneos invisibles y ambientes con bajo oxígeno creados intencionadamente, tal hallazgo implicaría que los neandertales inventaron o desarrollaron un proceso técnico para transformar su mundo material”.
“Esto, a su vez, proporcionaría información valiosa sobre sus capacidades cognitivas y culturales”, escriben.
Descubrimientos anteriores han demostrado que los neandertales tenían dietas complejas que implicaban múltiples pasos en la preparación de los alimentos. Sin embargo, es posible que su uso del fuego no se limitara a calentar o cocinar. Así, cada vez hay más pruebas que cuestionan la idea de que la inteligencia humana es un rasgo excepcional, lo que a su vez demuestra las capacidades culturales acumulativas de los neandertales.