La organización internacional consideró que el aumento en el salario mínimo y los planes del Gobierno para reforzar la inversión en infraestructuras y aumentar la producción petrolera podría contribuir a elevar la demanda interior en el país.
París, 6 de marzo (EFE).– La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha corregido a la baja las previsiones de México, con un crecimiento del 2 por ciento este año y del 2.3 por ciento el próximo, lo que supone en cada caso cinco décimas menos de lo indicado en noviembre.
La organización considera que la subida del salario mínimo y los planes del Gobierno para reforzar la inversión en infraestructuras y aumentar la producción petrolera podría contribuir a elevar la demanda interior.
Junto a México, Argentina también ha recibido malas previsiones. La recesión económica, sin ser tan profunda como en 2018 (-2.5 por ciento), va a continuar. La caída del PIB del 1.5 por ciento que la organización estima para 2019 es la principal revisión al alza de las expectativas en este informe (era cuatro décimas peor en noviembre). En 2020, el cambio del peso debería continuar a impulsar las exportaciones, como también la producción agrícola, y Argentina debería progresar un 2.3 por ciento.
La zona euro y el Reino Unido también sales mal parados debido a la incertidumbre política, la fuerte ralentización del comercio exterior y el "brexit". En su informe de perspectivas publicado este miércoles, la OCDE calcula que el producto interior bruto (PIB) de la zona euro sólo crecerá un 1 por ciento en 2019 (tras el 1.8 por ciento de 2018), lo que significa ocho décimas menos de lo que había anticipado en noviembre.
PANORAMA PARA 2020
Las cosas apenas mejorarán en 2020, con un alza del 1.2 por ciento en la eurozona, lo que de nuevo significa cuatro décimas menos de lo que se había estimado hace cuatro meses y medio. Entre los grandes países de la moneda única (en este informe sólo hay datos desglosados para los miembros del G7 y del G20), los más afectados son Alemania, con un incremento del 0.7 por ciento este año (nueve décimas menos) y del 1.1 por ciento el próximo (tres menos) e Italia, con un año 2019 de recesión (-0.2 por ciento, 1.1 puntos menos) y una tímida recuperación en 2020 (0.5 por ciento, cinco décimas menos).
Francia, menos expuesta al comercio mundial, tampoco se salva de la ralentización, ya que la progresión de su PIB debería limitarse al 1.3% tanto este ejercicio como el próximo (con tres y dos décimas menos de lo anunciado en noviembre), tras el 1.5 por ciento en 2018.
CONSECUENCIAS DEL "BREXIT"
La incertidumbre sobre las consecuencias del "brexit" o salida británica de la Unión Europea (UE) y la debilidad la zona euro son dos de los factores que lastran al Reino Unido, que tendrá una expansión de únicamente el 0.8 por ciento en 2019 (seis décimas menos de lo avanzado en noviembre) y el 0.9 por ciento en 2020 (dos décimas menos).
Los autores del estudio advierten de que esas predicciones están condicionadas a que el "brexit" se haga de forma ordenada y no abrupta, con un periodo de transición hasta finales de 2020. Una separación de la UE sin acuerdo acarrearía "un gran choque adverso para Europa" con posible impacto en el exterior. Para algunos países pequeños, en particular Irlanda, Holanda y Dinamarca, con fuertes vínculos económicos con el Reino Unido, sus exportaciones allí podrían caer un 15 por ciento a medio plazo.
RALENTIZACIÓN EN EU
Frente a la preocupante evolución del Viejo Continente, la OCDE considera que la ralentización será mucho más moderada en Estados Unidos, con una subida del PIB del 2.6 por ciento este año (una décima menos de lo calculado hace cinco meses) y del 2.2 por ciento el próximo (una décima más). La razón es que aunque los incrementos de aranceles están pesando en los costes de las empresas y en los precios, la solidez del mercado laboral y las condiciones financieras favorables siguen favoreciendo los ingresos de los particulares y el gasto.
Sobre China, los autores del estudio proyectan una ralentización controlada -incremento del PIB del 6.2 por ciento en 2019 y del 6 por ciento en 2020 después del 6.6 por ciento en 2018- sobre la hipótesis de que la demanda interna compensará la pérdida de impulso del comercio exterior. Pero advierten de que una menor cadencia del ritmo de su economía reduciría las expectativas en todo el mundo.