Esta protesta se suma a otras que se han sucedido en las últimas semanas, como la de dos ecologistas que lanzaron sopa de tomate a ‘Los Girasoles’ de Van Gogh, expuesto en la National Gallery de Londres.
Ciudad de México, 5 de noviembre (SinEmbargo).– Como parte de una protesta por la emergencia climática mundial, dos activistas de Futuro Vegetal se pegaron este sábado a los marcos de los cuadros de “La maja desnuda” y de “La maja vestida” de Francisco de Goya, los cuales se encuentran expuestos en el Museo Nacional del Prado en Madrid.
Las imágenes fueron captadas en video y difundidas por la misma organización.
En medio de ambas pinturas escribieron el mensaje “+1.5º”, como parte de la alerta por la subida de temperatura mundial que “provocará un clima inestable y graves consecuencias en todo el planeta”.
Por medio de su cuenta de Twitter, la organización explicó que la semana pasada la ONU “reconocía la imposibilidad de mantenernos por debajo del límite de aumento del Acuerdo de París de 1.5° de temperatura media respecto a los niveles preindustriales”, por lo que recalcaron que es un hecho que compromete la capacidad de cultivos, puesto que cada vez es más frecuente el fenómeno de la sequía.
“Las políticas gubernamentales siguen subvencionando el sistema agroalimentario industrial, uno de los principales responsables de la #CrisisClimática y especialmente vulnerable al contexto climático que tenemos a la vuelta de la esquina“, se lee en su hilo de Twitter.
También señalaron que las activistas continuaban pegadas, sin embargo, se desalojó la sala y no les permitían saber como se encontraban.
Pese a ello, las políticas gubernamentales siguen subvencionando el sistema agroalimentario industrial, uno de los principales responsables de la #CrisisClimática y especialmente vulnerable al contexto climático que tenemos a la vuelta de la esquina.
— FuturoVegetal (@FuturoVegetal) November 5, 2022
Apenas hace dos semanas, el Ministerio de Cultura de Madrid anunció que extremaría la seguridad de los museos españoles ante posibles ataques. El inisterio pidió a las pinacotecas que sean “exhaustivas” en el cumplimiento de las normas de acceso como la prohibición de introducir elementos y bebidas en las salas, mochilas y bultos grandes, paraguas u objetos punzantes, etc”.
Esta protesta se suma a otras que se han sucedido en las últimas semanas, como la de dos ecologistas que lanzaron sopa de tomate a “Los Girasoles” de Van Gogh, expuesto en la National Gallery de Londres, o la de los dos activistas que lanzaron puré de patata a un cuadro de Monet en Alemania.
De acuerdo con El País, este 4 de noviembre cuatro activistas ecologistas de la organización Última generación lanzaron sopa de guisantes sobre el cuadro “El Sembrador” (1988) de Van Gogh, y se pegaron con pegamento al muro donde estaba expuesto, en el museo del Palacio Bonaparte en Roma. Según las autoridades del recinto, la pintura no sufrió daños debido a que estaba protegida con un cristal.