El l Secretario General de Gobierno de Nuevo León argumentó que el penal de Topo Chico dejó de ser eficaz, pues ahí ya no puede logarse “la reinserción de los reos”, dijo durante su comparencia en la presentación del Tercer Informe de Gobierno local sobre el tema de Seguridad Pública.
Ciudad de México, 5 de noviembre (SinEmbargo).– El Gobierno de Nuevo León cerrará el penal de Topo Chico, en Monterrey, y reubicará a los reclusos en 700 celdas que se construirán en los penales de Cadereyta y Apodaca, esto informó el Secretario General de Gobierno de la entidad, Manuel González Flores.
La construcción de las celdas adicionales costará cerca de mil 900 millones de pesos, 900 de ellos provendrán del Gobierno local y el resto lo invertirá el Gobierno Federal, indicó el funcionario citado por medios nacionales.
González Flores argumentó que el penal de Topo Chico dejó de ser eficaz, pues ahí ya no puede logarse “la reinserción de los reos”, dijo durante su comparencia en la presentación del Tercer Informe de Gobierno local sobre el tema de Seguridad Pública.
“Con eso [las nuevas celdas] pensamos nosotros liberar y cerrar totalmente el penal del Topo Chico, un penal que tiene 80 años sirviendo, que dejó de ser eficaz y dejó de ser el lugar en el que podamos lograr la reinserción de los reos”, indicó.
El Secretario refirió que la construcción de un nuevo penal sería “muy costoso”, por lo que se buscaron “soluciones prácticas, concretas que pudiesen dar respuesta a la sobrepoblación“, aseguró.
Desde diciembre de 2017, el Gobierno de Nuevo León informó que invertiría 890 millones de pesos en la ampliación del penal de Apodaca.
En febrero de 2016 se registró un motín en el penal de Topo Chico que dejó como saldo a al menos 49 hombres muertos y 5 heridos.
Rodríguez Calderón, “El Bronco”, atribuyó la masacre a un enfrentamiento entre dos bandas criminales, una liderada por Jorge Iván Hernández Cantú, alías “El Comandante Credo”, y la otra por Juan Pedro Salvador Zaldívar, identificado como “El Z 27″.
Tan sólo en septiembre pasado el penal dio de qué hablar cuando un grupo de reos protestaó contra el cobro de cuotas por parte de otros internos.
