El nanosatélite, desarrollado por la AEM y la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), consiguió un enlace intersatelital con la constelación "Global Star", una misión de alcance global que abre la puerta a que futuros nanosatélites no dependan exclusivamente de sus estaciones terrenas.
Ciudad de México, 5 de octubre (SinEmbargo).- Aztechsat-1, el primer nanosatélite mexicano, ha cumplido exitosamente su misión en la Estación Espacial Internacional (EEI), informó la Agencia Espacial Mexicana (AEM) a través de un comunicado.
El nanosatélite, desarrollado por la AEM y la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), consiguió un enlace intersatelital con la constelación "Global Star", una misión de alcance global que abre la puerta a que futuros nanosatélites no dependan exclusivamente de sus estaciones terrenas, aspecto que deriva en reducción de costos y óptimo aprovechamiento de la vida útil de este tipo de dispositivos.
Cumple con éxito su misión el primer nanosatélite mexicano Aztechsat-1 ?????
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— AEM (@AEM_mx) October 4, 2020
Calificado por la NASA como "de excelente desempeño", el Aztechsat-1 fue incluido en la lista de proyectos destacados de los "20 años de ciencia" de la EEI, señaló Salvador Landeros Ayala, director general de la AEM, luego de finalizar la sesión de reporte de este proyecto conjunto con la NASA.
El proyecto EAM-NASA fue enviado a la EEI el 5 de diciembre de 2019 desde un Falcon 9 de SpaceX, al llegar a la Estación Espacial fue desplegado de su órbita para iniciar su misión de interconexión con la constelación satelital Global Star el 19 de febrero de 2020 y seguir transmitiendo hasta el día de hoy.
“El desempeño del equipo mexicano ya es comparable al de muchos ingenieros de la NASA”, destacó Andrés Martínez, Ejecutivo de Programas Espaciales de la División de Sistemas Avanzados de Exploración de la NASA, y subrayó que AztechSat-1 fue capaz de cumplir con todas las pruebas y reglamentaciones de la agencia espacial estadounidense.
Al finalizar su misión, es dispositivo seguirá un protocolo programado para su desintegración al entrar en contacto con la atmósfera de la Tierra, por lo que no formará parte de la basura espacial.