Ciudad de México, 5 de agosto (SinEmbargo/EFE).– Joaquín Archivaldo Guzmán Loera escapó del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1 de El Altiplano, en el Estado de México, por temor a ser extraditado a los Estados Unidos, aseguró su abogado Juan Pablo Badillo en entrevista con Univisión.
Dijo que “dentro de la gravedad de esta situación [la extradición], que a cualquier humano lo pone en un estado de nervios de crisis emocional, sí se advertía su gran preocupación”. Al ser cuestionado por el periodista Gerardo Reyez sobre si esta preocupación motivó a “El Chapo” a escaparse del penal de máxima seguridad, el representante legal del capo sinaloense dijo: “Por supuesto, señor. Esa es su intención, esa es la solución a sus temores. Sabedor, sencillamente dice: ‘ahí nos vemos’".
Dijo que Guzmán estaba muy preocupado por la petición de Estados Unidos, aunque no se explica cómo se enteró pues el documento era mantenido bajo reserva por el gobierno de México. Sobre qué otras cosas le preocupaban en ese momento a Guzmán Loera, Badillo dijo que era “ser abatido, ser asesinado”.
Badillo dijo que las declaraciones del ex Procurador mexicano Jesús Murillo Karam de que “El Chapo” no sería extraditado en menos de 300 años, preocuparon a su cliente, quien consideraba que Murillo había agitado el tema de la extradición con esa declaración. “Fue la única ocasión que me dijo: ‘Me preocupa esta situación [la extradición]’”.
El abogado de Guzmán Loera relató a la cadena estadounidense de habla hispana su encuentro con “El Chapo” Guzmán:
“En el locutorio número doce, del Cefereso número uno, del Altiplano, él se mostró muy a gusto con mi presencia. Dice: 'Señor, qué gusto me da verlo'. Le dije: 'Señor, el gusto también es mío'. Me dijo: 'Yo estaba temeroso que a usted no lo encontraran. '¿Por qué?', le pregunté. 'Porque me decían que usted no quería llevarme la defensa'. Le dije: 'Señor, aquí estoy, dígame'”.
EN SINALOA
El administrador de la DEA, Chuck Rosenberg, dijo hoy a la agencia española EFE que Estados Unidos cree que “El Chapo” Guzmán puede estar escondido en el estado mexicano de Sinaloa, porque al tener ahí su base de operaciones “es donde podría sentirse más seguro”.
“Con base en la información pasada, ‘El Chapo’ puede estar en México, puede haber regresado a Sinaloa porque allí tiene a su familia y sus contactos”, destacó. De esta forma, se cree que el jefe del cartel de Sinaloa sigue en México y se habría desplazado a Sinaloa tras huir el 11 de julio de la cárcel de máxima seguridad Altiplano I, en el estado de México.
Según precisó un portavoz de la DEA en declaraciones a EFE, el Gobierno de Estados Unidos basa sus hipótesis en experiencias pasadas, pero por el momento no tiene pruebas materiales para demostrar que se esconde en su tierra natal, desde la que fundó el cártel de Sinaloa y se consolidó como el líder del narcotráfico en México.
Las autoridades mexicanas y estadounidenses intercambian “día a día” información de sus servicios de inteligencia sobre el posible paradero de “El Chapo”, destacó el portavoz.
EL ABOGADO
De acuerdo con Univisión, en noviembre de 2014 Joaquín Guzmán Loera designó como abogado a Badillo a través de un documento al que obtuvo acceso y en el que aparece la firma del líder del Cartel de Sinaloa, la cual coincide con la difundida tras su recaptura ocurrida en febrero. El abogado dijo haber conocido a Guzmán desde 1993.
Fue él quien en días pasados promovió un juicio de amparo en contra de la orden de extradición que el gobierno mexicano confirmó que ya existe en su contra. La demanda de garantías fue admitida en el Juzgado Quinto de Distrito de Amparo en Materia Penal del Distrito Federal bajo el número 712/2015.
En el escueto escrito, el líder del Cártel de Sinaloa solicita la protección de la justicia federal en contra de “la orden de detención o aprehensión con fines de extradición”. El juez de amparo concedió al quejoso la suspensión de plano para que en caso de que sea capturado no se le extradite sin previo procedimiento.
Apenas este jueves 31 de julio trascendió que en el Juzgado Tercero de Distrito de Procesos Penales Federales del Distrito Federal se libró la referida orden de detención provisional con fines de extradición internacional en contra del criminal.
En ese recurso, Badillo alegó que autoridades de Estados Unidos y personalidades de ese país ya prejuzgaron a Guzmán con pronunciamientos condenatorios. Entre las personalidades citó "al simpatiquísimo belicoso Mr. Donald Trump quien se inventa supuestas amenazas y dice que lo llevará a los Estados Unidos 'para patearle el trasero".
"¿Usted se cree eso? Por su puesto que ni él mismo [Donald Trump] se la cree. Ah pero lo voy a traer cuando sea Presidente para patearle el trasero. Ya me imagino que la va a traer para estarle dando patadas como si fuera un balón de futbol", dijo Badillo sobre las declaraciones hechas por el precandidato republicano tras la fuga de Guzmán Loera y la difusión de supuestos tuits en las que el capo lo amenazaba.
En tanto, la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) informó hoy que activó una línea telefónica gratuita para que el público en general en Estados Unidos, México, América Centra y Sur, reporten cualquier información que ayude a la aprehensión de “El Chapo” Guzmán. En Estados Unidos es (844) 692-4101 y fuera del país es el número 001-844-692-4101.
Además habilitaron el correo electrónico [email protected] donde también se recibirá información.
Sumado a ello, la DEA lanzó un cártel que contiene los número telefónicos, la dirección electrónica, así como el monto de la recompensa, 5 millones dólares, que el Departamento de Estado de EU anunció para quien proporcione información que ayude a la captura y condena del capo mexicano.
La fuga de “El Chapo “representa un peligro para la seguridad y la seguridad de nuestros dos países. DEA continuará trabajando de cerca con nuestros colegas mexicanos y ofrecer la mayor cantidad de recursos posible para asegurar su detención “, sostuvo el Administrador Interino Chuck Rosenberg. Agregó que para la DEA es “una alta prioridad” la captura de Guzmán Loera.
LA EXTRADICIÓN A EU
Arely Gómez, titular de la Procuraduría General de la República (PGR), informó el pasado 17 de julio que el gobierno Estados Unidos solicitó la extradición de Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo”, el pasado 25 de junio, es decir, 16 días antes de la fuga del capo.
La información otorgada por la funcionaria se dio en el marco de la comparecencia de Gómez ante la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional de la 52 Legislatura, en donde también declaró que, en su momento, giró ordenes para que dicha solicitud fuera analizada y puesta a consideración, de acuerdo con los requisitos legales acordados en un Tratado Internacional pactado entre México y Estados Unidos.
En un comunicado, la PGR detalló que el motivo de la solicitud por parte de la diplomacia estadounidense era que requería a Guzmán Loera para ser procesado por una corte federal del sur de California acusado de asociación delictuosa por poseer e importar cocaína con el fin de distribuirla.
Políticos, analistas y medios de Estados Unidos han cuestionado por qué el capo no fue extraditado a ese país cuando fue recapturado por México en febrero de 2014. Algunos han culpado de negligencia al gobierno de Barack Obama. Otros, a la reticencia de México.
Las fechas sobre la posible extradición abren sospechas. El mismo día que el ex Procurador Jesús Murillo Karam se negaba a la extradición, “El Chapo” se amparaba. Todo sucedió entre el 26 y 27 de enero pasado.
En esos mismos días, en esas mismas horas, Estados Unidos hizo la petición formal de extradición, de acuerdo con Dolia Estevez, periodista de Forbes. Pero “El Chapo” ya se había amparado y el Procurador expresó que lo enviaría al extranjero.
El 27 de enero de 2015, en entrevista con The Associated Press, Murillo Karam dijo que no tenía intención de extraditar a Estados Unidos al líder del Cártel de Sinaloa (capturado casi un año antes: el 22 de febrero de 2014). Aceptó que en esos días le llegaría una petición formal de extradición por parte de Washington.
Se negó a extraditarlo porque, dijo, no había peligro de fuga.
“Yo puedo aceptar la extradición, pero en el momento que yo diga. ‘El Chapo’ se tiene que quedar aquí a cumplir su condena y después lo extradito. Unos 300, 400 años después. Falta mucho”, expresó.
El lunes inmediato anterior, al mismo tiempo que se desarrollaba el encuentro de Murillo Karam con la prensa extranjera, los abogados ya tramitaban amparos.
Además, justo cuando el Procurador reveló que estaba por recibir la petición de extradición de Estados Unidos, el juez pidió a la PGR y a Relaciones Exteriores, dependencias mexicanas encargadas de la posible extradición del capo, que informaran en un plazo no mayor a 15 días de “si se ha iniciado algún trámite que tenga como finalidad trasladar al prisionero del penal del Altiplano a otro centro penitenciario”.
Pocos meses después, “El Chapo” se fugó.
