Los científicos de la Universidad de Nanjing hallaron en muestras recogidas por la sonda Chang’e 5 que el suelo lunar cuanta con compuestos ricos en hierro y otras sustancias que podrían funcionar como catalizadores para fabricar oxigeno con luz solar y dióxido de carbono.
Redacción Ciencia, 5 may (EFE).- El suelo de la Luna contiene compuestos activos que pueden convertir el dióxido de carbono en oxígeno y combustibles, y ahora hay que estudiar si pueden usarse para facilitar la exploración del satélite, según un estudio que publica hoy Joule.
La investigación que firman científicos de la Universidad de Nanjing (China) se basa en las muestras de suelo lunar recogidas por la sonda Chang’e 5 y que trajo a la Tierra en diciembre de 2020.
El equipo descubrió que en las muestras hay compuestos ricos, entre ellas sustancias ricas en hierro y titatino, que podrían funcionar como catalizadores para fabricar oxigeno usando la luz solar y el dióxido de carbono.
Ahora, los científicos esperan diseñar un sistema que aproveche el suelo lunar y la radiación solar, los dos recursos más abundantes en la Luna.
El equipo propuso una estrategia de “fotosíntesis extraterrestre”, un sistema que usaría principalmente el suelo lunar para electrolizar el agua extraída de la Luna y convertirla en oxígeno e hidrógeno.
Además, el dióxido de carbono exhalado por los futuros habitantes del satélite se podría combinar con el hidrógeno procedente de la electrólisis del agua durante un proceso de hidrogenación catalizado por el suelo lunar.
Este es un proceso que produce hidrocarburos como el metano, que podría utilizarse como combustible, explica la publicación.
Según los investigadores, la estrategia no utiliza energía externa, sino la luz solar, para producir una serie de productos deseables, como agua, oxígeno y combustible, que podrían sustentar la vida en una base lunar.
El equipo está buscando una oportunidad para probar el sistema en el espacio, probablemente con las futuras misiones lunares tripuladas de China.
“Utilizamos recursos ambientales in situ para minimizar la carga útil de los cohetes, y nuestra estrategia ofrece un escenario para un entorno vital extraterrestre sostenible y asequible”, afirmó Yingdfang Yao, uno de los firmantes de la investigación.
Aunque la eficiencia catalítica del suelo lunar es menor que la de los catalizadores disponibles en la Tierra, el equipo está probando diferentes enfoques para mejorar el diseño, indicó Yao.
El científico destacó que si se quiere realizar una exploración a gran escala fuera de nuestro mundo, habrá que pensar en formas de reducir la carga útil, es decir, depender del menor número posible de suministros de la Tierra y utilizar en su lugar recursos extraterrestres.