Ciudad de México, 5 de mayo (SinEmbargo).– Organizaciones campesinas de México, Estados Unidos y países de Europa iniciaron este martes, en el marco de la Batalla de Puebla o (5 de Mayo celebration), la Acción Global por San Quintín, que busca hermanar las causas de los jornaleros además de “luchar” por que se garantice un trabajo digno y mejores condiciones de vida.
En una conferencia de prensa, los voceros del movimiento jornalero del Valle de San Quintín, Baja California, anunciaron que si el próximo 9 de mayo no se llega a un acuerdo con el gobierno y la industria, se llevará a cabo un boicot global el cual estará apoyado por organizaciones como la de César Chávez y por otros sindicatos en Washington y Florida, entre otros.
“A partir de hoy estaremos viendo si hay propuesta y no respuesta [por parte de la Secretaría de Gobernación, Secretaría del Trabajo y más] el próximo 8 de mayo. Este boicot contempla que ninguna persona consuma productos del Valle de San Quintín, porque cada producto lleva nuestras vidas. Antes de que [los consumidores] se lleven algo a su boca, pregunten qué salario estamos percibiendo, qué condiciones de vida tenemos los trabajadores”, dijo Fidel Sánchez Gabriel, uno de los voceros del movimiento.
Sánchez y Bonifacio Martínez acusaron que los tres ordenes de gobierno han actuado en cooperación con la agroindustria y acusaron actos de represión y violencia por parte de fuerzas del Estado.
“El 17 de marzo, cuando nos íbamos a sentar a una mesa de negociación nos recibieron a balazos”, narró Martínez.
Agregó que es hora que “los políticos y esos servidores públicos salgan de sus oficinas para recorrer el campo, caminar por el México que no conocen”.
Aseguraron que actualmente hay 14 jornaleros del valle de San Quintín presos en cárceles estatales acusados de robo y hay cinco órdenes de detención emitidas por autoridades federales en contra de los cinco voceros –incluyéndolos– del movimiento acusados de obstruir la vía pública.
Entre los aspectos principales de la lucha de los jornaleros de San Quintín están las prestaciones sociales, un contrato colectivo, alto al acoso sexual, mejores condiciones de vida, un salario mínimo de 200 –preferible de 300– pesos por día o un pago de 30 pesos por cubeta de fresas, 17 pesos por cubeta de mora y 8 pesos el bote de tomatillo.
“La mayoría de nuestros hermanos al estar trabajando en la pizca de la fresa, pueden tener una contracción en la columna vertebral, lastimarse los pulmones por respirar los químicos o, con las espinas de las moras, hasta con los tallos hay personas que han estado a punto de quedarse ciegas”, contó Sánchez hace unos meses.
En la #AcciónGlobal participará cantantes, actores, maestros, campesinos y en general la sociedad civil.
Finalmente los voceros adelantaron que esta acción no sólo es para apoyar su causa, puesto que se pretende apoyar y orientar las causas de otros jornaleros, como los de Ayala, Morelos, donde hace una semana estuvieron con sus “hermanos” cañeros, quienes, a comparación de los jornaleros de San Quintín que ganan 120 al día, ellos sufren “peores” condiciones de trabajo.