El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) intenta preparar un ejército de trolls, de cara a las elecciones del 7 de junio. El instituto político está por firmar un contrato con una empresa llamada Agavis Digital, que también tiene convenios con el Gobierno federal y que era prácticamente desconocida antes de 2012, año en el que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) recuperó la Presidencia del país.
Agavis Digital SA de CV es la misma empresa que en 2012 participó en el equipo de transición del entonces Presidente electo Enrique Peña Nieto, y que hoy suma al menos 40 contratos con distintas dependencias del Gobierno federal, que hoy encabeza el político mexiquense.
El contrato por celebrarse con el Verde, según documentos en poder de SinEmbargo, es por 3 millones 26 mil 800 pesos y se desglosa en tres conceptos: Twitter, Trending Tweets y Videos para Blog.
Este sitio digital posee una copia del convenio, así como del mecanismo que Agavis Digital le presenta al Partido Verde como estrategia. Y hay un elemento que no queda fuera: la búsqueda de trolls para criticar y atacar a los enemigos, y así apuntalar sus campañas en las redes sociales.
Ciudad de México, 5 de mayo (SinEmbargo).– Pese a las multas millonarias del Instituto Nacional Electoral (INE) y los más de 140 mil peticionarios que firmaron en la plataforma Change.org para que su registro le sea retirado, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) está determinado a continuar con su campaña mediática. La decisión beneficiará a un consorcio que de por sí ya cuenta con un crecimiento exponencial debido a la obtención de contratos del Gobierno Federal por sus servicios en redes sociales.
Ese relato, en el que los logros se acumulan, le corresponde a Agavis Digital SA de CV, la misma empresa que en 2012 participó en el equipo de transición del entonces Presidente electo, Enrique Peña Nieto, con el mantenimiento de las páginas http://www.enriquepenanieto.com y http://www.transicion2012.org, y por lo cual cobró 237 mil 250 pesos, de acuerdo con el contrato del fideicomiso formado para tal efecto, divulgado a través del Portal de Transparencia de la Transición, ese año.
Hoy, Agavis Digital se precia de una gama de unos cuarenta contratos con el Gobierno Federal de Peña Nieto, por los que ha ganado más de 40 millones de pesos (mdp) en menos de tres años, según aparece publicado en el Portal de Obligaciones y Transparencia (POT). El más alto es por 8. 295 millones de pesos y el más bajo tiene un monto de 49 mil pesos. Son números que perfilan a una empresa cuyos servicios no habían sido requeridos por las entidades gubernamentales antes de 2012, según se aprecia en el mismo portal.
Por el pastel de contratos gubernamentales para servicios en redes sociales, Agavis Digital no se vio en la necesidad de competir. En lo que va del Gobierno peñista ha obtenido 37 adjudicaciones directas de entidades como Petróleos Mexicanos (Pemex), el Sistema de Administración de Enajenación de Bienes (SAE) o la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), consta en el POT.
En su página web, la empresa se define a sí misma de esta forma: “Somos una agencia de medios online, especializada en estrategias de Performance por medio de Search Engine Marketing, Display, Social Media y consultoría en Web Analytics. Contamos con más de ocho años de experiencia en la industria de Internet, habiendo planeado, manejado y optimizado estrategias digitales en empresas como MercadoLibre, ProdigyMSN, Google y Yahoo!”. Luego, aparecen los perfiles de Aarón Fernández Medina y Santiago López Quevedo.
En el preámbulo de las elecciones a efectuarse el 7 de junio, el trabajo no le hará falta. Está por firmar un contrato para el Partido Verde Ecologista de México por 3 millones 26 mil 800 pesos, que se desglosa en tres conceptos: Twitter, Trending Tweets y Videos para Blog. Este sitio digital posee una copia del convenio, así como del mecanismo que Agavis Digital ofrece realizar a favor del PVEM. Y hay un elemento que no queda fuera de su estrategia: la búsqueda de trolls.
“Un Troll es una persona que critica y ataca de forma sistemática a otra u otras, ejerciendo e incluso abusando de su derecho a la expresión en los medios sociales. Por lo general son molestos ya que se esconden detrás de su propia cuenta para decir lo que no se atreven en persona”, definió Guillermo Perezbolde, vicepresidente de Marketing de la Asociación Mexicana de Internet en la revista Merca 2.0 en el artículo “Todo lo que necesitas saber sobre los bots en redes sociales”, publicado en 2012.
De acuerdo con un anexo del contrato, Agavis Digital se propone armar una granja de llamados “trolls” (así los llama), un ejército de cuentas listo para atravesar Twitter como campo de batalla en el que protegerá, pero también la emprenderá. Los días entre el 23 de mayo al 7 de junio de 2015, se presienten de competencia, ánimos encontrados y situaciones que acaso ahora son impredecibles. Son los días en que Agavis Digital trabajará para el PVEM, si el contrato es firmado.
SinEmbargo entrevistó a Aarón Fernández Medina, socio fundador de Agavis Digital sobre sus servicios y perfil de empresa.
–Según el Portal de Obligaciones y Transparencia (POT), Agavis Digital ha obtenido 41 contratos con entidades gubernamentales desde 2012, cuando tomó posesión la administración de Enrique Peña Nieto. De éstos, 37 resultaron de adjudicaciones directas, ¿es esto cierto y cómo logró la empresa esta posición en el mercado?
–Como habrás investigado acerca de Agavis, nuestro enfoque, al tener más de 12 años trabajando en la industria de Medios Digitales, es el performance marketing. Así como aplicamos metodologías orientadas a resultados y rendimientos de estrategias digitales para nuestros clientes de la Iniciativa Privada (El Palacio de Hierro, GNP Seguros, SegundaMano, American Express, CocaCola), lo mismo hacemos para las entidades de Gobierno con las que hemos tenido oportunidad de trabajar. Los resultados entregados a clientes de Gobierno son los que nos han permitido abrir puertas en tan competido mercado, también te cuento que muchos de los procedimientos han sido en concursos de invitación a tres, licitaciones, etcétera. hasta los propios medios como Google y Facebook están proactivamente incentivando a la sana competencia entre agencias digitales y tienen programas específicos para venta a Gobierno (de los cuales, participamos con otras empresas que se dedican a hacer lo mismo que nosotros).
–SinEmbargo cuenta con información de que Agavis Digital fue contratada por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) para realizar un trabajo en la red social Twitter en el preámbulo de las elecciones del próximo 7 de junio. ¿Qué código de ética tiene la empresa cuando brinda servicios a partidos políticos? ¿Hay algunos límites entre lo que debe y no debe hacerse en las redes sociales?
–El contrato que tenemos con el PVEM, es puramente relacionado con comprar, administrar y optimizar los espacios comerciales en Internet incluyendo Twitter Ads. Nosotros les apoyamos en escoger audiencias objetivo, los mensajes patrocinados (que en este caso han sido comunicados oficiales y propuestas de el Partido) a dichas audiciencias y en optimizar su inversión en esta plataforma. Son espacios que la gran mayoría de las marcas en México utiliza y Twitter ads, también forma parte de nuestro portafolio ofrecido a nuestros clientes de la Iniciativa Privada.
EL CONTRATO POR FIRMARSE
La información a la que tuvo acceso este sitio digital indica que del 23 de mayo al 7 de junio de 2015, Agavis Digital estaría comprometida a “crear, elaborar, trabajar y producir” en exclusiva para el PVEM, según la cláusula quinta que está marcada como “exclusividad”.
En la siguiente cláusula –la sexta– Agavis Digital “se constriñe” a crear, elaborar o producir tweets con la línea de contenido instruida por “la empresa”; es decir, lo que diga el PVEM. Elaborará 16 tweets de cada una de las siguientes cuentas (que) se mencionan y listan en un anexo del contrato. (Ver el anexo).
En una más, en la novena, Agavis Digital se obliga a mantener discreción y confidencialidad respecto a la información y datos a los que puede tener acceso, así como al tipo de resultados obtenido con motivo de sus servicios.
Agavis Digital se compromete a “seguir las instrucciones y no hacer ninguna censura de contenido y en la cantidad que lo solicite la empresa” y deberá entregar un informe el 6 de junio y otro el 7 de junio de 2015.
EL PVEM DESEA TWITTEAR
Con tal de hacer mercadotecnia, al PVEM ha mostrado poca preocupación por las llamadas de atención que lo colocan en la arena pública como un instituto que se contradice a sí mismo. En 2012, desestimó el extrañamiento que le envió el Partido Verde Europeo, que agrupa a 36 institutos políticos ecologistas, por la campaña radiofónica y televisiva que defendía la pena de muerte. Le señaló que sus mensajes contradecían por completo su esencia. Pero el Verde no respondió.
Al año siguiente, el partido del tucán estaba envuelto de nuevo en la polémica debido a su despliegue mercadotécnico. Las campañas de “si el IMSS no te da las medicinas, que el Gobierno te las pague” y “cuotas escolares” fueron sometidas al pleno del entonces Instituto Federal Electoral bajo sospecha de engaño y manipulación. Como ahora, en ese momento se planteó retirarle el registro. Pero el partido sobrevivió.
Lleno de vida en 2015, el PVEM se hizo de una hazaña histórica relacionada con su publicidad. Desplegó una campaña en radio, televisión, cine, espectaculares, tarjetas de descuento, lentes y papel para las tortillas. No hubo una sola a la que el INE no le impusiera una penalización monetaria o cuestionamiento. Pero no le importó. El del tucán acumuló multas al grado que debe pagar más de 80 millones de pesos; es decir, el 17.5 por ciento de la cantidad que recibirá de financiamiento público y el 81.25 por ciento de lo que tiene programado para gastos de campaña.
Creado en 1986 por el ex priista Jorge González Torres (hermano de Víctor, el Doctor Simi), el PVEM jamás se ha despegado de las tácticas de la mercadotecnia política. Sus reportes de las campañas electorales, así como las listas de proveedores presentadas ante el antiguo Instituto Federal Electoral (IFE) dan cuenta de un gasto multimillonario a una decena de agencias dedicadas al diseño estratégico de despliegues que han logrado posicionarlo en la memoria de los electores.
Ahora, aparenta que sumará a su plan mercadotécnico una granja de trolls. ¿Por qué? En 2012, la política modificó a la red social de los 140 caracteres. Segundos después de ganar el decisivo estado de Ohio, que le dio 174 votos electorales, Barack Obama publicó en la red social: “Esto pasó por ti. Gracias”. Luego, mandó otros dos tweets. Uno: “Estamos en esto juntos. Así es como hicimos campaña y es lo que somos, Gracias. –bo.” El otro fue una foto en la que abrazaba a su esposa, Michelle con la leyenda “Cuatro años más”. Según el propio Twitter, la reelección de Barack Obama fue el momento más tuiteado del día y, a la vez, el más tuiteado de la historia política de Estados Unidos.
José “Pepe” Flores, editor de tecnología en FayerWayer.com, comunicador especializado en derechos digitales, expone: “En México se entendió muy bien a Twitter. Se le identificó como una gran caja de resonancia. Y se aprendió a alterar su algoritmo, el cual tiene un amplio número de variables. Las agencias profesionalizadas diseñaron muy bien los mecanismos para posicionar o inhibir temas. Y la red social está consciente de ello, como lo está en cualquier otro país”.
El especialista explica: “Si un tema es potencialmente negativo, es posible ahogarlo en el mismo caos de la red social. Es una técnica. Estas agencias (las de comunicación que prestan servicios en redes sociales) se volvieron más estratégicas porque deben abortar esos temas antes de que crezca el número de personas que lo conoce. Los trolls buscan que los ‘trending topic’ (tendencias en Twitter) se queden inservibles”.
Al PVEM nada le cuesta adaptarse al medio. Es la conclusión en estos días de Alfredo Paredes Zamora, mercadólogo político, director de Capitol Consulting, que se dedica a elaborar campañas políticas tanto en México como en Estados Unidos. “En su historia contrató espacios en radio, televisión y cine. Pegó su logo en gorras, lentes y hasta en el papel de las tortillas. Ha demostrado que de estrategias, conoce. Hoy, cuando Twitter se ha convertido en la red social para hacer política lo puede tomar con tranquilidad como campo de batalla. Su troll estará al servicio de sus contenidos. Nada le hará daño. Ningún tema podrá afectarlo. El Verde ya está preparado”.
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En un correo, uno de los socios de la empresa se dirige al PVEM y le dice: “Estamos preparando el proceso interno de la campaña. Te mando un par de los pendientes que te debo para continuar con el guión”.
“1. Te adjunto TIMETABLE CAMPAÑA TENTATIVO. En este te pongo el definitivo de las cuentas y bloggers que van a operar la campaña.
En TWITTER la única que cambiamos es @ChumelTorres por @MauHCorona.
En YOUTUBE cambiamos a DeBryanShow y YosStop por clinicafutbol y somoschilangos por cuestiones estratégicas en cuanto a los requerimientos de las propuestas. Incluimos deporte y jóvenes que van a empezar a votar.
2. Te adjunto TIMETABLE EQUIPO PRO y EQUIPO CONTENCIÓN. Aquí separamos las cuentas que pueden servir de trolleo y mantenemos en el guión a las demás.
Los trolles que podemos separar y que mantendría la comunicación del guión son:
@UglyZorra
@PerraDementeVIP
@CHOCHOS
@DoiorDeHuevos
@Mr_EgooEstos últimos no llevan un guión preestablecido porque dependen de las situaciones y de las acciones de la oposición y de la red.
3. Te adjunto TROLLES. Con estas cuentas estamos blindados y podemos atacar a discreción. Son cuentas que se dedican exclusivamente a eso. Sería increíble poder contar con ellos para sumar fuerzas. Quedamos pendientes de tus opinión respecto a este tema.
Te adjunto MECANISMO TRENDING TOPIC. Aquí explicamos el paso a paso del desarrollo de los TT. Este punto hay que discutirlo un poco más profundamente para estar perfectamente bien alineados en la operación”.
• NOTA IMPORTANTE DE SINEMBARGO: La lista anterior NO FUE SELECCIONADA POR ESTE DIARIO DIGITAL. Es una lista de cuentas de Twitter que la empresa pretende BUSCAR para que operen a favor del Partido Verde. Las cuentas fueron agregadas en el correo electrónico enviado por AGAVIS DIGITAL a la dirección electrónica del partido, información a la cual SINEMBARGO tuvo acceso.
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“Las cosas han cambiado”, dice José “Pepe” Flores, el editor de tecnología en FayerWayer.com. En 2012, a propósito de la campaña presidencial en México, escribió el ensayo “El despilfarro electoral mexicano en las redes sociales”. Decía: “Las estrategias tomadas, como la creación de granjas de usuarios falsos, la manipulación de trending topics o la contratación de usuarios relevantes han lastimado tanto a la imagen de los partidos como a la percepción que se tiene de la plataforma … lo que sobrevive es el ruido, la paranoia, la desconfianza y la completa decepción”.
Tres años después, el mismo Pepe Flores expresa en entrevista: “Hay una diferencia entre 2012 y 2015 de las redes sociales. En estos años hubo un crecimiento de penetración de banda ancha y penetración móvil. Y entonces, las agencias que ofrecen servicios para desplegarse en Twitter se venden al mejor postor en un juego en el que están más identificados el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Verde; pero en el que también han participado otros como Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el Partido Acción Nacional (PAN)”.
No sólo habrá trolls que inhiban temas negativos. En el contrato que le presenta Agavis Digital al PVEM se adjunta un mecanismo para posicionar asuntos-tendencia o “trendig topics (TT)”. Es decir, al Verde le interesa tener ciertos asuntos en la red social. “Para posicionar un TT orgánico se necesitan seguir sistemáticamente una serie de pasos que activan la conversación dinámica entre el mensaje, los influencers y la audiencia”, se lee en el documento anexado al contrato.
Se trata del partido que atesora el récord de una sanción cada tres días entre el 15 de enero y el 20 de abril de 2015 impuesta por la autoridad electoral y el que con sus tácticas de mercadotecnia propició la exigencia de un grupo de firmantes del retiro de su registro.
