El 50 por ciento de los encuestados considera que es más conveniente para el país contar con contrapesos institucionales al Presidente; el 31 por ciento optó por que el Presidente concentre más poder político, y el 19 por ciento no sabe.
Ciudad de México, 5 de abril (SinEmbargo).- La aprobación del Presidente Andrés Manuel López Obrador descendió dos puntos porcentuales, al pasar del 63 al 61 por ciento en el mes de marzo, reveló una encuesta elaborada por El Financiero.
Desde julio pasado, la aprobación del mandatario se ubica en una franja de entre el 58 y el 64 por ciento, pese a la pandemia de la COVID-19.
Los datos presentados por El Financiero derivan de entrevistas realizadas a mil adultos a nivel nacional.
Del total, el 5 por ciento afirmó ya haber recibido al menos una dosis de la vacuna contra la COVID-19; el 16 por ciento informó que uno de sus familiares ya la tomó y el 3 por ciento detalló que tanto esa persona como otra de su hogar ya habían sido inmunizadas.
En la franja de las personas que ya recibieron la vacuna contra la COVID-19, la aprobación presidencial alcanzó el 67 por ciento; en aquellos que no han recibido alguna dosis, la aprobación presidencial se ubicó en el 59 por ciento.
El Financiero detalló que la diferencia entre ambos sectores parecía deberse al entusiasmo generado por la campaña de inmunización contra la COVID-19.
Sin embargo, hacia la segunda mitad de marzo, la opinión favorable sobre el manejo de la vacunación en México cayó del 48 al 43 por ciento.
En otros temas, el 50 por ciento de los encuestados considero que lo más conveniente para el país es contar con contrapesos institucionales al Presidente; el 31 por ciento optó por que el Presidente concentre más poder político, y el 19 por ciento no sabe.
El 54 por ciento se mostró de acuerdo en que los proyectos del Gobierno deben apegarse a la Constitución; el 30 por ciento optó por la opción de que la Constitución debe modificarse acorde al proyecto gubernamental y el 16 por ciento, no sabe.
Sobre el manejo económico, la aprobación al trabajo presidencial es mayormente desfavorable. El 44 por ciento está en contra de la forma en la que se ha manejado la economía del país; y el 28 por ciento a favor.
En seguridad pública, las posición positivas bajaron del 27 al 20 por ciento; y las negativas subieron del 56 al 61 por ciento. Este elemento es el de peor evaluación para el Gobierno federal.
