La activista y actriz mexicana Vanessa Bauche puso sobre la mesa el paro nacional de mujeres el próximo 9 de marzo mediante el colectivo Las Brujas del Mar; todo comenzó con una imagen editada desde un celular.
Por Édgar Ávila
Veracruz, México, 5 de marzo (EFE).– El colectivo Las Brujas del Mar impulsó en redes sociales el paro nacional de mujeres del 9 de marzo, al que ya se han adherido miles y busca ser "un llamado a la conciencia", dijo este jueves a Efe su portavoz Arussi Unda.
La actriz y activista mexicana Vanessa Bauche puso sobre la mesa el paro nacional de mujeres y su colectivo lanzó la convocatoria en redes sociales generando un gran impacto y logrando que, en las últimas semanas, se sumaran empresas y centros educativos.
"Es un llamado a la conciencia, porque hace falta mucha, pero tampoco puede quitársele méritos al conjunto de acciones que nos han llevado a este lugar (...) porque todas las manifestaciones previas nos están llevando a este sitio en el que estamos ahorita", afirma.
Su movimiento lleva el nombre de brujas, una imagen con la que estas feministas se relacionan porque eran mujeres que desde su autonomía o de sus conocimientos que no eran propios de mujeres eran perseguidas o asesinadas, afirma.
La fotógrafa, una diseñadora gráfica, una psicóloga y la publicista, quienes integran a la agrupación, jamás imaginaron que una imagen diseñada en un celular fuera a tener un impacto de tal nivel en México.
"Nunca pensé que iba a llegar a esta locura, yo hice la imagen en mi celular (móvil), pensé que iba a ser cualquier cosa y que sólo las feministas íbamos a parar", dice.
Recuerda que fue en una red nacional de mujeres, activistas y familiares víctimas de feminicidios, donde la actriz Vanessa Bauche "puso el tema sobre la mesa".
"Nosotros prestamos la plataforma", aclara Unda, quien considera que el papel de la mujer en el paro es confiar, por una vez, en las demás mujeres y unirse.
"Y el papel del hombre es cuestionarse mucho de qué manera ellos tal vez están cubriendo o reproduciendo violencia, porque todos creemos que es la crisis del feminicidio, pero el feminicidio es el fin de una cadena de violencias", alerta.
LA OLA DE FEMINICIDIOS CRECE
México vive una ola de violencia contra la mujer que se ha recrudecido y tan sólo en 2019 el país registró más de mil feminicidios -asesinatos por razón de género-, según los datos oficiales. En general, en el país 10 mujeres son asesinadas al día.
Para las Brujas del Mar, quienes en septiembre pasado se unieron a una protesta por la marea verde a favor del aborto, los feminicidios se han vuelto más crueles, despiadados, con más saña y más odio.
"Eso es lo que tiene a todas las mujeres en un estado permanente de miedo, porque cada caso que sale es más horrendo que el anterior", lamenta desde la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, uno de los bastiones electorales del partido político derechista Acción Nacional.
La activista afirma que tras la convocatoria las cosas han comenzado a cambiar y a sentirse el surgimiento del poder femenino "porque hemos recibido más denuncias que nunca y hemos visto fotos e historias de colegios donde las niñas están alzando la voz".
Desde su óptica, la violencia contra las mujeres tiene solución, pero será a largo plazo porque el machismo está muy arraigado.
"México siempre ha sido un país muy machista pero es porque es un país muy religioso también, hay muchas costumbres muy mexicanas que son las que mantienen este estado donde la mujer es vista como otra cosa y no como igual, pero sí se puede. Otros países lo han logrado porque nosotros no", dijo.
UN CAMBIO NECESARIO
Será necesaria, agrega, cambiar todo en la mentalidad de hombres y mujeres, una reprogramación completa de todo lo aprendido.
"Porque en el feminismo te desprogramas de todo lo que te enseñaron y te vuelves a educar y tendría que ser una reeducación colectiva y dejar todas estas costumbres y creencias a un lado, será muy difícil pero creo que si se puede", insiste.
Las Brujas del Mar fueron creadas como una comunidad de mujeres donde querían compartir libros, textos y sentimientos en los valores feminista, pero luego crecieron ante las quejas y denuncias por abusos.
"A mí, en lo personal, creo que tal vez sonará super exagerado, pero me salvó la vida, me ha vuelto una persona más mesurada, consciente y empática", subraya.
Cada una de las integrantes tiene su historia - dice-, como cada mujer en México tiene su historia y el feminismo les ha ayudado a sanar esas heridas que trae la violencia machista.
"Necesitamos las feministas un voto de confianza para generar espacios y brigadas de comunicación", considera.