Para la Unicef, el nuevo etiquetado debe contar con el apoyo de la población, a fin de acelerar el proceso de adaptación de los consumidores y de la industria.
Ciudad de México, 5 de febrero (SinEmbargo).- El etiquetado frontal para alimentos calóricos y bebidas no alcohólicas es uno de los mejores del mundo y podría ser utilizado como referencia para otros países, consideró el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
A través de un comunicado, el organismo internacional destacó la claridad, sencillez e información que el nuevo etiquetado ofrecerá a los consumidores mexicanos.
“El etiquetado recientemente aprobado por México contempla las mejores experiencias internacionales y la evidencia científica más actualizada y relevante, por lo que podría incluso convertirse en un ejemplo para otros países que atraviesan este proceso de lucha contra el sobrepeso y la obesidad”, señaló el representante de la Unicef en México, Christian Skoog.
Para la Unicef, el nuevo etiquetado debe contar con el apoyo de la población, a fin de acelerar el proceso de adaptación de los consumidores y de la industria.
“La aprobación de la modificación a la NOM 051 sobre el etiquetado de alimentos y bebidas ha sido un paso fundamental en la lucha contra el sobrepeso y obesidad en México”, estacó la Unicef.
Dijo que es responsabilidad de todos “impulsar esta eficaz acción en la lucha contra el sobrepeso y la obesidad y por la salud de la infancia en México”.
La Unicef reiteró su felicitación al Gobierno de México y a las secretarías de Economía y de Salud por el impulso en la aprobación de la NOM-051.
Calificó este proceso como “transparente y participativo”, ya que contó con la opinión de expertos e investigadores de salud pública, representantes de la sociedad civil, de la industria de alimentos y bebidas, y de organismos internacionales como la Organización Panamericana de la Salud y Unicef.
La Unicef pidió al Gobierno mexicano defender el derecho de la infancia y adolescencia a la salud, alimentación e información, tanto a nivel local como internacional.
“El proceso de revisión de la NOM 051 demostró un firme compromiso por la salud y el bienestar de todos los mexicanos, especialmente los niños, niñas y adolescentes. Ese compromiso, además de apoyar el derecho de la infancia y adolescencia a la salud, alimentación e información, permitirá su pleno desarrollo y su contribución futura al país. Mantengamos ese ejemplo de liderazgo ante el mundo”, concluyó Skoog.
LA EMERGENCIA MEXICANA
El organismo recordó que México vive una emergencia epidemiológica por sobrepeso y diabetes infantil y juvenil, ya que el 36.5 por ciento de los niños de 5 a 11 años, y el 38.4 por ciento de los de 12 a 19 años, sufren uno de los citados padecimientos.
El sobrepeso y la obesidad, puntualizó el organismo, conllevan al desarrollo de diabetes y enfermedades cardiovasculares y metabólicas, padecimientos que pueden afectar el comportamiento y ánimo de los infantes y adolescente.
El etiquetado mexicano derivado de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 051 poseerá sellos de advertencia en productos con excesivo contenido calórico, azúcar, sodio, grasas saturadas y grasas trans, de acuerdo a un perfil de nutrientes generado por la Organización Panamericana de Salud (OPS).
A la par se integrarán leyendas para advertir la presencia de cafeína y edulcorantes como ingredientes no recomendados por el consumo de infantes y “se condicionará el uso de personajes y dibujos dirigidos a la infancia, en los reductos con sellos“.
Sin embargo, representantes de cámaras empresariales e industriales han mostrado su rechazo a la nueva medida, al considerar que sólo generará confusión en los consumidores e impactará negativamente en los ingresos de la industria.
“Creemos que este etiquetado es un retroceso a lo que tenemos el día de hoy porque elimina la información relevante que tienen los consumidores, al día de hoy”, señaló el titular del el Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo (ConMéxico), Jaime Zabludovsky.
El representante empresarial calificó como “inútil” el nuevo etiquetado, ya que, dijo, no informa al consumidor al eliminar las cantidades de nutrientes que los productos poseen.
”Esta metodología está divorciada totalmente d ella ingesta de calorías diarios, mientras que el etiquetado que propusimos mantenía el tema de la ingesta recomendada para cuando agarres un pastelero, que representa 15 por ciento de azúcar, sabes que seis son tu consumo de azúcar”, ejemplificó Zabludovsky.
EL RESPALDO A LA NORMA
Organizaciones civiles que integran la Alianza por la Salud Alimentaria denunciaron que la industria de alimentos ultraprocesados en México tiene “secuestrado” el paladar de los niños, de las familias, y secuestra el derecho a decidir en libertad qué consumir por ello se opone al nuevo sistema de etiquetado, que contempla advertir sobre los excesos de sustancias dañinas en productos.
El director de El Poder del Consumidor, Alejandro Calvillo, aseguró que la industria de alimentos se opone por el temor de que sus ventas de reduzcan sin importarles que la reforma busca contrarrestar la epidemia de obesidad y diabetes que enfrenta México al ofrecer a las y los consumidores más información sobre los productos que consume.
En ese sentido se pronunció Julieta Ponce, directora del Centro de Orientación Alimentaria. “La industria de alimentos ultraprocesados secuestra el paladar de los niños, de todas la familias y secuestra el derecho a decidir en libertad”, expuso, y como ejemplo señaló que las alacenas y refrigeradores de las casa mexicanas están llenas de dichos productos que “ensucian el paisaje alimentario” y hacen que la niñez normalice su consumo.
Juan Martín Pérez, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia, llamó al poder Judicial y al Ejecutivo a no ceder a las presiones de la industria pues aseguró que la Ley de Etiquetado protege los derechos a la salud y la alimentación de la niñez; dijo que de no aplicarse los productos chatarras seguirán vendiéndose sin restricciones a esta población, por ejemplo, en las escuelas.
“Los empresarios mexicanos no tienen como prioridad la salud de sus consumidores, su prioridad es ver crecer sus ventas sin importar la vida de los niños y niñas. Estamos en un punto crucial donde el Gobierno debe mostrar que está priorizando la salud y el futuro de su población, porque, de no hacerlo, nuevamente la industria rapaz volverá a interponer sus intereses”, afirmó.
Previamente, la Alianza por la Salud Alimentaria alertó que las empresas han cabildeado con los gobiernos de Estados Unidos y Suiza para que estos países alertaran ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) sobre la modificación a la Ley General de Salud.
“Las empresas mueven a sus países para que se opongan a este tipo de políticas que pueden afectar sus intereses, pero no hay ninguna justificación porque la ley no sería discriminatoria ya que aplicaría de igual manera a los productos que se elaboran en México. Esto parece ser una respuesta de parte de la industria en México, el de acudir al Gobierno de Estados Unidos para que presione”, dijo Calvillo en entrevista con SinEmbargo.
-Con información de Montserrat Antúnez Estrada y Guadalupe Fuentes López.