Al menos 200 espacios laborales, tan sólo de residentes del municipio de Villa de Reyes, en San Luis Potosí, se vieron afectados por la cancelación de la planta de Ford, estimó Juan Gabriel Solís Ávalos, Presidente Municipal de ese ayuntamiento. Cientos de habitantes de la cabecera municipal y de comunidades limítrofes, se encontraban laborando durante la construcción del complejo industrial extranjero. Entre los trabajadores beneficiados había comerciantes informales, profesionistas y empresarios de proveeduría, esto, sin tomar en cuenta a otros empleados foráneos.
La automotriz contemplaba invertir mil 600 millones de dólares en su planta ubicada en el parque WTC2, en Laguna de San Vicente, sin embargo, a principios de enero canceló.
Ahora Ford se enfrenta con “su amigo” Trump, un saco de problemas que los ha obligado a repensar la relación.
ADEMÁS
Por Rubén Pacheco
Ciudad de México/San Luis, 5 de febrero (SinEmbargo/PulsoSLP).– La cancelación de la planta de Ford afectó a alrededor de doscientos espacios laborales tan sólo de residentes del municipio de Villa de Reyes, en San Luis Potosí, estimó Juan Gabriel Solís Ávalos, Presidente Municipal de ese ayuntamiento.
Ford Motor Company contemplaba invertir mil 600 millones de dólares en la planta automotriz ubicada el parque WTC2, en Laguna de San Vicente, sin embargo, a principios de enero canceló.
Solís Ávalos indicó que cientos de habitantes de la cabecera municipal y de comunidades limítrofes, se encontraban laborando durante la construcción del complejo industrial extranjero. Entre los trabajadores beneficiados, el Presidente municipal detalló que además de los trabajadores de la construcción, había comerciantes informales, profesionistas y empresarios de proveduría, esto, sin tomar a en cuenta a otros empleados foráneos, acotó.
Pese a la salida de la firma norteamericana, para el Alcalde dicha oportunidad de empleo no significa “que se nos acaba el mundo”, sin remedio.
“Sí nos afecta (la cancelación) porque era una oportunidad no solo del municipio, sino del estado y parte de la República Mexicana (…). Son decisiones de la mercadotecnia de Ford que se respeta. Nosotros como municipio estamos tranquilos (…) porque se les brindó lo que necesitaban”, comentó.
Ford canceló la planta en San Luis Potosí para agradar a Donald Trump. Pero ahora parece empezar a arrepentirse. De acuerdo con Bloomberg, pocos capitanes corporativos parecen haber cultivado al Presidente como Bill Ford. “Había sido un duro comienzo, con Trump explotando contra Ford Motor Co. por la construcción de automóviles en México. Pero Bill Ford, el presidente ejecutivo, siguió adelante, decidido a forjar una relación con el nuevo Presidente”.
Cuando Ford canceló una nueva planta en México, ganando las alabanzas de Trump y sugiriendo que su dura conversación sobre los empleos estaba funcionando, la amistad parecía sellada, de acuerdo con el medio especializado. Trump ahora llama a Bill Ford, de 59 años, “mi amigo”, y los dos hablan regularmente por teléfono sobre los impuestos, las monedas y el comercio.
“Pero la creación de una relación con Trump, de 70 años, puede ser una danza delicada. La relación se enfrentó a su última prueba cuando Trump emitió su orden ejecutiva el viernes pasado, prohibiendo a los inmigrantes de siete países mayoritariamente musulmanes. Después de un fin de semana de llamadas telefónicas y correos electrónicos entre Ford y el presidente ejecutivo Mark Fields, los dos ejecutivos se negaron a prestar el apoyo de la compañía a una política que muchos consideraban una prohibición musulmana, a pesar de la insistencia de Trump”, narró Bloomberg.
El bisabuelo de la compañía Bill Ford se fundó en Dearborn, Michigan, conocida como la “capital musulmana de Estados Unidos”, con aproximadamente un tercio de su población de ascendencia árabe. Muchos trabajan para Ford.
“El respeto por todas las personas es un valor fundamental de Ford Motor Co., y estamos orgullosos de la rica diversidad de nuestra compañía aquí en casa y en todo el mundo”, dijo la compañía en un comunicado atribuido a Bill Ford y Fields, de 56 años. “Por eso no apoyamos esta política ni ninguna otra que vaya en contra de nuestros valores como empresa”.
Hasta ahora, Trump no ha atacado a Ford, como lo había hecho durante toda su campaña, y no está claro si la declaración de Ford pondrá en peligro su relación con Trump.
En su editorial de este domingo, el diario The New York Times resaltó la intransigencia de Trump para con México, y puso como ejemplo la determinación que el Presidente de Estados Unidos tiene de construir un muro en la frontera sur del país, cuyo financiamiento debe ser sufragado por los mexicanos.
En el texto titulado “La variada diplomacia de insultos de Trump”, el Times refirió que México se convirtió en el saco de boxeo preferido de Trump sin que la Casa Blanca haya hecho algo para aliviar la tensión entre ambos países. “Así comenzó, muy predecible con México. Trump hizo del vecino del sur y el tercer socio comercial de Estados Unidos, su principal bolsa de boxeo”.
“Mientras que el Presidente Enrique Pena Nieto se ha enfrentado con una ejemplar mesura al diluvio de insultos y provocaciones, los funcionarios de la Casa Blanca no ha hecho nada para contener la tensión [entre los dos países]”, señala el influyente diario estadounidense.
ADEMÁS
En enero pasado, Manuel Lozano Nieto, titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) de Gobierno del estado de San Luis Potosí, informó que los 58 trabajadores que laboraban para la trasnacional Ford ya fueron liquidados.
Según indicó el funcionario, desde hace dos semanas estuvo en territorio potosino el director general de Recursos Humanos de Ford, quien cubrió las liquidaciones de todos los empleados que tenía en capacitación.
Lozano Nieto notificó que algunos de las 58 personas ya laboran en otras compañías, esto, por las competencias profesionales que adquirieron en la capacitación para formar parte de la firma automotriz.
“Les dieron lo que por ley les correspondía, incluso entiendo que hasta les dieron un poco más. Son trabajadores que traen una capacidad muy importante, que fueron electos en un proceso de selección de personal muy estricto”, concluyó el funcionario.
Según el motor de búsqueda Indeed, con datos al 20 de diciembre de 2016, Ford Motor Company paga en México una media de salarios mensuales que van de los 4 mil 558 para recepcionistas hasta 25 mil 558 para ingenieros de calidad.
De acuerdo al convenio firmado con Ford, el gobierno del estado sólo podrá reclamar -ahora que se canceló el proyecto de la trasnacional estadounidense- el “monto total de los gastos desembolsados y debidamente documentados de ‘EL ESTADO’ y ‘EL MUNICIPIO’ que estén contemplados expresamente en el presente Convenio”.
Aunque en la cláusula “Décima Sexta. Terminación Anticipada”, el convenio prevé que en caso de que sea la empresa quien lo incumpla pague “todos los daños y perjuicios causados”, enseguida impone un límite para éstos.
En el punto 1 de esa cláusula, establece que Ford podrá dar por terminado el convenio, “previo a que inicie la construcción y desarrollo de ‘EL PROYECTO’, sin expresión de causa, dando aviso por escrito a ‘EL ESTADO’ cuando menos con 30 (treinta) días naturales de anticipación a la fecha que se señale para la terminación”.
Si fuera ese el caso, la empresa debe transferir al gobierno la propiedad de los terrenos donados, “incluyendo todas sus mejoras”, y reembolsarle los gastos debidamente documentados pagados por el estado “a la fecha en que se dio el aviso de terminación, incluyendo gastos de terminación de contratos con terceros incurridos y desembolsados” relacionados con el proyecto.
En el punto 3 de esa misma cláusula se advierte que si la empresa incumple con el convenio, pagará todos los daños y perjuicios causados, pero enseguida se establece una condicionante:
“Sin embargo, la responsabilidad total de ‘LA EMPRESA’ bajo el presente Convenio no excederá del monto total de los gastos desembolsados y debidamente documentados de ‘EL ESTADO’ y ‘EL MUNICIPIO’ que estén contemplados expresamente en el presente Convenio (incluyendo gastos de terminación de contratos con terceros incurridos y desembolsados por ‘EL ESTADO’ y ‘EL MUNICIPIO’)”.
El monto que el estado potosino puede reclamar a la Ford dista mucho de lo que Gustavo Puente Orozco, titular de la Secretaría de Desarrollo Económico, aseguró que sería la inversión por parte del Gobierno estatal, la que fijó en mil 27 millones de pesos.
Si se toma en cuenta que se entregó a la Ford un terreno de proporciones similares al que se entregó a la BMW, cuyo costo fue de 30 millones de dólares según se reporta en el convenio, el valor del predio para involucrado debió ser similar. En el caso de la preparación del terreno, el costo señalado para el caso de la BMW fue de 972 millones 274 mil 423 pesos.
Se trata de dos conceptos por los que los apoyos proporcionados a Ford ya superan en egreso para el Gobierno estatal los mil 27 millones de pesos que aseguran haber invertido. Si se considera el resto de los apoyos, ocultos al mantener bajo reserva los anexos del convenio, la cifra es mucho mayor que la inversión que las autoridades reconocen públicamente.
Desde que se conoció la noticia sobre la instalación de Ford en San Luis Potosí, Carreras López optó por informar al mínimo de los tratos con la armadora estadounidense. Hoy que la empresa ha cancelado el proyecto, poco puede esperarse en cuanto a la transparencia del Gobierno estatal para que informen con claridad sobre los montos aplicados que deben ser recuperados, dada la sumisión reflejada en el convenio.
A diferencia de General Motors y BMW, la Ford comienza a representar para el Gobierno de Carreras López un fracaso en el que la sumisión no será disimulada con la entrada en operaciones de la planta, sino que será el principal motivo por el que buscarán encubrir las inversiones inútiles con el manto de la opacidad.