La cinta ganadora de una beca del Tribeca Film Institute y protagonizada por la actriz mexicana, está disponible en plataformas de streaming bajo renta como Apple TV.
Ciudad de México, 4 de noviembre (SinEmbargo).– En una zona boscosa de Texas, cerca de la frontera con México, viven en una cabaña una madre (Teresa/Adriana Barraza) y su hija (Ester/Camila Mendes). Ahí trabajan alquilando algunas de las habitaciones deseando ahorrar lo suficiente para buscar una nueva vida lejos de ahí. La “paz” del lugar se ve interrumpida cuando dos huéspedes indeseados llegan, y entonces oscuros secretos comienzan a surgir.
Ésta es la sinopsis inicial de Coyote Like, la ópera primera de la cineasta mexicana Sara Seligman, que inspiró su historia en un hecho real.
“Cuando estuve en mi curso de dirección de cine teníamos que escribir un cortometraje para nuestra tesis y yo escribí uno acerca de la relación de la madre e hija específicamente inspirado en un artículo de periódico de una madre en Francia, durante la Primera Guerra Mundial donde se dedicaban a una vida criminal. A mí me pareció muy interesante, y yo quería hacer algo en lo que podría meterme en la psicología de las relaciones de madres e hijos, y cómo explorar todas las situaciones como de manipulación, dependencia en el momento en que tienes que separarte de tus padres para tomar tus propias decisiones obviamente en esta peluca lo puse en una situación muy extrema”, cuenta Sara Seligman en entrevista con SinEmbargo.
Teresa es una madre que busca mantener a su hija Ester lo más lejos de todo. Ambas viven en una especie de isla en la sociedad donde sólo ven por ellas mismas con la ayuda de Dirk, un empleado que hace el trabajo sucio por ellas cuando lo necesitan.
Conforme avanza la cinta, la relación medre-hija se oscurece más. El control y manipulación que ejerce Teresa con su hija empieza a desbordarse.
“Escribimos lo que conocemos y obviamente no es difícil porque la figura materna en Latinoamérica es una figura que todos conocemos.[…] La figura materna tiene su lado obviamente positivo y hermoso, pero también puede tener un lado muy tóxico y negativo en donde se pone esta presión sobre el personaje materno de Teresa donde las mamás tienen obligaciones de sacrificio para sus hijos que va más allá pero también les permiten utilizar esas obligaciones para manipular a sus hijos, para exigir de sus hijos, es una cuestión muy tóxica y complicada que me pareció muy interesante y yo me quería dar esta oportunidad de analizarla a la hora de escribir los personajes. Aunque obviamente me imagino que la mayor parte de la gente no se va a identificar precisamente en estos extremos, creo que se pueden identificaren en el proceso de esta relación de madre e hija”.
UN CRUCE DE CAMINOS
La dinámica de trabajo de Ester y su madre se ve interrumpida una noche que un auto extraño se estaciona frente a la cabaña y de él descienden dos hombres, uno de ellos herido, a los que ahora se ven obligadas a ayudar.
Pero el cruce de caminos de estos personajes empezará a develar más secretos. La cabaña no es sólo un alquiler para huéspedes.
Sara Seligman volvió a tomar elementos reales, como el paso del crimen organizado en la zona, para darle sentido a su historia. El Lago Falcón, ubicado al sureste de Laredo, Texas, y lo que sucede ahí fue un punto clave para contar su thriller.
“Los cárteles tienen como mucho control ahí, mucha gente desaparece, lo utilizan para tráfico de dogas y tráfico de gente. Encontré un artículo en el que se hablaba de una pareja americana que fue a pescar y la esposa regreso sin el marido comentando que él había sido asesinado por narcos y ella logró escaparse milagrosamente, pero había muchas preguntas: ¿cómo logró ella escarparse sin ninguna herida, sin ningún problema? Eran como muchas cuestiones sin respuesta, pero tanto como policía mexicana, como la policía americana no podían hacer una investigación completa porque el cartel tiene el control de esa zona, entonces en eso se quedó, ya no hubo más respuesta. Pensé entonces que ese era lugar perfecto para que mis personajes.La película no se trata de narcotráfico ni de migrantes ni la de la frontera, pero son las circunstancias diarias que quizás los llevan a tomar unas de las decisiones que toman”.
UN PAPEL HECHO PARA BARRAZA
La actriz toluqueña Adriana Barraza junto a Camila Mendes son las estrellas de la cinta. Sara Seligman desde que escribió el cortometraje, que después se convertiría en su ópera prima, nunca vio a nadie más para el papel y luchó para que la actriz nominada al Oscar aceptara.
“En el caso de Adriana Barraza siempre me lo imaginé desde que escribí el cortometraje en 2007. En la clase nos pidieron elegir a un actor, sin importar su nivel de fama, quién sería, para mí era Adriana Barraza, no había nadie más en mente. No en el sentido de que ella tuviera algo que ver con el personaje, pero en el sentido de que quería escribir un personaje que actoralmente fuera interesante para ella y esperaba que al hacerlo con eso la pudiese convencer de ser parte del proyecto, porque yo no soy una directora establecida, es mi primer largometraje, y el presupuesto iba a hacer pequeño, yo sabía que no iba a ser ni mi nombre ni el dinero, tenía que ser el personaje lo que verdaderamente le llama la atención. Entonces sí lo escribí al 100 por ciento con ella en mente y todavía no me la creo”.
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Coyote Like, ganadora de una beca del Tribeca Film Institute y del Film Independent, está disponible en plataformas de streaming bajo renta como Apple TV.