Maestros, burócratas, taxistas y hasta los policías que custodian el Palacio de Gobierno de Veracruz, desde donde Javier Duarte despachó casi seis años antes de que se diera a la fuga por la orden de aprehensión, reclaman adeudos millonarios. Y mientras la sociedad veracruzana se moviliza, la prensa nacional e internacional saca a relucir hoy las lujosas propiedades que mediante prestanombres adquirió Duarte en Florida y Texas: atracadero de yates, ascensor, piscina climatizada, cocina al aire libre, acabados en mármol, cancha de baloncesto, amplios jardines y palmeras, son algunos de las características de los inmuebles presuntamente comprados con el dinero de las arcas del estado.
Por Ignacio Carvajal
Ciudad de México, 4 de noviembre (SinEmbargo).– Traídos por los aires del Sotavento, de las diversas regiones de Veracruz, voces de inconformes, lastimados y marginados, llegaron hasta la capital para sumarse al movimiento de reclamos que comenzó desde hace una semana, con la rebelión de 14 alcaldes del partido de la Revolución Democrática (PRD), a los que a su vez se sumaron otros del Acción Nacional (PAN), y que decidieron tomar el Palacio de Gobierno, algo nunca antes visto en la historia inmediata.
La Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), tomada por maestros inconformes, que lo mismo se hicieron de las casetas de varios puntos del estado y de los accesos a Xalapa. La Secretaría de Protección Civil, cerrada por falta de pago de la renta del inmueble ubicado sobre Circuito Presidentes; el palacio general de gobierno, sitiado por alcaldes que reclaman sus recursos; la Plaza Lerdo/Regina, tapizada del rojo y blanco de Antorcha Campesina, cuyos militantes se turnan los micrófonos para lanzar consignas; la Secretaría de Finanzas, Tránsito del estado, en la misma circunstancia, bajo asedio de inconformes. En toda la entidad cientos de escuelas tomadas por los catedráticos.
Ya hasta deportistas paralímpicos a quienes Carlos Sosa Lagunes, ex director del Instituto Veracruzano del Deporte (IVD), no les pagó sus becas ni estímulos, como pudieron, arribaron a Xalapa para buscar ser escuchados.
Así, una de las escenas más dramáticas del día, se vio frente a Palacio de Gobierno, cuando atleta paralímpico, sin piernas, se bajó de su silla de ruedas para deporte adaptado, en medio de un aguacero xalapeño, y se arrastró para lanzarse en medio de la avenida y bloquear, a su manera, y con sus posibilidades, el paso de vehículos. Lejos de molestarse, los conductores tocaron el claxon en señal de aprobación; otros aplaudieron.
Al notar esta acción, algunos ediles y sus seguidores que se guarecían de la tormenta bajo los arcos del inmueble de gobierno, desafiaron a la lluvia y se empaparon en un acto de dignidad y reconocimiento, y es que en Veracruz, se estima, hay unos 800 mil habitantes con algún tipo de discapacidad. Los deportistas paralímpicos hoy hablaron en Xalapa en nombre de esos miles de ciudadanos para quienes no hubo una política pública para atenderlos y ayudarles a encontrar el bienestar.
Incluso, trabajadores disidentes de Sindicato de Trabajadores de Tubos de Acero de México, que pelean contra el cacicazgo de Pascual Lagunes Ochoa, acababan de llegar a Xalapa y se sumaron a esta protesta de manera espontánea.
“Venimos a denunciar los actos de corrupción de Pascual Lagunes, que no quiere dejar el poder en el sindicato, y por eso ha corrido en los últimos meses a unos 400 empleados que nos apoyan”, dijo Enrique Ruiz Saavedra, líder de la corriente Democracia con Trasparencia Obrera.
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FLAVINO, EN EL AGUA
Y mientras esto pasaba en el centro, el Gobernador interino, Flavino Ríos Alvarado, se echaba unos tragos en su natal Minatitlán. Esa era la información llegada al cuarto de guerra de los alcaldes rebeldes al momento en que todas las protestas causaron estragos en el tráfico en Xalapa.
El Gobernador interino con el periodo más corto en ocupar el Ejecutivo, no ha sido capaz de solventar ninguno de los problemas más evidentes heredados por su ex jefe, Javier Duarte de Ochoa.
A maestros de distintos niveles que cobran en el estado, se les debe poco más de 10 mil millones de pesos en prestaciones y salarios, y por ello hoy tomaron siete puntos de la capital para bloquear y colocar mantas con consignas contra la administración de Javier Duarte de Ochoa, prófugo de la justicia.
NI A LOS POLICIAS LES PAGÓ
Y mientras en su noticiero de la mañana de ayer, Carlos Loret daba a conocer el último escándalo de Duarte de Ochoa, la compra de propiedades por parte de sus familiares en Europa, maestros y maestras veracruzanas jalaban cuerdas, palos, mecates para colgar, como en un tendero, cartulinas con reclamos al Ejecutivo y contra Flavino Ríos Alvarado, a quien universalmente en Xalapa ya le conocen como “el cómplice”.
A esa misma hora, integrantes de Antorcha Campesina, organización aliada en otros momentos al Partido de la Revolución Institucional (PRI), montaban una gran loma para protegerse, colocaban varias cargas de leña de espino y una estufa, café y atole.
¿Y en donde está Flavino Ríos Alvarado? es la pregunta en el aire entre los campesinos venidos de la Huatesca veracruzana, hasta los alcaldes amotinados.
El Gobernador interino, ni si quiera ha mandado personeros para prometer, conciliar o buscar que las protestas sean lo menos negativas para los xalapeños.
Frente a la SEV, por ejemplo, una pareja vio en el bloqueo una oportunidad de ganarse unas monedas, pues él, con una pala, sacó tierra de alrededor de una planta en el camellón de la autopista Veracruz-Xalapa, horadó la mata, y lanzó la tierra, en montículos, para formar una especie de “paso” entre el carril de norte a sur y darle, por una cooperación, facilidades a los conductores para huir del caos.
Los mentores que bloquearon la pista, al mismo tiempo se plantaron frente a la SEV y evitaron el paso de funcionarios a la dependencia con alto número de señalamientos de daño patrimonial por el ORFIS y la ASF; en su última revisión, el Congreso Local pide revisar la nómina para buscar aviadores que habrían cobrado unos 8 mil millones de pesos en 2015, según la Cuenta Pública.
En Tránsito del estado taxistas de distintos destinos se plantaron en huelga de hambre, “desde hoy nos divorciamos del PRI”, declaró el líder del movimiento de ruleteros reclamando concesiones pagadas, pero no entregadas por la administración duartista.
Y este día, también como una especie de señal de las alturas, un buen tramo de pavimento, en la construcción de un colector en la colonia, colapsó después de las intensas lluvias que se han dejado sentir igual de intensas que los reclamos de los sectores lastimados.
Hasta el cierre de este reporte, el gobierno de Veracruz ya había emitido un informe anunciando haber pagado recursos pendientes al magisterio, sin embargo, los mentores se mantenían en pie de lucha, y sin regresar a las aulas.
“Los vamos a apoyar, los estamos apoyando en todo”, dice un elemento de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) encargado de la vigilancia del palacio quien confiesa: “Duarte se fue del gobierno sin pagarme dos meses de sueldo, y peligra mi jubilación, lo sé, como la de muchos compañeros, por eso me uní al movimiento de los alcaldes y al de los maestros”.
Como él, cuenta desde la fuente en Palacio, hay cientos de oficiales a quienes no se ha pagado o con pagos pendientes y que ya están apoyando al movimiento de los ediles, y por tanto, al Yunismo, “cómo es posible que ni a los de casa, a los que lo cuidábamos, no nos pagara, esto es una cochinada y no es justo”.
No sólo los vigilantes se han “volteado” al gobierno, otros empleados, como secretarias y encargados de distintas áreas operativas en el palacio se han agregado a la protesta, y muchos, andan en las manifestaciones de maestros.
PALACIO-HOTEL
Ni en sus peores días como gobernante, Fidel Herrera Beltrán se vio en un escándalo como el dejado por su sucesor, Javier Duarte de Ochoa, menos, jamás, la idea de que el palacio de gobierno fuera tomado por los opositores. Alguna vez, cuando eran panistas, Alejandro Vázquez Cuevas, El Pipo, y Manuel Espino, ex dirigente del PAN nacional del PAN, irrumpieron de manera violenta en el palacio, lanzando golpes y amenazas para encarar a Fidel Herrera Beltrán, y en el camino a la oficina, se toparon a varios priista que descontaron a trompadas, pero todo quedó en gritos y aspavientos del par de políticos.
Alguna vez, recuerdan burócratas, lanzaron bombas molotov contra las paredes, algunos más pitaron mentadas, etcétera, más no una toma que ahora hace lucir al palacio como un hotel.
Los presidentes atrincherados traen, como mínimo, cada uno, 20 personas invitadas con sus gastos pagados de sus municipios, éstos a su vez deben pasar la noche en colchonetas tirados en el suelo y tapados con sarapes donados por diputados de la oposición. Los invitados, llegan por la noche, o a medianoche, y a las seis de la mañana ya están de pie realizando labores de limpieza y otros preparando el desayuno, el café, el pan o la fruta. Después de comer, se les mira salir, en montones, al parque Juárez, y perderse entre la multitud de la ciudad. Así pasan la horas y el día matando el tiempo, paseando por las calles de Xalapa, en las plazas, en el cine, realizando compras, para cuando cae el sol, de nuevo, se les mira ingresar al inmueble en busca de la cena y cobijo.
Son ganaderos, campesinos, trabajadores municipales, o simples simpatizantes del PAN o del PRD que vinieron a apoyar la toma, y de paso, pasear en la capital que arde en llamas ante los efectos de una deuda superior los 100 mil millones de pesos, numerosas violaciones a los derechos humanos, levantados, desaparecidos, secuestrados asesinados, madreados, despojados y víctimas de la larga y negra noche del duartismo.
Y SIGUEN APARECIENDO PROPIEDADES
El diario Reforma y El País publican información sobre las mansiones que Duarte adquirió en Texas y en Florida posiblemente con las arcas del Gobierno de Veracruz. En ella detallan los lujos de las propiedades del ahora prófugo Gobernador con licencia.
De acuerdo con el diario mexicano, Javier Duarte compró una residencia n Miami, Florida, hace dos años, la cual está valuada en 8 millones de dólares.
Según el medio, a través de uno de sus prestanombres, el mandatario adquirió la mansión ubicada “en 277 Marinero Court en Coral Gables, en exclusiva zona Cocoplum” e invirtió dos millones de dólares en mejoras.
La propiedad de dos niveles tiene acceso a un atracadero de yates, ascensor, piscina climatizada, cocina al aire libre para el verano, acabados en mármol, cancha de baloncesto, siete dormitorios, nueve baños completos, cocheras con tres accesos y está rodeada de amplios jardines y palmeras.
A su vez, el diario español ingresó a la propiedad publica un reportaje sobre un inmueble presuntamente propiedad de Duarte en Woodlands, Houston, “ubicada en el número 119 de Simon Lake Lane, en uno de los últimos desarrollos de la zona y una de las urbanizaciones más exclusivas”.
“Apenas una docena de casas en dos calles en medio del bosque. La propiedad, valorada en 2,5 millones de dólares, está a medio construir y Duarte la ha dejado sin pagar”, detalla el texto firmado por Pablo Ximénez de Sandoval.
El reportaje titulado “Así pensaba retirarse Javier Duarte en Houston” señala que “la propiedad que sirve de modelo a la urbanización es una espectacular mansión con mármoles, dos salones de televisión, cuatro habitaciones todas con vestidor y baño propios, bodega y un patio con una fuente. La vivienda de Duarte se estaba construyendo a semejanza de esta. Los empleados mexicanos llevan desde enero trabajando en la casa y esta semana le estaban poniendo el jardín”.
Además visitó la casa que está a nombre de una cuñada del mandatario expulsado de su partido gobernador y que está valorada en 720 mil dólares, según El Financiero.
Según, El País ahí había estacionados el miércoles pasados dos coches todoterreno y una moto.
“La casa está terminada y habitada, pero en la zona no sabían decir si por familiares de Duarte o inquilinos”, apunta el medio español.