El ensayo de armas de Corea del Norte se realizó en medio de las tensiones entre el país liderado por Kim Jong-Un y su vecino sureño, cuyo Presidente recién entrante ha demostrado cierta hostilidad diplomática con Pyongyang.
Por Hyung-Jin Kim y Kim Tong Hyung
SEÚL, Corea del Sur, 4 de mayo (AP).— Corea del Norte lanzó el miércoles un misil balístico hacia sus aguas orientales, según dijeron funcionarios surcoreanos y japoneses, días después de que el líder norcoreano, Kim Jong-Un, prometiera reforzar su arsenal nuclear “lo más rápido posible” y amenazara con utilizarlo contra sus rivales.
El lanzamiento, el 14vo ensayo armamentístico del año, también llegó seis días antes de que el nuevo Presidente conservador de Corea del Sur asumiera el cargo para su mandato único de cinco años.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur señaló que el proyectil se había lanzado desde la región de la capital norcoreana y hacia sus aguas territoriales al este. El ejército surcoreano vigilaba si se producían más lanzamientos, añadió.
Por su parte, el Ministerio japonés de Defensa dijo que Corea del Norte había lanzado un posible misil balístico, sin dar más detalles. La Guardia Costera japonesa instó a los barcos que navegaran por aguas japonesas a mantenerse alejados de cualquier posible fragmento.
El Gobierno japonés activó un equipo de trabajo para abordar el lanzamiento y señaló que el Primer Ministro, Fumio Kishida, que está en Roma para reunirse con autoridades italianas, había dado órdenes de que se ultimasen preparativos para caso de emergencia y se protegiera a la población, así como a barcos y aeronaves en Japón.
Los expertos señalan que la gran cantidad de ensayos armamentísticos de Corea del Norte este año, por encima de lo habitual, refleja su objetivo doble de desarrollar sus programas de misiles y presionar a Washington por la congelación de las negociaciones nucleares.
Se cree que Kim aspira a utilizar su arsenal ampliado para obtener reconocimiento internacional para Corea del Norte, lo que cree que ayudará a presionar a Estados Unidos para que relaje las sanciones económicas internacionales sobre su país.
Uno de los misiles norcoreanos probados hace poco era un misil balístico intercontinental capaz de llegar a todo el territorio continental estadounidenses. Ese lanzamiento rompió la moratoria autoimpuesta en 2018 por Kim sobre las pruebas de grandes armas.
También hay indicios de que el Norte prepara una prueba nuclear en su remota instalación de ensayos en el nordeste del país. Si ocurre, la explosión de prueba de una bomba atómica sería la séptima que hace Corea del Norte y la primera desde 2017.
Kim Jong Un presentó la semana pasada sus misiles más potentes durante un enorme desfile militar en la capital, Pyongyang, donde prometió desarrollar su arsenal “lo más rápido posible” y advirtió que utilizaría armas nucleares de forma preventiva si veía amenazados sus intereses nacionales.