La mina de Tizapa está en operación desde 1994, según informa Industrias Peñoles en su página web, donde detalla que es propietaria del 51 por ciento, mientras que Dowa Mining tiene el 39 por ciento y Sumitomo Corporation el 11 restante. Según la misma información, Tizapa se encuentra entre las cuatro minas de zinc más importantes del país.
Ciudad de México, 4 de abril (SinEmbargo).– Un conflicto entre el líder Napoleón Gómez Urrutia e Industria Peñoles, de la familia Baillères, está detrás del llamado que hizo el Gobierno de Estados Unidos a México para investigar a Grupo Peñoles por la presunta violación de los derechos a la libertad sindical y negociación colectiva de los trabajadores en la mina Tizapa, ubicada en Zacazonapan, Estado de México.
Hace exactamente un mes, el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSSRM), que encabeza el Senador Gómez Urrutia, presentó la queja número 22 bajo el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para que el Gobierno de EU analice el caso por un supuesto bloqueo a su sindicato. De momento, EU ha suspendido la liquidación de aranceles a bienes provenientes de esa mina, la cual se especializa en plomo, zinc, cobre y otros materiales.
El Sindicato Minero que encabeza Gómez Urrutia argumenta que Grupo Peñoles, de los Baillères, cometió actos de interferencia del empleador en asuntos sindicales, al despedir a varios trabajadores en represalia por su actividad sindical y demostrar favoritismo hacia el Sindicato Minero Metalúrgico (FRENTE), cuyo líder Carlos Pavón Campos, es señalado como una imposición de Felipe Calderón Hinojosa.
Fue en enero pasado, cuando el Sindicato de Napoleón Gómez Urrutia obtuvo la titularidad del contrato colectivo de trabajadores en la mina Tizapa, luego de que un Tribunal Federal reconociera el recuento realizado en marzo de 2023 en el que la mayoría de los mineros votaron en favor del gremio que encabeza Napoleón Gómez Urrutia.
La mina de Tizapa está en operación desde 1994, según informa Industrias Peñoles en su página web, donde detalla que es propietaria del 51 por ciento mina, mientras que Dowa Mining tiene el 39 por ciento y Sumitomo Corporation el 11 restante. Según la misma información, Tizapa se encuentra entre las cuatro minas de zinc más importantes del país.
En noviembre de 2012, esta mina fue escenario de una explosión en la que murieron tres trabajadores, y otras tres quedaron heridas. En ese momento, el Sindicato Minero Mexicano calificó el accidente como un homicidio industrial, “debido a la negligencia criminal e insensibilidad social de la empresa, filial del Grupo Peñoles”. En ese entonces se habló de “continuas denuncias de los trabajadores que previamente hicieron al sindicato minero, lo que evidencia las pocas condiciones de seguridad y protección a la vida de los trabajadores”.
A la par, hay un historial entre Napoleón Gómez Urrutia e Industria Peñoles.
Por ejemplo, en agosto de 2020, Napoleón Gómez Urrutia celebró el “fallo histórico para la justicia” por el laudo que le ganó a Grupo Peñoles por despido injustificado, por lo cual la empresa debía pagarle un millón de pesos de salarios caídos y prestaciones por 12 años y 8 meses que laboró para Minera Mexicana La Ciénaga.
“Finalmente, después de un juicio de más de doce años, obtuvimos un laudo favorable en contra de la empresa Grupo Peñoles, de Alberto Bailleres. Una situación en la que, en el año 2008, a partir del 1 de enero, la empresa me despidió a mí como secretario general, yo trabajaba para la empresa y fue un despido injustificado”, sostuvo en ese entonces conferencia de prensa.
A decir del líder minero, Peñoles lo despidió por razones políticas “por capricho, por violencia, por venganza a nuestro movimiento por reivindicar los derechos de los trabajadores, por exigir mejores salarios y prestaciones, por buscar que las condiciones de trabajo fueran seguras y dignas para los trabajadores”. Fue en enero de 1994, Gómez Urrutia quedó registrado como trabajador de Minera Mexicana La Ciénaga y parte de la sección 120 del Sindicato Minero, del que fue delegado desde julio de ese año, a partir de lo cual gozó de licencia sindical y el 16 de octubre de 2001 fue nombrado secretario general de los mineros, como consignó la reportera Rosalía Vergara en Proceso.
Gómez Urrutia dijo por entonces, en un mensaje a medios, que a raíz de la tragedia de Pasta de Conchos —una mina operada por Grupo México de Germán Larrera— ocurrida el 19 de febrero de 2006 y en donde fallecieron 65 mineros “la empresa Peñoles se asoció con Grupo México tomaron esa decisión, despidiendo a muchos trabajadores, a dirigentes locales, por razones políticas, cosa que la ley lo prohíbe”
#Entérate Boletín.
Luego de 12 años de litigio obtuve un fallo favorable en el juicio laboral que presenté contra Grupo Peñoles, de Alberto Bailleres, esto sentará un precedente en la lucha por el respeto a los derechos laborales. pic.twitter.com/45mWXWnkT8— Napoleón Gómez Urrutia (@NGomezUrrutiaMX) August 25, 2020
No son los únicos casos en los que se ha enfrentado con la familia Baillères.
En mayo de 2023, Gómez Urrutia publicó un artículo en La Jornada en el que señaló como trabajadores de la mina La Herradura, en Caborca, Sonora, pelean por el cumplimiento de sus derechos laborales y por regresar a su sindicato. “El conflicto se inició el 27 de abril, cuando el personal protestó frente a la negativa de la empresa Penmont, perteneciente a Grupo Peñoles, de pagar 10 por ciento de utilidades que les corresponden a unos mil 800 mineros. Es ilógico que una minera, cuya explotación se centra en el oro, plata y cobre, y que asegura tener un incremento en la producción, no produjera ganancias”.
Napoleón Gómez Urrutia habló de “abusos e injusticias” como el que los trabajadores no recibían el pago de su salario. “Todo esto ha sido resultado del desfalco en las arcas de esta sección, que el Sindicato Minero Metalúrgico Frente, grupo de choque impuesto por Peñoles, permitió durante los últimos tres años, es así que no existen los medios para completar dichos pagos que son un derecho inalienable de sus afiliados. Esta inaceptable situación ha llevado a los mineros y a sus familias a padecer una fuerte crisis económica que daña su bienestar y su calidad de vida”.
Por todo ello sostuvo que los trabajadores desconocieron al Sindicato Frente como su representante y pidieron la presencia del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana, que él encabeza, “para afiliarse y regresar a ser parte de una verdadera organización que por más de 80 años ha defendido y luchado por los intereses de los mineros mexicanos”.
“Los abusos de Peñoles son inadmisibles y el apoyo que encuentran en el gobierno estatal es indignante. La detención y agresión ilegal del dirigente local Flavio Vega, las agresiones contra los manifestantes y las injustas órdenes de aprehensión contra los trabajadores van contra la política laboral que impulsamos en la Cuarta Transformación”, apuntó.