"Los libros no deben quemarse, sino que deben leerse para que poder debatir su contenido de manera crítica", dijo el Arzobispo Wojciech Polak.
Varsovia, 4 de abril (EFE).- El primado de Polonia, el Arzobispo Wojciech Polak, pidió hoy perdón por la quema de varios objetos, entre ellos libros de la serie Harry Potter, por parte de un grupo de sacerdotes en una acción que, según sus organizadores, debía servir para combatir la magia y los falsos ídolos.
"Los libros no deben quemarse, sino que deben leerse para que poder debatir su contenido de manera crítica", dijo el primado en un comunicado difundido hoy, con el que pidió disculpas en nombre de la iglesia Católica por la quema de libros.
Los hechos a los que se refiere Polak tuvieron lugar el pasado domingo, cuando un grupo de sacerdotes católicos polacos quemaron varios objetos que consideran contrarios al "respeto a Dios", entre ellos libros o un paraguas de Hello Kitty.
La responsable de esta hoguera es la fundación "SMS desde el Cielo", una organización católica conservadora que dice servirse de las nuevas tecnologías para llevar a los polacos las enseñanzas cristianas.
La fundación colgó en las redes sociales las fotografías de su acción, que sucedió el fin de semana y en la que se ve cómo varios sacerdotes apilan libros y otros objetos con la ayuda de niños, para trasladarlos al lugar donde se realiza la quema.
La acción ocurrió en la ciudad septentrional polaca de Gdansk y entre las llamas pueden verse varios libros, como el de Harry Potter y la cámara secreta o Fahrenheit 451, talismanes, una máscara de madera africana, la figurita de un elefante de la suerte o un paraguas rosa de Hello Kitty.
Las imágenes han sido criticadas por varios internautas, que, por ejemplo, comparan la acción con la quema de libros organizada por las autoridades nazis en la plaza de la Opera de Berlín, en 1933.