Ante una defensa que afirma que el papel de Joaquín “El Chapo” Guzmán ha sido exagerado por testigos, el juicio del capo llegó a su fin esta semana luego de tres meses de que se presentaran cerca de 56 testigos y decenas de pruebas contra el presunto líder del Cartel de Sinaloa.
Guzmán Loera, de 61 años, es conocido por escapar de la cárcel dos veces en México. Para cerrar los argumentos, la fiscal Andrea Goldbarg dijo que “El Chapo” estaba planeando otra fuga cuando fue enviado en 2017 a Estados Unidos, donde ha estado en régimen de aislamiento desde entonces..
Por Tom Hays
Nueva York, 4 de febrero (AP/EFE).—El jurado en el juicio por narcotráfico contra el Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera se ha retirado ya a deliberar después de escuchar durante tres horas y media las instrucciones del juez Brian Cogan, tras concluir tres meses de juicio en una corte federal en Nueva York.
Cogan repasó uno por uno los cargos contra Guzmán Loera y les dejó claro a las siete mujeres y cinco hombres del jurado que al evaluar las evidencias y llegar a una conclusión por unanimidad “más allá de la duda razonable”.
Después de casi tres meses de testimonios sobre una vasta conspiración de narcotraficantes impregnada de violencia, un jurado comenzó hoy las deliberaciones en el juicio en Estados Unidos al capo mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Un juez federal en Brooklyn dará instrucciones a los jurados en la mañana antes de pedirles que comiencen a decidir el veredicto de Guzmán, quien enfrenta cadena perpetua si es declarado culpable.
El jurado ha escuchado meses de testimonios sobre el ascenso de Guzmán al poder como jefe del cártel de Sinaloa. Los fiscales dicen que es responsable de contrabandear al menos 200 toneladas de cocaína a Estados Unidos y una ola de asesinatos en guerras territoriales con otros grupos del crimen organizado.
Guzmán, de 61 años, es conocido por escapar de la cárcel dos veces en México. Para cerrar los argumentos, la fiscal Andrea Goldbarg dijo que “El Chapo” estaba planeando otra fuga cuando fue enviado en 2017 a Estados Unidos, donde ha estado en régimen de aislamiento desde entonces.
La defensa afirma que el papel del capo mexicano ha sido exagerado por testigos colaboradores de la defensa que buscan indulgencia en sus propios casos. En sus argumentos de cierre, el abogado defensor Jeffrey Lichtman dijo que el caso era una “fantasía” e instó al jurado a no creer a los cooperadores que “mienten, roban, engañan, venden drogas y matan personas” para ganarse la vida.
La semana pasada, documentos judiciales revelaron acusaciones inquietantes no escuchadas por el jurado: que Guzmán tuvo relaciones sexuales con niñas de tan solo 13 años. Un narcotraficante colombiano les dijo a los investigadores que el capo pagó 5 mil dólares para que le llevaran a las niñas y que a veces las drogaban, de acuerdo con los legajos.
La apertura de los documentos judiciales se dio a partir de una solicitud de The New York Times y Vice News. El juez federal Brian Cogan ordenó a los fiscales revisar el material –originalmente sellado porque se consideró que no estaba relacionado con los cargos de drogas– y que se hicieran públicas algunas partes días después de que el Gobierno presentó su caso contra Guzmán.
Los abogados del acusado dijeron que su cliente niega las acusaciones.
JUCIO REVELA UN MÉXICO CORRUPTO
En el mismo tribunal en Brooklyn donde los jurados han escuchado testimonios sobre el imperio de drogas de Joaquín “El Chapo” Guzmán, un ex procurador de justicia mexicano se declaró culpable el mes pasado de recibir sobornos de narcotraficantes.
Esa yuxtaposición resalta un tema persistente en el juicio contra Guzmán: cómo la corrupción oficial generalizada en Méxicocomplica los esfuerzos de las autoridades estadounidenses para investigar y capturar a los involucrados en el tráfico de drogas.
Uno de ellos declaró que el cártel de Sinaloa le pagó 10 millones de dólares, dos veces, a un comandante de la Policía Federal mexicana. Otro dijo que el ex jefe de la seguridad federal recibió un pago de 6 millones, al tiempo que un general pagó 100 mil.
Los testigos hablaron de cómo Guzmán tuvo una escolta policial tras escaparse de la prisión y cómo se les pidió a políticos ayuda para embarcar 100 toneladas de cocaína en un buque-tanque. En el testimonio más sensacional, uno de los ex colaboradores de Guzmán dijo que escuchó a éste alardear de que le había pagado 100 millones de dólares al entonces Presidente mexicano Enrique Peña Nieto.
–Con información de AP y EFE