Alonso Ancira adquirió AHMSA en 1991 aprovechando el proceso de privatización emprendido en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari y a partir de entonces se convirtió en uno de los empresarios más importantes de México y tejió una red con políticos. Sus cercanos lo califican como "un empresario hábil, poco ético e inteligente". Amante de los puros caros, el empresario pisó suelo mexicano este día luego de ser extraditado desde España para enfrentar a la justicia.
–Con información de EFE, AP y Vanguardia
Ciudad de México, 3 de febrero (SinEmbargo).– El empresario Alonso Ancira Elizondo, dueño de Altos Hornos de México (AHMSA), está en México luego de ser extraditado desde España, donde permanecía detenido desde mayo de 2019, acusado del delito de lavado de dinero. Pero, ¿quién es el llamado "rey del acero" y qué nexos tiene con políticos mexicanos investigados por corrupción?
Alonso Ancira fue detenido el 28 de mayo en Mallorca, España, por elementos de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), esto luego que el Gobierno de México solicitó una ficha en su contra por su presunto vínculo en el caso de corrupción en la venta de una planta de fertilizantes a Petróleos Mexicanos (Pemex).
Este miércoles arribó al país para concretar su proceso de extradición. Llegó alrededor de las 17:10 horas al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y fue trasladado en una aeronave con matrícula XB-NWD, propiedad de la Fiscalía General de la República (FGR).
El emporio siderúrgico que el empresario Ancira Elizondo construyó durante las últimas décadas le valió ser nombrado como el “rey del acero” en México. En 1991, el empresario de 69 años compró junto con Xavier Autrey la siderúrgica AHMSA durante la privatización emprendida en el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) y fue nombrado director general. En 2016 fue designado presidente del Consejo de Administración de la compañía.
En diciembre de 2020 la empresa Alianza Minerometalurgica Internacional compró el 55 por ciento de las acciones de Grupo Acerero del Norte (GAN), controladora de Altos Hornos de México, y se comprometió a pagar al Gobierno federal el sobreprecio de la venta de la planta de Agronitrogenados.
De acuerdo con la Fiscalía General de la República (FGR), Ancira enfrenta acusaciones por delitos que causaron "grave daño patrimonial" a Pemex derivado de la venta de la planta de fertilizantes, localizada en el complejo de Pajaritos (Veracruz), en el año 2013.
Las investigaciones de la Fiscalía, a cargo de Alejandro Gertz Manero, señalan que la venta de esa planta fue sellada con un sobreprecio de unos 500 millones de dólares por AHMSA cuando Pemex era dirigida por Emilio Lozoya Austin, quien también enfrenta un juicio en México. El argumento es que el valor de Agronitrogenados no superara los 50 millones de dólares, por lo que se considera que el sobreprecio afectó de forma negativa a la petrolera mexicana, además de que aún no funciona por estar obsoleta.
Según la Fiscalía, Ancira cooperó en el lavado de dinero de Lozoya (Ciudad de México, 1974) "pagando por adelantado" para que cuando éste fuera el director general de Pemex se procediera a la "adquisición de una empresa obsoleta e inoperativa por un precio tres veces mayor del que realmente vale en el mercado, perjudicando con ello, además, los intereses públicos" de la nación.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo en diciembre pasado que esperaba el pago de los 200 millones de dólares de AHMSA entregados en la administración de Enrique Peña Nieto (2012-2018) por la compra de la planta de Agronitrogenados. Olga Sánchez Cordero, titular de la Secretaría de Gobernación, reiteró este día que los involucrados en el caso deben devolver "lo que no les corresponde, lo que fue materia de corrupción, que enfrenten proceso y tengamos posibilidad de que se devuelva al erario y a la nación lo que ilícitamente se llevaron".
EL REY MEXICANO DEL ACERO
Formado en Derecho en la Universidad Anáhuac y doctor honoris causa de la University of The Incarnate Word y de la Texas A&M University, ambas de San Antonio, Texas (EU), Ancira se colocó entre los empresarios más reconocidos de México y tejió una red con políticos.
Presidió la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero de 1993 a 1995 antes de verse envuelto en problemas fiscales que le obligaron a salir de México a principios del siglo XXI. Al pactar su regreso en el 2003, la volvió a dirigir en dos ocasiones.
La crisis siderúrgica mundial provocó que AHMSA se declarara en suspensión de pagos en 1999 luego de que adquirió una deuda de más de 2.300 millones de dólares, por lo que se acogió a la Ley de quiebras y suspensiones.
La empresa tuvo que salir de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y Ancira se vio envuelto en un conflicto con una docena de bancos que le reclamaron. Finalmente, con una orden de búsqueda y captura huyó del país con destino a Israel, donde vivió tres años, según consigna la agencia de noticias EFE.
"Cuando vivió en ese país mostró interés en un yacimiento cerrado y descubrió una nueva veta de cobre en las llamadas minas del rey Salomón. Esta nación lo reconoció en 2017 con el Premio Jerusalén por su contribución al pueblo de Israel. Lo consideran como un rey", describe EFE en un perfil del empresario.
Regresó a México al terminar el Gobierno del Presidente Vicente Fox (2000-2006). La antigua deuda que lo hizo huir se quedó en el limbo de la ley general de quiebras, aunque negoció un plan de pagos con sus acreedores.
Ya en México, puso en marcha nuevos proyectos en AHMSA y en 2013 le vendió a Petróleos Mexicanos, entonces dirigido por Emilio Lozoya.
Ese 2013 consiguió algo que tenía más de 20 años que no se daba: un Presidente de México visitó Monclova.
“El Presidente Enrique Peña Nieto dio un discurso que representó a Ancira como un emprendedor dinámico y le dio las gracias por ‘creer fuertemente en el desarrollo y el progreso que México espera’”, citó el diario The Wall Street Journal en un artículo publicado en agosto de 2013.
En el mismo artículo, Ancira considera que su carrera se caracteriza por algo: “Prefiero llamarle suerte y mucho trabajo. Necesitas tener a la gente correcta, y el ímpetu correcto para aprovechar las oportunidades”.
La empresa AHMSA, fundada en 1941 y propiedad de Ancira y Autrey desde 1991, es considerada la mayor siderúrgica en México, cuenta con 20 mil trabajadores y sus principales plantas se localizan en el estado norteño de Coahuila.
"POCO ÉTICO E INTELIGENTE"
En un artículo publicado en la revista Expansión en 2009, se cita a algunos acreedores de AHMSA que lo describen así: “Es un empresario hábil, un minero talentoso, muy ‘pagado de sí mismo’, poco ético, inteligente”.
“Alonso todo lo sabe: es de los que quiere ir a un bautizo y ser el niño”, cita la publicación de negocios.A Ancira le gusta el glamour. En las ruedas de prensa y eventos del sector era común verlo fumar puros Arturo Fuente Opus X.
En una entrevista publicada en noviembre del año pasado, Alonso Ancira reveló que estaba dispuesto a devolver al Estado mexicano 200 millones de dólares de la planta de fertilizantes inservible que vendió a Pemex si López Obrador le ofrecía “disculpas” por lo que considera una “persecución injusta".
“Me tendría que dar plazos y tiempos“, aseguró Ancira en entrevista con el periodista Carlos Loret de Mola. “Soy un hombre de negocios, lo negocio todo menos a mi hija”.
ANCIRA Y ODEBRECHT
Lozoya y Altos Hornos de México han sido mencionados, pero nunca acusados –hasta ahora, parece–, en el escándalo de corrupción en torno a la empresa brasileña Odebrecht. La investigación conocida como “Operación Autolavado” indaga pagos ilícitos realizados por la constructora a funcionarios de Latinoamérica a cambio de contratos, esto ha derivado en varios arrestos y enjuiciamientos en diversos países en los últimos seis años, sin incluir a México.
Exdirectivos de Odebrecht han presentado pruebas a los fiscales brasileños que implican a Lozoya en el escándalo de sobornos de la compañía, pero el exfuncionario mexicano niega haber recibido dinero. En 2019 el Gobierno federal lo inhabilitó para el ejercicio de cargos públicos durante 10 años.
De acuerdo con las investigaciones, AHMSA pagó 3.7 millones de dólares en 2014 a una empresa llamada Grangemouth, a la que dijo haber contratado para que le asesore en la selección y apreciación de equipos y en facilitar compras de carbón metalúrgico para la producción de acero. Grangemouth ha sido identificada como una posible empresa fantasma de Odebrecht.
