La Secretaria de Gobernación confirmó que Ancira ya estaba en camino a México, como parte de su proceso de extradición desde España, en un avión de la Fiscalía General de la República (FGR). Cuando arribe a territorio nacional, comenzará su proceso judicial por presuntos casos de corrupción.
México, 3 feb (EFE).- El empresario Alonso Ancira, conocido como el Rey del Acero, está siendo extraditado en un avión desde España a México para enfrentar los delitos de corrupción y blanqueo de los que es acusado, según confirmó este miércoles la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
“Tengo conocimiento de que (Ancira) está volando en un avión de la Fiscalía General de la República (FGR) de España a México y tendrá que enfrentar un proceso penal“, dijo la funcionaria en conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional.
Recordó que, tal y como dijo el Presidente, Andrés Manuel López Obrador, los involucrados en el caso deben devolver “lo que no les corresponde, lo que fue materia de corrupción, que enfrenten proceso y tengamos posibilidad de que se devuelva al erario y a la Nación lo que ilícitamente se llevaron y no les corresponde”.
De acuerdo con información de algunos medios mexicanos que citaron a fuentes de la FGR, Ancira, propietario de la empresa Altos Hornos de México (AHMSA), salió de la cárcel de Palma de Mallorca, en España, en la que estaba recluido y fue entregado a las autoridades mexicanas para ser extraditado a México.
Se espera que llegue en la tarde a Ciudad de México, si bien se desconoce la hora.
Ancira se enfrenta en México a acusaciones por delitos que causaron “grave daño patrimonial” a la compañía estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), según ha informado la Fiscalía mexicana.
La investigación contra Ancira se originó por una denuncia que Pemex presentó en marzo de 2019 “con motivo de una serie de delitos que motivaron un grave daño patrimonial a esa empresa”.
Los delitos que se le atribuyen están relacionados con la investigación en marcha de la venta con un supuesto sobreprecio de una planta de fertilizantes hecha a Pemex en 2013.
Según los investigadores, la venta de esa planta fue sellada con un sobreprecio de unos 500 millones de dólares por AHMSA cuando Pemex era dirigida por Emilio Lozoya Austin, quien también se encuentra enfrentando un juicio en México.
Fuentes del Gobierno de México indicaron que la planta de fertilizantes no tenía un valor que superara los 50 millones de dólares, por lo que se considera que el sobreprecio afectó de forma negativa a Pemex, además de que todavía no funciona por estar obsoleta.
El auto judicial argumenta que Ancira cooperó en el blanqueo de capitales de Lozoya, “pagando por adelantado” para que cuando este fuera el director general de Pemex se procediera a la “adquisición de una empresa obsoleta e inoperativa por un precio tres veces mayor del que realmente vale en el mercado, perjudicando con ello, además, los intereses públicos”.
La Audiencia Nacional española falló que los delitos por los que México reclama a Ancira se pueden considerar como tales también en España y descartó tanto que los hechos hayan prescrito como la persecución política que alegaba la defensa de Ancira.
El Presidente López Obrador ha dicho en diversas ocasiones estar a la espera de que AHMSA haga el pago de los 200 millones de dólares entregados en la administración federal anterior, encabezada por Enrique Peña Nieto, por la compra de la planta de Agronitrogenados.
Sin embargo, a mediados de enero, aseguró que los nuevos socios de AHMSA aceptaron devolver los 200 millones de dólares al Gobierno, lo cual harían en varios pagos, aunque aún se espera que la FGR determine si es conveniente este acuerdo.