Luego de una audiencia de más de cinco horas de duración, el Juez Marco Antonio Fuerte determinó que el extitular de la PGR deberá de permanecer en prisión; sin embargo, seguirá en la Torre Médica del Cereso de Tepepan hasta que mejore su salud.
Ciudad de México, 2 de diciembre (SinEmbargo).- El exprocurador General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, continuará en prisión ya que le fue negada la solicitud para cambiar su medida cautelar a prisión domiciliaria.
Durante la audiencia celebrada este jueves a las 18:00 horas y con una duración de más de cinco horas en el Reclusorio Norte, el Juez Marco Antonio Fuerte Tapia —adscrito al Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte— determinó que Murillo Karam no podrá modificar su medida cautelar luego de ser detenido y procesado por los delitos de tortura, desaparición forzada y contra la administración de la justicia en el caso Ayotzinapa.
Sin embargo, el impartidor de justicia añadió, que el exprocurador deberá de continuar su permanencia en la Torre Médica del Centro de Reinserción Social (Cereso) Tepepan, donde ha sido tratado por problemas de salud.
La defensa del extitular de la PGR solicitó este jueves al Juez Fuerte Tapiamodificar la prisión preventiva justificada dictada en agosto, por la prisión domiciliaria, luego de los delicados problemas de salud que ha enfrentado desde octubre.
El pasado 30 de noviembre, la Fiscalía General de la República (FGR) solicitó tres meses más para concluir la investigación contra el exprocurador.
El Juez de Control dio tres días a la FGR y a la defensa para que acrediten por escrito la posibilidad o imposibilidad de que el exprocurador comparezca o que él mismo evalúe su asistencia al Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte.
También ese día, Murillo Karam fue dado de alta esta mañana del Hospital Belisario Domínguez y trasladado al Cereso para continuar su tratamiento, luego de pasar varios días en el área de urgencias.
Desde el pasado 24 de octubre, el exprocurador estuvo en terapia intensiva, tras haber sido sometido a una cirugía urgente en el Hospital de Cardiología, donde médicos lo intervinieron por una arteria obstruida. El 3 de noviembre fue enviado al Belisario Domínguez, ubicado en el oriente de la capital, una vez que su salud fuera estable.
Murillo Karam se encontraba en prisión preventiva en el Reclusorio Norte por los delitos de tortura en contra de cuatro personas, contra la administración de justicia y por la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa, en 2014.
Sin embargo, el pasado 19 de octubre fue trasladado al Hospital General Xoco para atender su estado de salud y debido a que el exfuncionario presentó un complicado cuadro clínico, tuvo que ser llevado al Instituto Nacional de Cardiología, donde los médicos determinaron practicarle de emergencia una cirugía Endarterectomía Carotídea de Alto Riesgo, lo que le permitió tener un mayor flujo sanguíneo.