La llamada “percepción cooperativa o colectiva” se basa en la transmisión de datos por los propios vehículos y por las estaciones de sistemas de transporte inteligente, equipadas con cámaras y sensores LiDAR.
Ciudad de México, 2 de noviembre (RT).- Investigadores del Centro Australiano de Robótica de Campo, de la Universidad de Sídney, lograron recientemente desarrollar una nueva tecnología que permite a los vehículos inteligentes detectar a los peatones o ciclistas que puedan quedar ocultos en puntos ciegos o, incluso, detrás de árboles y edificaciones o de otros automóviles.
Financiado por el Centro de Investigación Cooperativa iMOVE de Australia, y en colaboración con la compañía de soluciones para vehículos conectados Cohda Wireless, el proyecto exigió tres años de investigación.
En su último informe, los creadores detallaron que para el logro de una capacidad de detección mejorada recurrieron tanto a la vinculación de vehículos entre sí como a redes de sensores en las vías públicas. De ese modo, un coche dotado de dicha tecnología, denominada “percepción cooperativa o colectiva” (CP, por sus siglas en inglés), recibe los datos transmitidos por otros autos y por las estaciones de sistemas de transporte inteligente (ITS, por sus siglas en inglés), equipadas con cámaras y sensores láser o LiDAR.
Según el equipo, el efecto de su creación se puede comparar con una radiografía, ya que los automóviles unidos a esa red dispondrán de una visión de “rayos X” que les permitirá percibir transeúntes y posibles obstáculos que se encuentren fuera de su visibilidad directa.
“Nuestra investigación ha demostrado que un vehículo conectado puede ‘ver’ a un peatón al otro lado de una esquina. Más importante aún, demostramos que los vehículos autónomos conectados pueden interactuar de manera autónoma y segura con los peatones que caminan o corren, confiando en la información de una estación vial ITS”, aseguró el investigador principal del proyecto, Mao Shan.
Uno de sus colegas, el profesor Eduardo Nebot, subrayó por su parte que la nueva tecnología implica “un cambio de reglas para los vehículos autónomos y operados por humanos”, y se espera “que mejore sustancialmente la eficiencia y la seguridad del transporte por carretera”.
“Al usar el sistema ITS, el vehículo autónomo conectado logró tomar una acción preventiva: frenar y detenerse antes del área de cruce de peatones, en base al movimiento previsto del peatón”, compartió Nebot.