Las autoridades del Estado de México acreditaron la responsabilidad de la sentenciada, además, informaron que la mujer enfrenta otro proceso por trata de personas en la modalidad de mendicidad.
Por Javier Miranda
Ciudad de México, 2 de noviembre (AfondoEdomex/SinEmbargo).- María de los Ángeles Vela Almazán, recluida en el penal de Barrientos de Tlalnepantla, fue sentenciada a 33 años nueve meses de prisión por obligar a su hija menor de edad a sostener relaciones sexuales con hombres, a cambio de dinero.
La Fiscalía de Justicia del Estado de México informó que el Ministerio Público acreditó la responsabilidad de la mujer en el delito de trata de personas en la modalidad de prostitución ajena.
Aseguró que la mujer enfrenta otro proceso legal por trata de personas en su modalidad de mendicidad ajena, pues al parecer obligaba a otra de sus hijas, de nueve años, a pedir limosna en Atizapán.
La Fiscalía mexiquense agregó que Vela Almazán llegó de Tamaulipas en febrero del 2017 y se estableció en Atizapán, donde obligaba a su hija adolescente a tener relaciones sexuales con choferes de autobuses del transporte público y de tráileres, a cambio de dinero.
El Representante Social de #FiscalíaEdoméx acreditó la participación de María de los Ángeles Vela Almazán, en el delito de trata de personas, modalidad de prostitución ajena, por lo que un Juez en Tlalnepantla le dictó una sentencia condenatoria de 33 años y 9 meses de prisión. pic.twitter.com/2ZN7itRQbb
— Alejandro J. Gómez (@FiscalEdomex) 2 de noviembre de 2018
Afirmó que de febrero a junio de ese año lo mujer prostituyó a su hija, a la que también obligaba a acudir a hoteles de Atizapán y Cuautitlán Izcalli, para tener relaciones con hombres a cambio de dinero.
Dijo que el Ministerio Público acreditó la participación de Vela Almazán en el citado delito, por lo que fue sentenciada a 33 años nueve meses de prisión, quien permanece en el penal de Barrientos, en Tlalnepantla; el juez también fijó multa de un millón 860 mil 930 pesos y deberá pagar 75 mil 400 pesos como reparación del daño, aunado a que sus derechos civiles y políticos quedaron suspendidos.
Expresó que la mujer enfrenta otro proceso penal por el delito de trata de personas en la modalidad de mendicidad ajena, pus al parecer obligaba a otra de sus hijas, de nueve años de edad, a pedir limosna en calles de Atizapán.